Capítulo IV. ¿Lo repetimos?

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[Minhyun]

Hace días que Aron no me busca y yo no encuentro el valor de llevar acabo mi plan, siento que en cualquier momento moriré... sonará extraño pero ¡si! moriré por no tenerlo a mi lado lo necesito, mi cuerpo lo necesita, yo lo necesito, sus caricias sus besos todo de el lo necesito, quiero repetir una y otra vez lo que paso en el baño... pero saben hay un pequeño inconveniente ¡que no tengo el valor de acercarme! y tampoco lo veo por ningún lado aunque a lo lejos e visto a Kyuhyun persiguiendo a Donghae solo ellos sabrán su dialecto aunque bueno yo se y aunque el me lo niegue esta enamorado del Romeo de pacotilla, sonrió y sigo mi camino hasta que a lo lejos cerca de baño lo encuentro ahí parado ¡Esta es mi oportunidad! sonrió y sin que el se de cuenta que lo e visto paso como si nada pasara meto mis manos en la bolsa de mi pantalón y camino viendo hacia el piso pensativo como si este tuviera algo más entretenido que todo lo demás hasta llegar al cubículo que supuestamente usare, espero un rato y salgo a lavarme mis manitas cuando estaba sacudiendo el agua que quedo en mis manos siento como alguien me acorrala contra la pared colocando mis manos a un costado siendo sujetadas de mis muñecas en un movimiento rápido y ágil, al ver a la persona noto que es el quien me a tomado por sorpresa.

-Porque pasas sin verme -hablaba tan cerquita de mi que siento su aliento chocar en mi rostro-
-Lo... lo siento... -me es difícil hablar así teniéndolo tan cerca, siento como mi respiración se empieza a acelerar lentamente- no te vi... lo siento
-Solo... -se acerca a mi oído y percibo el olor de su perfume... es tan embriagador- solo por esta vez lo dejare pasar -al terminar de susurrar en mi oído de una manera sexy mordió mi lóbulo-
-Si la próxima vez pasa igual que me pasara -dije de una manera retadora-
-Solo -término de pronunciar y me beso desesperadamente metiendo sus manos debajo de mi camisa del uniforme haciendo que soltara suspiros tanto desee este momento que no lo desaprovecharía por nada del mundo, de pronto siento como retira sus manos mientras yo gruñó- lo siento pero podrían vernos...
-Y crees que a mi me importa en estos momentos -le contestó desesperadamente- ahora solucionas el problema que empezaste

Sonrió y me encerró en el cubículo de alado donde el apresó mis labios en un beso hambriento donde su lengua se abrió paso para jugar con la mía mientras que nuestras manos luchaban por quitarnos la estorbosa ropa, el repartía besos por mi cuello y de vez en cuando mordía el lóbulo de mi oreja para luego besarme con desespero, en lo que el quitaba mi camisa yo desabrochaba su pantalón que era lo único que me faltaba por quitarle, sin poder evitarlo entierro mis uñas en sus hombros al sentirle morder mi pezón, mientras que con su manos quitaba mi pantalón quedando al igual de desnudos, mientras el repartía besos por todo mi pecho y mordía yo solo enterraba más mis uñas en su hombro con solo el simple rose y tacto de su boca me hacía sentir bien, siento como sube de nuevo hasta mi cuello y lo muerde haciendo que un gadeo salga de mis labios, sin quedarme atrás lo estampó contra la pared y comienzo a besar su cuello así como el lo hizo con migo solo que yo... bueno dejare más marcado mi territorio, paso por su pecho hasta su gran miembro el cual tomo entre mis manos y lo dirijo a mi boca comenzando un pequeño vaivén, escuchando sus gemidos agudos, lo saco de mi boca y comienzo a lamerlo cual paleta se tratará, de pronto siento sus manos tomarme de mi cabello y jalarme para devorar mis labios y estrellarme contra la pared fría tomandome de mis piernas para que las enrollará en su cintura sintiendo como un dedo entraba en mi interior haciéndome gadear se sentía tan bien como lo movía adentro de mi cuando lo saca siento como mete un segundo dedo y eso me hace gadear aun más fuerte la forma en que mueve esos dos de dos me encanta, de pronto siento un tercer dedo haciendo que gemiera más fuerte arañando su espalda, cuando siento que sus dedos son reemplazados por su miembro no puede evitar gemir fuertemente al mismo tiempo que mis uñas la clave en su espalda, sus labios repartían besos en mi cuello al igual que lo mordía sentía que en cualquier momento me vendría sus embestidas empezaban a acelerarse, mis gemidos los ahogaba en su cuello mordiéndolo y arañando su espalda hasta que ya no pude más y me vine entre nuestros abdómenes mientras el me embistió dos veces más y se vino dentro de mi, con nuestras respiraciones agitadas nos dimos un último beso y baje mis piernas sosteniendome de sus hombros hasta recuperar mis fuerzas.

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