Chica Fresa ; Daerin

Cita y rara confesión.

Después de esa noche, Danielle no dejaba de pensar en Haerin en ningún momento. Era su primer pensamiento al despertar, y el último al irse a dormir, solo pasaron unos días para que descubriera que le gustaba, y sentía un poco de miedo por eso.

- Aún no cumples mi dibujito. - Le recordó Haerin, que estaba recostada en el pecho de Danielle, jugando por el pelo de la misma. Mientras también observaba como Danielle jugaba desde su celular.

Se volvió un poco normal tanto contacto físico entre ellas.

Danelle deja su celular, y coloco ambos brazos sobre el cuerpo que prácticamente estaba sobre ella, dandole así un cálido abrazo.

- Es cierto, ¿Te parece si vamos ahora? No hay nada interesante que podamos hacer aquí. - Propuso Danielle, cerrando sus ojos por la linda sensación de las caricias que le daba Haerin.

- ¡Perfecto! - Respondió casi al instante Haerin.

Estaban en la casa de Danielle, el lugar estaba totalmente habitado solo por ellas dos, ya que los padre de la mayor estaban como normalmente están, de viaje por negocios, así que tenían para su completa disposición una casa entera, en la que se la pasaron todas ls tardes esos días.

Como se veía en el dibujo, estaban en un parque, pero no iban tomadas de las manos. Danielle no recordaba ese detalle, o eso creía Haerin, mientras que la otra no tomaba la iniciativa.

Iban hablando de temas triviales para ellas, saltando de uno en otro rápidamente por Haerin, pero eso no molestaba en lo mas mínimo a Danielle, con el tiempo empezó a acostumbrarse a la forma de ser de Haerin.

Era un momento bastante agradable para las dos.

- ¿No vas a tomar mi mano? - Pregunto Haerin, dejando de caminar y se cruza de brazos, mirando a Danielle con el ceño fruncido.

A pesar que Danielle estuviera muy nerviosa por lo que iba a hacer, sonrío y se le acercó. Colocando sus manos en ambas mejillas de Haerin y juntando sus frente para luego moverla, con una sonrisa en sus labios.

- Eres adorable. - Dijo Danielle. Haerin se sonrojó un poco, y dejo de cruzarse se brazos para colocar sus manos sobre las de Danielle.

Estaban en una pequeña burbuja. En donde solo existian ellas dos. Se miraban mutuamente con un brillo en los ojos de cada una.

Haerin nunca pensó que encontraría a alguien como Danielle; alguien que la hacía sentir especial, linda, y que le daba toda la atención que pedía, que no la juzgaba, y que no le importaba... Su pequeño problema.

Se sentía feliz cuando estaba con Danielle.

- Te quiero comprar un helado. Vi un puesto por ahí, vamos. - Y apartó sus manos de la cara de la otra, y con cuidado sostuvo la mano de Haerin entre la suya, y la entrelazó.

Sintió ese cosquilleo en su estómago, esas famosas mariposas.

Bueno, ambas sintieron el aleteo de estas.

Ya en el puesto de helado, y con un helado en manos, Danielle lucía incluso mas nerviosa. Parecía que estaba sudando y so alarmó un poco a Haerin.

- Oye porque estás sudando. ¿Pasa algo? - Pregunto antes de dar unas lamidas a su helado.

Bueno.. ¿Y como le decía?

- Mis padre están extraños. ¿Sí? Anoche hablamos, y es raro que hablemos la verdad, pero me pidieron disculpas por no prestarme atención estos últimos años yo... Les hablé de tí, y te quieren conocer. - Hablo, muy rápido, Danielle.

Aún no entendía nada, todo pasó muy rápido y parecía un sueño. Siempre soñó con eso, una reconciliación con sus padres. Pero ¿Entonces por qué estaba nerviosa? Básicamente tenía miedo de que a sus padres no le agradarán Haerin, o viceversa. Anoche no durmió pensando en eso.

Haerin se hecho a reír. Eso dejo algo confundida a Danielle, que casi se le cae su helado.

- ¿Y tú por qué te ríes? - Dijo en tono burlón Danielle.

Haerin se rió por unos momentos más, hasta que se calmó y después de tomar aire, habló.

- Es que pensé que ibas a decir que te gusto. -

- Bueno, eso también. Me gusta. -

Haerin abrió sus ojos como plato y el pobre helado terminó cayendo al suelo.

- A mi también me gustas. -

Y bueno, a Danielle también se le calló el helado.

Por fin la famosa confesión ahhh 😭. Quería que fuera algo así, salió como sería, algo muy ellas ¿Saben?

Por cierto, cambié la portada.