Forgive Me| Bada Lee

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Rhea

Tenía el corazón en la garganta, sentía mucha tensión en mi cuerpo y le di la mano a Harimu por los nervios que nos provocaba saber que equipos irían a eliminación.

—Ladybounce queda en sexto lugar, dejando automáticamente a Wolf'Lo y a Tsubakill en eliminación. Tendrán que enfrentarse para pelear su lugar en la competencia —dijo Daniel, mirando a la cámara y provocando ruidos de impresión.

—¿Cómo que Tsubakill a eliminación?

—No puedo creerlo —dijo Lia, cruzada de brazos.

Los murmullos se dejaron escuchar en toda la habitación.

Miré a Bada desde mi lugar y, en cuanto hicimos contacto visual, sabíamos que era realmente increíble creer que ambos equipos irían a eliminación; seguíamos sin creerlo.

—¿Quién tiene más posibilidades de sobrevivir? —preguntó Dohee.

—Son equipos con estilos casi similares, pero diferentes a la vez —les dije, respondiendo a Dohee.

—Por eso es difícil decidir quién podría ganar; ambos tienen ventajas en sus estilos —comentó Lia.

—Aunque...—dije, llamando la atención de sus miradas.

Hice esa pausa para pensar en lo que iba a decir; no quería que sonaran incorrectas mis palabras.

—Wolf'Lo tiene una ventaja; a Tsubakill no le ha ido muy bien con los votos coreanos… ayer Akanen me dijo que esa era su mayor preocupación—les dije, provocando una cara de confusión en ellas.

—Pero... ¿por qué a ellas les iría así en votaciones mientras que Jam Republic sigue en los primeros lugares?—Redy preguntó, mirándome.

Sentí la tensión en nuestros ojos.

No podía creer que, de ahora en adelante, nuestra tensión estaría muy presente cada vez que estuviéramos juntas.

—Porque es diferente; Tsubakill son japonesas y, desde antes, las integrantes de Jam Republic ya tenían cierta popularidad—Lia respondió, mirando a Redy.

—Lo importante es que estamos libres de la eliminación—dijo de nuevo Lia, sonriendo aliviada.

Asentí.

El ambiente se había vuelto un poco nostálgico al pensar que uno de esos geniales equipos iba a ser eliminado.

Todos los equipos nos dirigimos a nuestras estaciones.

Se sentía bien estar salvado, pero no quería que nadie se fuera.

—Lindo collar —dijo Lia, apuntando a mi cuello.

—Sí… gracias —le dije, sonriendo tímida.

—¿Por qué esa letra? —Lia me preguntó con seriedad.

Tenía la B en una forma pequeña; no era lo más llamativo, pero si lo veías en detalle, podías ver la letra. De lo contrario, el collar de Bada tenía una R pequeña.

—Mm... —no sabía qué responderle; solo tomé el collar y lo vi, pensando en qué decirle.

Lia solo me miró por última vez antes de salir a la estación sin decir nada más; su rostro parecía el de alguien molesto y no entendía el porqué.

—Nos vemos mañana —les dije mientras me despedía con la mano al aire y salía de la estación.

El cuerpo de Bada, esperando por mí, me hizo sonreír.

—¡Ay! Qué linda —le dije mientras la abrazaba, rodeando su cuello.

—Gracias —respondió tímida.