Beta (ABO)

Capitulo 46

Lleno de dudas y confusión, Tao Li finalmente se vistió obedientemente.

　　mismo.

　　Pu Yaozhi también se vistió lentamente.

　　Después de vestirse, varios policías uniformados registraron cada rincón de la casa de manera formulada como de costumbre. Después de "confirmar" que no había artículos prohibidos ni cosas sucias en la casa, inmediatamente les indicaron a los dos que ya estaba bien. Bajó las escaleras y se fue.

　　Después de la tortura en la casa, Pu Yaozhi no podía esperar a escuchar a la policía decirle que podía irse. Casi se dio la vuelta y caminó hacia el ascensor.

　　Tao Li lo siguió con entusiasmo.

　　Siguió a Pu Yaozhi y lo miró con entusiasmo.

　　La puerta del ascensor se abrió y los dos entraron juntos.

　　La puerta del ascensor se cerró. Dentro del ascensor, Tao Li preguntó expectante: "Entonces, ¿cuándo será la próxima vez ...?"

　　Pu Yaozhi: "..."

　　No quería que volviera a suceder.

　　Al ver que Pu Yaozhi no respondió, Tao Li pensó que la otra parte no escuchó con claridad, por lo que volvió a preguntar.

　　Esta vez, Pu Yaozhi tuvo que responder: "Depende de cuándo la empresa tendrá vacaciones la próxima vez".

　　Tao Li se sintió tranquilo y luego sonrió brillante y expectante a Pu Yaozhi.

　　Al tomar el ascensor hasta el primer piso, Pu Yaozhi miró la hora y dijo: "Yo me iré primero, puedes hacerlo tú mismo".

　　Tao Li asintió obedientemente y vio a Pu Yaozhi irse.

　　Cuando Pu Yaozhi se fue, Tao Li cambió su mirada y se preparó para llevar el auto a casa.

　　Inesperado.

　　Cuando se dio la vuelta, descubrió que el auto de Gong Shen todavía estaba allí.

　　Por un momento, Tao Li recordó las acciones de Gong Chen en el ascensor hace un momento, así como la actitud demasiado extraña de Gong Chen hacia Pu Yaozhi, una beta de bajo nivel no pudo evitar sentirse aún más extraña en su corazón.

　　Frunció el ceño y caminó hacia el auto de lujo de alta gama.

　　Caminó hasta el asiento trasero, levantó la mano y llamó a la ventanilla de cristal.

　　Se bajó la ventana de cristal y el rostro frío y siempre serio de Gong Shen apareció en sus ojos al instante.

　　Aunque el cambio no fue obvio, Tao Li, que era sensible y observador, aún podía darse cuenta de un vistazo que el estado de ánimo de Gong Shen en ese momento era mucho peor que antes.

　　En la superficie, parece tranquilo y calmado, pero de hecho, su estado de ánimo es extremadamente malo.

　　Esa mirada...

　　Era como si acabara de experimentar algo.

　　La mente de Tao Li iba muy rápido, pero su rostro permanecía tranquilo.

　　Sonrió con su característica sonrisa ligera en dirección a Gong Shen, "Sr. Gong, ¿me está esperando aquí? El Sr. Gong está tan ocupado que pensé que se iría inmediatamente después de enviarme arriba".

　　Dentro del coche, el ambiente era deprimente.

　　Gong Shen ni siquiera miró hacia atrás y de repente dijo: "Retira tu sonrisa".