♡゙ : ¹𝐈𝐍𝐒𝐎𝐌𝐍𝐈𝐀, lf [+18] 𓈒 💤 ¡! ✓

(🪐) ━━ O5 : a familiar face

—¿Ya empacaste todo? —Preguntó Felix por cuarta vez a la castaña que estaba cerrando la última de sus maletas.

—Ya te dije que sí, Lix —Minju rodó los ojos divertida mientras se abanicaba el rostro con las manos. —Solo me estoy yendo un par de días, el domingo estaré de vuelta.

Un chillido escapó de los labios de Minju cuando las manos de Felix se colaron alrededor de su cintura antes de que todo su cuerpo envolviera el de ella por la espalda.

—Felix ¿qué haces? —Un gemido ahogado reemplazó sus palabras cuando el peliazul empezó a repartir besos húmedos por todo su cuello. Felix no respondió y en su lugar dejó que sus manos vagaran por debajo de la blusa que se pegaba al cuerpo de la mayor que no puso resistencia a la hora de ser explorada nuevamente por aquellas manos. —Felix —Volvió a gemir esta vez más claro.

—¿Por qué tienes que ir? —Murmuró él sin dejar de morder y chupar la piel de su clavícula. —¿Siquiera podrás pegar el ojo en las noches?

—No tengo idea —Se sinceró ella, colocó sus manos por sobre las manos del más alto para sacarlas de su cuerpo muy a su pesar. —Pero tengo que intentarlo.

Minju y Felix llevaban cerca de tres semanas con aquel trato sexual donde ambos habían sacado el mayor provecho posible, no había manía del otro que no conociera uno, sabían leer cada sonido que sus bocas expulsaban y cada mirada lasciva, no importa que tan apresurada de tiempo estuviera Minju, siempre terminaba sus quehaceres antes de las nueve de la noche para estar totalmente libre cuando Felix llegara de la universidad, de la misma manera en que no importaba que tan cansado estuviera él luego de un día de trabajos, ensayos y lecturas, siempre estaba más que dispuesto a correr a los brazos de Minju y deslizarse entre sus piernas. Y por más sorprendente que pareciera para ambos, ninguno se cansaba de explorar el cuerpo del otro cada noche, al inicio del día cuando despertaban desnudos y abrazados rogaban porque la noche llegara nuevamente para volverse uno.

Desde que dormían juntos, Minju había recuperado su ritmo del sueño habitual y dormía como un bebé durante toda la noche, sin embargo era la primera vez desde que iniciaron con aquella "terapia de sueño" que dormirían el uno sin el otro. Y aunque la mayor no quisiera expresarlo frente al pecoso, estaba algo nerviosa por pasar aquellas dos noches sin él. Felix sintió el momento exacto en que el cuerpo de Minju se tensó bajo su toque y dejó de bombardearla de besos para buscar su mirada que parecía algo perdida.

—¿Todo bien, Junnie? —La nombrada asintió borrando cualquier rastro de preocupación en su rostro.

—Sí —Se dio media vuelta para quedar frente a frente con el más alto quien ahora fruncía un poco el entrecejo, ella rió, pues hace mucho que Felix no hacía esos gestos tan marcados. —Esa fue la mirada que me diste la primera vez que nos vimos cuando recién me mudé a este departamento.

Felix arqueó una ceja sorprendido de aquel comentario.

—¿Ah sí? —Ella asintió.

—Sí, solo que eras más delgado porque solo comías una vez al día y tu cabello era castaño —La imagen del Lee Felix de hace casi un año atrás la hizo sonreír de oreja a oreja contagiando a su acompañante.