One shots - Ninjago

Los hermanos Aro

Resumen:

Nya y Kai salen del armario.

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Nya tardó unos minutos en convencerse a sí misma de pulsar el botón de llamada, y cuando sonó el teléfono, su mente dio un vuelco, pensando en el peor de los casos, en todo lo que podría salir mal en esta llamada telefónica que tanto importa...

La voz de Kai rompió su pánico. —Oye, hermana —dijo—. "Mucho tiempo, sin llamadas. ¿Qué pasa?"

"Yo... tengo algo de qué hablar contigo".

"Es una coincidencia. Lo mismo aquí".

Nya parpadeó. —¿Ah? Tú puedes ir primero".

"No, no, me llamaste. Adelante".

Nya jugueteó con la costura de sus vaqueros. Estaba acurrucada en el sofá de su apartamento, con las luces apagadas y la música clásica sonando suavemente. Preparó toda la habitación para relajarse, para prepararse para esta llamada. Entonces, ¿por qué se sentía tan poco preparada?

"Por favor, insisto", dijo. "Tú vas primero".

"Uh. De acuerdo". Se echó a reír. "No es así como me imaginaba que iba a ser esto. Estoy en medio de un estacionamiento en este momento, estaba yendo de compras. Pero lo que sea. Quiero decir, tenía que suceder en algún momento, ¿verdad?"

Ella entrecerró los ojos, tratando de descifrar su tono. (Era más difícil cuando no podía ver su expresión, pero sabía que no podría pasar por esta llamada si tenía que mirarlo a los ojos durante la misma). —¿Estás nervioso?

"¿Qué? ¡No!"

"Entonces... ¿Qué novedades?

Suspiró. La puerta de un coche se cerró en el fondo y, por instinto, dijo: "No empieces a conducir todavía. Espera a que termines la llamada".

"Está bien, Wu. Peleo con la gente a diario, dudo que un coche saque lo mejor de mí".

"Sí, pero no quieres morir antes de tener una novia, ¿verdad?" Era una broma entre ellos, tan natural que ella no tuvo que pensar en ello. No pensó en ello, es decir, hasta que Kai se quedó en silencio. Ese chiste nunca dejaba de sacarle una carcajada. ¿Por qué estaba fracasando ahora?

"Sí... sobre eso".

¡Oh, es gay! Sí, eso debe ser. Nya siempre pensó que era inusualmente cercano a Cole. Y Zane. E incluso Jay. Los amigos no actúan de la manera en que lo hacen esos cuatro.

—Está bien, puedes decírmelo —dijo, tratando de usar su tono más tranquilizador—.

"Estaba hablando con Lloyd el otro día", dijo, "y él estaba hablando de lo que se sentía al estar enamorado, porque, ya sabes, no tiene enamoramientos a menudo, y algo me golpeó".

Estaba enamorado de ese chico guapo del bar, ese chico del que no paró de hablar durante tres días, el que reconoció a Kai por las noticias y fue tan agradable que Kai volvió al bar un par de noches después (solo para descubrir que su camarero favorito lo había dejado). Nya podía verlo todo, era tan obvio que no podía creer que hubiera logrado pasar desapercibido durante tan...

"Podría ser arromántico".

Eh. —¿Podrías ser qué?

"Arromántico. Significa que no me siento romántico att...

"Sé lo que significa arromántico. Sólo... ¡Vaya! Porque nunca mostró preferencia por los hombres o las mujeres, ¿verdad? Porque no se sentía atraído por nadie. "Bueno, eso es... ¡Me alegro de que te hayas dado cuenta de eso!"

Se echó a reír, aliviado. —¿Sí?

"¡Sí!"

"¡Genial! ¡Um, genial! Eso es todo lo que tenía que decir, así que...

"Espera, aún no te he contado mis noticias". Y ahora que conocía el suyo, su estado de ánimo había pasado de nervioso a excitado.

"Correcto. Adelante".

"¡Yo también soy arromántico!"

"¡¿Tú, qué?!"

"Sí, me acabo de enterar hace unos días. Quería que fueras el primero en...

—¿Pero qué pasa con Jay?

Nya frunció el ceño y esperaba que él pudiera escuchar su disgusto cuando dijo: "¿Qué pasa con Jay?"

"Pensé que estabas enamorada de él. Es decir, tuviste una relación real y a largo plazo con él. Lo amabas. ¿Cómo pudiste ser...?

Ella frunció el ceño. "Sabes, parecías muy sensible con tu novia del mes de abril. ¿Estás seguro de que no estabas enamorado de ella?

"¡Oye, eso no es justo! ¡Pensé que era bonita y no sabía que estaba loca!"

—¡Bueno, yo tampoco! Jay era un gran amigo y le caía bien, así que pensé que era natural que me gustara a mí también".

Una larga pausa desde el otro extremo. No podía creer que él no le creyera a ella. Y justo después de que ella también lo apoyara tanto.

"Eres... —dijo Kai, como si estuviera pronunciando las palabras—. "No debería haber dudado de ti. Lo siento".

"Tienes razón, no deberías haberlo hecho".

Otra pausa. Luego, "Hola, Nya".

—¿Sí, Kai?

"Es genial que los dos estemos en el aro".

Ella sonrió, la ira se desvaneció ante el entusiasmo en la voz de su hermano. "Sí. Es genial".

Se sentaron y hablaron durante unos minutos más, hasta que Kai colgó el teléfono para volver a su casa. Tan pronto como colgó, Nya se puso de pie de un salto y se dio la vuelta, agarrando su teléfono como un pobre sustituto de abrazar a Kai. No podría haber pedido un hermano mejor.

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Historia perteneciente: https://archiveofourown.org/works/54012445