22 -Trauma-

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En el otro lado del bosque, un grupo de niños ingratos entraron en lo más profundo del bosque para confirmar los rumores de la aparición de Slenderman con la tonta idea de que si lo veían, saldríamos vivos de allí.

Pobres cositas, por su mala suerte, Masky y Hoodie, merodeaban cerca de ellos para acabar con esos desgraciados. Sacaron un frasco donde guardaban las demás almas para guardar el de aquellos niños tontos. Si tan solo hubiera hecho caso a los adultos... nada de esto habría pasado.

—Con esto ya tenemos suficiente.

Hoodie asintió con la cabeza, como siempre, de pocas palabras, era una de las razones por las que le caía mejor que Toby. Caminando de vuelta, tenían la sensación de que no estaban solos, alguien los estaba observando.

Separaron sus caminos y desviaron su camino de vuelta para despistar a lo que sea que les estuvieran espiando, porque sea quien sea, no sería nada bueno.

En la puerta trasera de la casa, entraron para encontrarse con Toby tumbado en el sofá descansado. No estaba dormido, ellos no dormían, pero si se le notaba el cansancio.

—Despierta

Masky le dio unos golpes en cabaza con el mango del cuchillo, estaba enfadado con él por haber desaparecido para luego verlo vagueando en casa, a parte de las órdenes de Slenderman ¿qué más podría haber estando haciendo para estar cansado? No tenía sentido, asique solo pensó que estaba fingiendo.

Extrañamente parecía estar de buen humor despues de ver la cara de Masky, porque en otras circunstancias no habría tardado mucho para empezar a pelear con él por haberlo molestado.

—¿Qué has hecho?

No respondió, no tenía ganas de arruinarse la noche cuando lo había pasado tan bien. Cogió su hacha para hacer su parte del trabajo, a él aún le quedaba algún que otro alma para llenar el frasco.

A diferencia de Masky y Hoodie, no se lo pasaba analizando el movimiento de los demás, solo se lanzaba y acababa con sus vidas después de torturados un rato. Por eso siempre trabaja solo, siempre hace lo que quiere y para Slenderman, con que haga bien su trabajo, no le importa el método.

Estaba preparado para salir hasta que Masky volvió a hablar.

—¿Dónde está Jeff?— Preguntó por un mal presentimiento —Dime, qué le has hecho

Estaba seguro que su buen humor tenía que ver con Jeff, y no lo dejaría escapar hasta que lo dijera. No podrían estar los dos solos sin que le haya hecho nada, o puede ser que por la presencia de Toby fue la razón  por la que se fue de casa y realmente no sucedió nada.

Pero eso no explica su buen estado de ánimo, y... su sonrisa, aquella sonrisa burlona de que está escondiendo algo pero no se lo va a decir. Le molestaba, odia verlo feliz, lo odiaba tanto.

—No sé~—Respondió riéndose.

Iba a atacarlo, pero Hoodie lo paró, recordándole que Slenderman no dejaría pasar otra pelea entre ellos. A él tampoco le caía bien Toby, pero todo ese enfado reprimido lo desquitaba con las personas que mataba.

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El más deseado [Harem Jeff the Killer] (Jeff X Todos)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora