Capítulo 12

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Branch corría por el bosque sintiendo su corazón latir con fuerza en su pecho mientras escuchaba los fuertes pasos de Damon detrás de ella. Cada vez lo escuchaba más y más cerca, pero el miedo mismo era lo que motivaba a Branch a seguir corriendo rápidamente. Había pensado en correr hacia la villa, pero las palabras de Creek se repetían constantemente en su cabeza ¿Y si nadie le creía? ¿Y si Damon y Creek terminaban siendo inocentes ante los ojos de todos mientras que a ella la castigaban? ¿Y si Poppy decidía creer las palabras de los traidores por presión social? Inconscientemente comenzó a correr hacia el único lugar en el que se sentía segura, su bunker.

Cuando comenzó a descender por el elevador, se dio cuenta de un gran error. Había olvidado cambiar la contraseña esa mañana, no tenía sentido asegurar el bunker si Damon podría acceder de todas maneras. Una vez estuvo dentro de su hogar, corrió hasta llegar a su habitación. Cerró la puerta con seguro a la vez que se recargaba en la misma tratando de calmar su respiración. Comenzaba a sentir el temblor de sus piernas, las cuales la habían llevado hasta allí debido a la inercia y el pánico. Cuando su respiración comenzó a normalizarse, a Branch se le erizó la piel al escuchar a Damon dentro del búnker. Si su risa maniática no fuera suficiente pista, Branch sabía que el troll de color menta estaba recargado del otro lado de la puerta.

—Todo está perdonado, Belleza Azul. Vamos, sal de ahí para que podamos hablar tranquilamente. Sé que escuchaste una conversación que no debías y según Creek deberías estar muerta por esa razón, pero te lo dije antes, no voy a permitir que nada ni nadie te lastime.

Branch temblaba por completo mientras las lágrimas comenzaban a caer por su rostro, tratando de pensar en una forma de deshacerse de Damon.

—Sabes, para odiar tanto a mi prima eres igual de desalmada que ella. Me enamoraste Branch. ¡Ay, por tu culpa no paro de pensar en una vida feliz a tu lado! Hasta me imagino cómo envejeceremos juntos y disfrutaremos de nuestros hijos y nietos. Por un momento sí te llegué a culpar de todo el dolor que siento, de cómo me llevaste a un paraíso para luego abandonarme en el infierno. Sin embargo, me di cuenta, Belleza Azul, de que nunca fue tu culpa, sino la de Poppy. Él es quien te está alejando de mí, te impide ver la realidad y confunde tus pensamientos y corazón haciéndote creer que él es tu destino cuando somos tú y yo los que estamos destinados a estar juntos.

En ese momento, a Branch se le ocurrió que tal vez podría usar a Gary para ahuyentar a Damon. Comenzó a buscarlo por todo el lugar hasta que finalmente se dio cuenta de que su querido hijo estaba fuera de su habitación y no podría usarlo contra Damon.

—¿Quieres que te explique a detalles el plan? Lo haré si eso te hace confiar en mi, Belleza Azul. Cuando llegue la noche, vamos a incendiar la aldea entera. Todos estarán dormidos y cuando se den cuenta del caos, será demasiado tarde. En el capullo de Poppy dejaremos botes con gasolina para poder inculparle del incendio. Incluso hasta podrían encontrarle una nota donde pida perdón por sus acciones y diga que estaba harto de ser rey y la solución más fácil que hayó fue deshacerse de todo el reino. Por favor Branch, no te rindas conmigo tan fácilmente ¿Quieres que te cuente otro secreto? Durante el incendio nos desharemos de Creek, y luego tú, con mi ayuda claro, podrás llegar a rescatar lo que reste de la villa, quedando como una gran heroína. Te van a coronar reina por ese acto tan valiente y los trolls nunca más van a dudar de tus palabras. Por fin se van a dar cuenta de la troll tan especial que eres, mi hermosa belleza azul.

Branch trataba de pensar en una solución. No podía enfrentarlo físicamente porque sabía que él era más fuerte que ella. Tampoco podía escapar o esconderse en algún escondite del búnker, ya que Damon conocía muy bien el lugar después de todas sus visitas. Se sentía tan insegura en su lugar seguro, y todo por haber confiado en el troll equivocado.

El Efecto Mariposa.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora