Capítulo 2

495 39 13
                                    

No les voy negar, sí revisé su perfil, pero por chismosa, no porque me haya interesado en él.
Sí está bastante guapo, pero eso no le quita lo mamón y lo mierdilla.

Sé que dirán, "Kelly qué dices, ¿por qué tan apática? Si todas quieren con ese hombre."
Justo por eso, yo soy única y detergente, y lo que le gusta a los demás, no me gusta a mí.

Nah, que va, es más bien que tengo literalmente años sin estar con alguien de esa manera, es decir, llevo tanto tiempo sin besar a alguien que olvidé cómo hacerlo. Y antes de que digan que estoy haciendo mucho show, pónganse en mi lugar, imagínate que un bato guapo, alto, mamado, futbolista, mamón, con lana y así todo perfecto llega y te besa, y tú no sabes cómo hacerlo, que pena verdaderamente. Por eso, en vez de quedar como tonta por no saber besar, prefiero quedar como tonta haciéndome la indignada y la interesante.

Obviamente no le devolví el follow, una tiene que tener dignidad, aunque sea un poco.

Era sábado y era mi día de descanso, Iriz no estaba porque tuvo un evento en su trabajo, así que muy contenta fui por un café. Cuando lo estaba pidiendo me llegó un mensaje de Iriz, que si podía ir con ella a donde fue su evento. Yo como buena amiga que soy le digo que sí.

En unos minutos ya estaba llegando al estadio Akron, porque un dato interesante de Iriz es que juega en Chivas femenil. Y para mi buena o mala suerte en cada evento están los chicos. Yo nunca había ido a ninguno de esos eventos porque no me gustaban, entonces por eso no conocía a nadie.

Al llegar me recibió Iriz con una gran sonrisa por haber aceptado ir.

- ¡Kelly! Bienvenida, ¿Quieres algo de tomar? - Me dice Iriz abrazándome.

- No gracias, ya me tomé un café.

- ¿Entonces algo de comer?

- No, gracias.

- No te hagas de la boca chica, come algo. - Dice con insistencia.

- ¿Y esta insistencia por alimentarme? - Le pregunto divertida.

- Es que no quiero que se te baje la presión.

- ¿Por qué se me bajaría la presión? - Le digo con el ceño fruncido.

- Es que justo después de que te dije que vinieras llegaron los chicos y entre ellos uno que no es muy de tu agrado.

Yo no la miré, me quedé viendo atrás de ella, porque estaba ahí, viéndome fijamente con una sonrisa.

- Alan. - Digo de mala gana.

- Hola, corazón. - Dice haciendo a un lado a Iriz y tomándome la mano dejando un pequeño beso.

- Iriz, yo me voy, si quieres me llamas cuando se acabe todo esto para venir por ti.

- ¿Vas a seguir con tus moños, mami? - Dice Alan.

- Claro que sí, y no me los voy a quitar hasta que me pidas una disculpa.

- ¿Una disculpa? ¿Por qué lo haría?

- Porque me la debes por besarme sin mi consentimiento.

- Niña, tú eres la que me debe disculpas, y ni siquiera disculpas, más bien las gracias.

- ¿Las gracias? Bueno ¿Tú estás pendejo o qué?

- Las gracias por haberte besado, no cualquiera puede decir que se besó a Alan Mozo.

Ay pobre perro nadaqueveriento, se cree la ultima coca del desierto, y me quiere venir a humillar desde su rancho de tres cuadras, dos topes y veinte perros.

- Y como yo no soy cualquiera yo si puedo decirlo, es más, puedo decir que quiere hacerlo otra vez, pero como no se la pongo fácil, prefiere hundirse en su ego lastimado.

Pensé que se iba a enojar, pero a lo contrario, me tomó fuerte por la cintura y me acercó a él.

- Vas a ver quien termina queriendo besar otra vez a quien. - Dice muy cerca de mi cara.

Fuego uterino alocado e intenso...
No les voy a mentir, si se me paró por un ratito... El corazón, aclarando.
Tras haber dicho eso me suelta y se va.
Hijo de la cola miada, nada más me emociona y se va.

- ¿Qué acaba de pasar? - Dice Iriz con los ojos bien abiertos.

- Ay cabron, ¿sigues aquí?

- Pues sí, me eché todo el chisme.

- ¿Tú puedes creer lo que hizo? Delante de toda la gente, no tiene vergüenza.

- Y tú sí que tienes mucha, estás súper sonrojada.

Siento mis mejillas arder, no pensé que llegara a ese punto, la verdad es que yo soy muy difícil de sonrojarme.

De verdad que sí desajustó mi sistema, no paro de pensar en eso, sus palabras se repetían una y mil veces en mi cabeza, se me erizaba la piel cada que recordaba como su aliento rozaba mi boca.

Me quedé en el evento por mera curiosidad, a ver qué pasaba.

Estaba sentada yo sola, ya que a Iriz se le olvida mi existencia cuando está con Fernando, estaba viendo mi celular, cuando alguien se sentó a mi lado.

- Hola.

- Hola. - Le respondo con una sonrisa.

- Soy Pocho Guzmán. - Me extiende la mano en un saludo.

- Un gusto, Kelly Cuevas.

- ¿Eres la novia de Mozo?

- ¿Yo novia de Alan? Mejor nadota.

- Jaja, es que eso pensé, nunca te había visto por aquí y parece que lo conoces muy bien.

- En realidad estoy aquí por mi amiga Iriz, y a Alan no lo conozco bien y no me interesa hacerlo.

- ¿Te cae mal?

- Noo, ¿cómo crees? - Digo con sarcasmo.

- No te preocupes, a mi también me caía mal cuando jugaba en Pumas, es mamón, pero cuando lo conoces bien, terminas amándolo.

¿Amándolo?
No lo sé Rick, parece falso.

Me quedé platicando con Pocho, la verdad que me calló muy bien, su manera de hablar y de expresarse es muy graciosa. Mientras platicábamos sentí que alguien nos miraba y adivinen quien era, oh qué sorpresa.
Alan nos observaba con mucho detenimiento, cuando notó que lo descubrí sonrió.
No me importó y seguí platicando con Pocho, la verdad que sentí que con él podía entablar una gran amistad.
...




Holaaaa aquí Kai, hasta ahora ¿qué les parece la historia?
¿Les gustaría saber qué pasará?
Me gustaría saber sus opiniones.
Voten mucho y no se olviden de seguirme en Tiktok @WhoisKaiKai
Y sigan a mi comadre blxckphonmt

La curiosidadDonde viven las historias. Descúbrelo ahora