Capitulo doce

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El sabe que ese día debe estar solo. Sus amigos la pasarían mal al verlo así, lo sabe. Incluso le arruinaría el día a algunos de los alumnos de hogwarts con su humor por los pisos.

Ayer, 30 de octubre, hablo con Dumbledore para saber si hoy, 31 de octubre, podía saltearse las clases. Albus primero dijo que no iba a ser posible, pero al parecer recordó que día era mañana y dijo que si sin explicaciones.

Eso puso un poco feliz a Harry, le gusta que la gente tenga un poco de empatía. Le agradan las personas que dejen salir su empatía.

Al comienzo de la noche, 00:00 a.m comenzó a tener pesadillas. Vio como Voldemort asesino a sangre fría a sus padres. Y cosas que no le gustaría nombrar.

Al comienzo del día no pudo dormir, así que simplemente fue a la enfermería para que le diesen una poción para evitar el sueño. Así por lo menos sobreviviria el resto del 31 de octubre.

Antes de que comenzasen las clases, se dirigió inmediatamente hacia las cocinas para pedirles algo a los elfos. Ellos dijeron que si, y se preocuparon un poco por el. O eso es lo que el pensó. En realidad los elfos casi lloran, se preocuparon a montones.

Desde 1er año que mantiene una extraña amistad con los elfos de allí, aveces cambian de elfos sin explicación alguna. Lo que lo entristece un poco. Pero luego recibe una carta del elfo diciéndole que estaba bien.

Dejando eso de lado, agarro la gran bandeja y salió corriendo del gran comedor. No quería que los alumnos de allí lo vienen así. Los sly se burlarían de el, los Puff sentirían tristeza por el, los Claw le enviarían algo por empatía y los Gry lo buscarían para brindarle su apoyo mutuo.

Y no quería eso.

Simplemente quería estar solo, no quería pensar en nada más, más que en sus padres. No quería preocuparse por exámenes, ni por Snape quitándole puntos, ni por los Sly molestando o cosas así.

Solo quería preocuparse por eso, por sus padres.

No sabe a dónde se dirige, simplemente va hacia donde sus piernas lo dirijan, simplemente quiere escapar un tiempo de todo.

Cuando se enchufó con la realidad nuevamente, se dió cuenta que estaba en un pequeño apartado del jardín, donde había algo parecido a una habitación.

Que, aunque era pequeña, debía servir para el. Ahora, el misterio del año, ver si estaba abierto. Me acerqué, tanteé la manija de la puerta y la abrí.

Adentro había una gran ventana que daba hacia el jardín, una pequeña cama y una mesita. Sin contar un pequeño apartado para un baño.

Perfecto.

Pensó, dejo la bandeja de comida en la pequeña mesita y se sentó en la cama. Se puso a pensar miserablemente en sus padres. El sabe que a ellos no les gustaría verlo así, Pero no puede evitarlo.

La mayoría piensa que ser el elegido es fácil, Pero es todo lo contrario. No poder tener un maldito año en paz, un loco intentando matarte detrás tuyo. Tener un grado de atención insoportable, y cosas que prefiere no nombrar.

Solo quiere un año en paz, poder pasarla bien, con sus amigos, alguna futura pareja, ¿Quien sabe? En algún momento llegará la persona correcta. No sabe cuándo, solo sabe que Merlin se la mandara cuando lo vea necesario o cuando lo vea indicado.

Solo espera que en el momento en el que llegue esa persona, quiere que se preocupe por el, que entienda su posición, que lo conozca demasiado para ver, incluso, sus pequeñas facciones. Y otras cosas que le encantarían.

Pero, por el momento, solo puede imaginar...

[...]

Draco buscaba de un lado al otro a Harry, aún no puede creer que lo perdió de vista.

Se preguntarán, ¿Que paso? Simple.

Draco siempre se levanta dos horas antes del desayuno para poder prepararse tranquilamente y perseguir a su Harry, sin que esté se de cuenta, hasta el gran comedor.

