Pasados los meses, el embarazo de Kasidet empeoraba cada vez más, cosa que tenía muy preocupados a sus padres, a su mejor amigo y a las personas del servicio, y sobre todo al mismo Kasidet.
El príncipe corría mucho riesgo, tanto era así, que Kasidet podía abortar al bebé en cualquier momento, o cuando diera a luz podía perderlo o se podía morir él. Por eso Kasidet se la pasaba la mayor parte acostado, leyendo o viendo la televisión, mientras era cuidado por sus seres queridos. Pero lo que nadie sabía, era que Kasidet lloraba por las noches, tenía mucho miedo, y no sólo por perder a su bebé, sino por cómo reaccionaría Force, temía que no quisiera al bebé.
- Force - dijo Kasidet separándose de los labios del alfa, el chico lo vió.
- ¿Qué sucede? - preguntó acariciando su mejilla, y Kasidet se dejó llevar por la caricia, así que tomando el valor suficiente, habló.
- Vamos a ser padres - respondió Kasidet con sus ojos brillosos - estoy embarazad...
Pero el chico le metió una bofetada, ocasionando que el príncipe se desconcertara y sus ojos se aguaran. El príncipe se tocó su mejilla y lo miró asustado.
- F-Force - dijo tartamudeando confundido.
- Ese cachorro no es mío - dijo por fin - de seguro ese cachorro es de alguien más - y ahora fué Kasidet quien lo abofeteó, no permitiría que se metiera con su criatura.
- C-claro que es tuyo, sabes muy bien que no me he acostado con nadie más - argumentó molesto, pero el chico rió.
- Hay cariño - dijo Force riendo colocando su mano en la barbilla del chico - una preciosidad como tú, fácilmente puede irse con muchos - lo soltó riendo. Kasidet no podía más con la humillación, que apretando sus puños, salió de la habitación dejando al alfa solo.
Kasidet se despertó agitado con sus mejillas mojadas, y al ver que estaba en su habitación, y que todo fué producto de una pesadilla, se tranquilizó, tenía mucho miedo. El chico se tocó su vientre de cinco meses, y al colocar sus manos, lo acaricio, respirando tranquilo.
- No te preocupes bebé, si tú papá no te ama, yo lo hago - le susurró tratando de no llorar - no sabes cuanto te quiero.
El príncipe miró a todos lados en su habitación, hasta que su vista se poso en su mejor amigo, quien dormía en su sillón. Sus ojos se volvieron a aguar, y no era por el miedo, sino porque deseaba a su alfa, deseaba que Force fuera el que lo cuidara, el que estuviera pendiente de él, el que lo mimara y consintiera, pero no podía verlo, no sabía llegar a su casa, y las cartas de Force que siempre le mandaban, le decía que estaba trabajando y que por eso no podía ir a verlo. Esto hacía dudar al príncipe, pensaba que por haberse acostado con él, ya Force no lo necesitaría, cosa que lo entristecía mucho, y esto era una de las cosas por las que Kasidet también lloraba desconsoladamente mientras abrazaba la almohada en donde ocultaba todas las cartas de Force.
Kasidet se deprimía mucho, ya sea por el temor de perder a su bebé o por querer ver a Force, suspiró, no estaba pasando un embarazo feliz.
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¡Eres mi Alfa! y tú mi Omega (ForceBook,)
FanficKasidet, un joven príncipe Omega destinado a convertirse en rey de Ágata, se ve atormentado por una pesadilla inquietante. Decidido a liberar su mente, decide dar un paseo por el bosque real. En su travesía, se encuentra con una hermosa criatura mís...