VIII. Mini one shotsitos

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Día en la playa

El sol de verano pegaba fuerte en el asfalto de la calle, tanto que se lamentó ir caminando hasta la casa de Shinichiro en vez de tomar un autobús, su bicicleta o moto, o al menos haber ido con unas sandalias más cómodas que esas que se veían bonitas pero ya le dolía entre medio de los dedos de tanto caminar.

El sol la hacía sudar y aunque se había puesto protector se sentía horrible y grasoso, al igual que su pelo.

Ella quería llegar bonita.

—¡_____! —La pequeña Emma al verla desde el jardín de su casa donde jugaba con los amigos de Manjiro, se abalanzó corriendo hasta ella abrazándola.

¿Llegar bonita? No, había llegado hermosa, como siempre, y más con ese vestido playero que le llegaba hasta encima de las rodillas.

Shinichiro, échale culpa al sol por esa rojez en tu cara, ¿cómo va a ser porque te sientes paralizado al ver sonrisa tan bonita de ella al abrazar a tu hermana?

—¡perdón por llegar tarde! —ciertamente, estaban todos en el jardín esperándola, ¿no? Los niños estaban muy ansiosos para ya ir a la playa. Shinichiro había prometido llevar a los niños, para no aburrirse también invitó a sus amigos.

—Tranquila, seguimos esperando a Waka también —Manjiro contestó por su hermano. Era tan inteligente pero tan tonto con ella, el niño siempre deseó nunca enamorarse tanto como su hermano, lo volvería débil.

—Qué alivio, me preocupé de que estuvieran esperando por mí. —se sentó al lado de Shinichiro, que permaneció en la banca— ¿que pasa Shin?

Su silencio en vez de la alegría con que la saludaba todos los días le pareció ciertamente rara.

—N-nada, solo estaba distraído.

Iba a contestar hablando sobre lo distraído que estaba, o quejándose del sol y cómo sus sandalias la habían lastimado. Pero en vez de entablar una conversación, vio llegar a Wakasa en su bicicleta.

Alguien que llega tan tarde al menos estaría preocupado o llegando apurado, pero no. Su cabello rubio hacia la perfecta combinación con el cielo, su camisa blanca a medio abotonar no estaba ni arrugada y su pecho no parecía estar exaltado de haber pedaleado rápido.

Antes de estacionar con su bicicleta, bajó sus lentes negros lanzando una mirada hacia dónde estaba _____ y shinichiro.

¿a quién crees que puedes seducir así? Idiota.

—Buenas, gente —saludó con la mano desinteresado, esa misma cara de siempre.

—¡estábamos esperando por ti! —exclamó Manjiro impaciente pero emocionado.

Después de que todos saludaron a Waka, emprendieron su camino hasta la playa. Caminando.

Sino Wakasa hubiera llegado cien veces más rápido, pero Shinichiro dijo que como era una salida con niños debíamos caminar en vez de andar en moto.

De todos modos, la bicicleta fue una buena opción, iba al mismo paso que sus amigos pero sentado.

Mientras hablaban de cualquier cosa de camino a la playa, _____ no podía disfrutar la brisa veraniega o la charla, toda la caminata pasó viendo con ojitos la bici de su amigo. Sus pies ardían como el infierno, quería sentarse.

Wakasa pretendía molestarla, lo veía con unos ojitos tan tristes que pensó hasta si querría volver con él.

Todas sus ilusiones se esfumaron cuando vio a sus pies que caminaban dolorosamente con una rojez horrible entre sus dedos.

𝐀𝐑𝐄 𝐖𝐄 𝐓𝐎𝐎 𝐎𝐋𝐃 𝐅𝐎𝐑 𝐓𝐇𝐈𝐒? - 𝒔𝒉𝒊𝒏𝒊𝒄𝒉𝒊𝒓𝒐 𝒙 _____Donde viven las historias. Descúbrelo ahora