Este día el sabe lo que ocurre. Sus dos años anteriores ya probaron su experiencia con este día. Básicamente, su Harry nunca dormía en las noches. Ya que en la mañana se le notaban las ojeras por el sueño insuficiente.

Además, siempre iba una hora antes a las cocinas para poder pedir algo de comida para el resto del día. Y así no tener que salir de su escondite.

En primer año, su Harry se había escondido en los baños de prefectos. En segundo año, en la sala de menestres. Y, ahora, no sabe a dónde fue.

Cuando le comento a Pansy que había hecho las paces con su Harry, está le dijo que debía comenzar a pasar más tiempo con el. Así que, siguiendo el consejo de la misma, se digno a pasar este día con su Harry.

Pero, Merlin no se la iba a poner fácil. Así que, como un tonto, tardo más en el baño que de costumbre. Perdiendo así el rastro de su Harry.

El también tiene pensado saltearse las clases, le pidió a Blaise y Pansy que dijiesen que estaba enfermo. Seguro que los profesores le iban a creer. Ya que el NUNCA se saltea las clases.

Pero eso no es lo importante ahora, lo más importante es poder encontrar a su Harry y poder poner en marcha su plan de hoy.

Lo denominó el "Plan Harry Potter-Malfoy". Ese iba a ser el plan de hoy en adelante. Aunque, cuando mira el calendario sabe que no tiene mucho tiempo. Decidió que iba a llevar a su Harry como cita para el baile de navidad.

Tenía ganas de dejar a todo Hogwarts con la boca abierta, y no se iba a quedar con las ganas.

Ahora, decidio buscar en el jardín. El conoce un pequeño apartado, que es una habitación con un pequeñísimo baño. El sabe ir allí cuando no tiene paz en la biblioteca.

Corrió por el largo pasillo, sus caros zapatos resonaban por el piso de mármol. Sus ojos miraban de un lado a otro. Intentando encontrar a algo...o mejor dicho alguien.

Su túnica revolotea por la velocidad a la que va. Sabe que debería ir más lento, pero no puede, o mejor dicho. No quiere detenerse. Así que sigue corriendo sin mirar atrás.

Al llegar al jardín, decide comenzar a caminar lento. Sabe que hay una gran ventana en la habitación secreta. Así que debe caminar con cuidado. Y eso hace.

Al llegar, por fin, a la entrada de la habitación, decide entrar de una vez. Haciéndose el que tiene problemas y contárselos a su Harry. Este, tendría compasión por el y le contaría sus penas. Y PUM, punto para Draco Malfoy.

Al abrir la puerta, sus iris grises se encuentran con los esmeraldas. Harry estaba sentado en la cama frente a la ventana. Cruzado de piernas, espalda recta y cabello revoleteando.

Merlin santo.

Pensó Draco al ver a Harry.

–¿Malfoy?– dijo Harry confundido.

–oh, Potter. ¿Que haces aquí?–

–yo...uhm– Harry no sabía cómo continuar. Así que suspiro y dijo;–Simplemente no quería ir a clases, estoy muy cansado. Además, con el día de hoy...– dando a entender su punto.

Draco puso una mueca de tristeza. Todo el colegio estaba con un humor bajo al saber que el elegido estaría mal este día. La verdad es que Draco puede ver la falsedad tras sus horrendas muecas de tristezas falsas. Incluso su Harry ya sabe que es solo actuación.

–oh...ya veo...Déjame decirte que mi tristeza si es real, Potter. No soy como esos estúpidos Hufflepuffs o Ravenclaws idiotas que fingen estar tristes para poder ganar tu amistad.– dijo medio enojado, sacando una carcajadas de Harry.



El resto del día lo pasaron entre historias y anécdotas. Lo que más le gusto a Draco fue hacer sonrojar a su Harry con uno de sus piropos doble intención. Y saber que puso distraerlo de un mal día.

💚❤️💚❤️

Obsesión -Drarry-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora