capítulo 14 "Problemas"

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Era real?
Lo que estaba pasando en ese momento no era producto de mi imaginación?

Si me habían tomado del brazo y si me habían llevado a un diminuto cuarto oscuro.
Y...la causante de todo esto era la persona que más necesitaba ver.
La que se encontraba frente a mi.

Podía sentir como intentaba analizarme por completo incluso con la falta de luz. Por un momento me sentí expuesta.
Su mirada de miedo y preocupación está vez no estaban, en su lugar estaban unos ojos muy abiertos y alterados, junto con.....unas pupilas muy dilatadas?

¿Está drogada?

—Eva?

—Shh...

Eso fue lo último que salió de ella antes de que casi se desplomara en mis brazos.
Como pude la sostuve, parecía que sus piernas no tenían fuerza.
Y de un momento a otro su cuerpo parecía el de una muñeca sin articulaciones.

—EVA!

Estaba respirando pero fuera de eso todo su cuerpo dejo de responder.

El cuarto era pequeño, casi no podía moverme, no podía hacer mucho, solo quedarme en mi posición sosteniendo a Eva por debajo de los brazos.

—Era verdad? Lo que dijiste...era verdad?. Por qué si no lo era entonces no se que estoy haciendo. — hablo de la nada y en un tono casi inaudible.

—¿Que? — fue lo único que pude decir.

—Ayudar...

Hablaba en mi hombro, se sentía raro, ella no tenía fuerzas pero parecía no importarle.

—Dijiste....ayudar....nunca me habían dicho algo así...a..a qué te referías. — Su voz era débil, apenas audible..arrastraba las palabras y le costaba articularlas.

—Si....quiero ayudarte, pero..

Me interrumpió antes de que pudiera terminar.

—Por favor...no quiero volver con él.— se le quebró la voz y empezó a llorar.

Sin fuerzas en su cuerpo, drogada, indefensa y vulnerable.

¿Que carajo se supone que tengo que hacer ahora?

Sentí impotencia en un instante, o tal vez ya estaba ahí solo que no la había dejado salir. Sentí mis ojos arder, tenía ganas de llorar, ganas de golpear algo, ganas de golpear a Nigan.

No sabía que hacer hasta que escucho la voz de uno de los presentadores. Mierda.
Ya dió inicio el evento.

—Eva..— no hubo respuesta

—Eva?! — nada, no reaccionaba.

En eso mi teléfono empieza a sonar, era Amelia, a como pude conteste.

—¿Dónde carajo estás?, ya estás atrás de la tribuna?

—Eso quisiera, Mel necesito ayuda

—¿Que paso?

—Eva

—Que pasa con ella? Dónde está?

—Esta conmigo...pero no sé dónde coño estoy, es un cuarto, creo que está cerca de los baños.

—Como que está contigo?, Damara están a punto de decir tu nombre para que subas a dar tu discurso. Y el otro tipo que venia con Eva la está buscando, al menos eso escuché.

Mi ansiedad empezaba a elevarse.

—Mel necesito que vengas, busca alguna puerta que veas cerca del baño o algo así. Por favor.

Por tu guerra, por tu pazDonde viven las historias. Descúbrelo ahora