Kasidet se despertó al sentir los rayos de sol en su rostro, se dió la vuelta y se encontró con Force durmiendo tranquilo.
- Me vas a desgastar si me sigues mirando - dijo Force sin abrir los ojos.
Kasidet se asustó, y el alfa abrió los ojos para mirar al omega con una sonrisa.
- ¿Tienes hambre? - preguntó Force luego de quedar unos segundos en silencio, mirándose, Kasidet asintió.
Force se levantó de su cama, caminando a su cocina con Kasidet detrás.
- Hoy me tengo que regresar a mi casa - dijo Kasidet sentándose en una silla, Force se volteó dejando el cuchillo en la mesa.
- ¿Porqué? - preguntó Force un poco desanimado.
- Extraño mi casa - mintió, en realidad , Kasidet quería salir de ese mundo lleno de romance. Force asintió haciendo un puchero, para luego darse la vuelta y tomar el pan.
- ¿Por hoy te podrías quedar? - preguntó mientras rellenaba el pan con queso, Kasidet lo pensó.
- ¿Para qué? - preguntó Kasidet alzando una ceja.
- Quiero que conozcas algo bonito antes de irte - respondió Force colocando dos platos con los panes en la mesa, para luego servir el jugo.
- ¿Qué lugar? - preguntó Kasidet.
- Haces muchas preguntas - comentó Force arrugando el entrecejo - mejor siéntate a desayunar - y así lo hizo luego de resoplar por no tener la respuesta esperada.
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- Llegamos - dijo Force luego de detenerse en una montaña.
Kasidet miró hasta arriba, sorprendido y preocupado al mismo tiempo que sin querer, apretó el brazo de Force, el chico rió.
- Te dije que no tienes porqué temer, estás conmigo - Kasidet tragó, ahora se estaba debatiendo si creerle o no - sólo conviertete en tu lobo - dijo caminando a un árbol donde se escondió detrás de este, se desvistió y lo que era un humano, ahora era un lobo de pelaje negro y ojos amarillos - ¿qué esperas? - preguntó luego de ver a Kasidet parado observándolo.
Kasidet no muy convencido, se metió detrás de otro árbol, se quitó su ropa, y de un humano, pasó a un lobo de pelaje blanco, con ojos negros para luego salir. La belleza del lobo cautivó tanto a Force, que su corazón se aceleró.
- Vámonos - dijo Force dándole la espalda, tratando de ocultar su nerviosismo.
Ambos comenzaron su rumbo por la montañana, cada vez que se subía más y más, provocaba el miedo y el nerviosismo del príncipe, él nunca había subido una montaña, que sus piernas comenzaron a temblar y sus dientes a rechinar. Subían y subían hasta que llegaron a una cueva brillante, en donde se adentraron.
Kasidet se sorprendió al ver todo los diamantes y zafiros brillantes, era todo precioso, los diamantes blancos estaban mezclados con el color azul del zafiro, daban un bonito color en la no tan oscura cueva.
- ¿Qué es todo esto? - preguntó Kasidet sorprendido.
- Es la cueva del amor - respondió Force mirando los diamantes.
- ¿Del amor? - preguntó aún más confundido, Force asintió.
- Los diamantes y los zafiros de aquí, representan un hermoso detalle para las parejas - respondió Force - si la persona que te regala uno de estos sin sentir amor, le cae una horrible maldición a los dos.
Force seguía y seguía hablando, pero Kasidet no le hacía caso, en cambio, se sentía atraído por una fuente cristalina, del cual brotaba agua desde un orificio en la pared. Kasidet se alegró, tenía mucha sed, así que se acercó a ella, y comenzó a beber el agua con los ojos cerrados. El agua estaba tan refrescante, hasta que una luz blanca brillante, hizo que abriera los ojos.
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¡Eres mi Alfa! y tú mi Omega (ForceBook,)
Fiksi PenggemarKasidet, un joven príncipe Omega destinado a convertirse en rey de Ágata, se ve atormentado por una pesadilla inquietante. Decidido a liberar su mente, decide dar un paseo por el bosque real. En su travesía, se encuentra con una hermosa criatura mís...