♡゙ : ¹𝐈𝐍𝐒𝐎𝐌𝐍𝐈𝐀, lf [+18] 𓈒 💤 ¡! ✓

(🪐) ━━ 1O : stay with me

Las mujeres Kwon partieron antes del medio día. La mujer mayor se encargó de llenar de besos y abrazos a ambos muchachos en especial al pecoso, le hizo prometer que iría a visitarlos apenas pudiera y luego al abrazar a su hija le susurró al oído:

—Te lo dije.

Al principio Minju no entendió a lo qué se refería su madre, luego sintió una mano pesada apoyarse sobre su hombro trayendola a la realidad y atando cabos, al parecer su madre se había dado cuenta de lo que pasaba entre ellos incluso mucho antes que ellos mismos. Una vez solos de nuevo en casa, Minju fue víctima de los característicos nervios de una primera cita, —lo cual era absurdo luego de un año bajo el mismo techo—, sintió su pecho latir con la velocidad de un metrónomo a 200 bpm y su estómago girar como una lavadora con cargamento pesado. Felix fue a su habitación por ropa limpia y luego se dirigió al baño, todo esto bajo la atenta mirada de la castaña que seguía intentando procesar su siguiente movimiento.

—Si no me quieres perder de vista puedes entrar a bañarte conmigo —Se burló el castaño haciendo rodar los ojos a la mayor.

—Ya quisieras —No espero ninguna contestación antes de abandonar la sala y encerrarse en su habitación.

El timbre de su edificio resonó por toda la casa provocando que Minju soltara un bufido, Felix estaba durmiendo en su habitación así que no podía esperanzarse en que él fue quien abriera la puerta, caminó a grandes saneadas hasta la entrada donde abrió la puerta con fuerza asustando a la persona detrás de ella, la castaña se quedó sin palabras al reconocer al chico.

—H-hyunjin, hola —Minju sonrió nerviosa, simplemente ese chico tenía algo que la ponía nerviosa, tal vez era su altura o su sonrisa tierna, aunque sus brillantes ojos también la intimidaban.

—Hola, que bueno que te encuentro —Alzó una de sus manos para mostrarle un frasco de levadura. —Tuve que comprarte otro, me gasté la que me prestaste, explicó apenado para luego extenderselo.

—Vaya, incluso se me había olvidado —Confesó ella tomando el frasco.

—Te ibas a acordar cuando lo necesitaras —Le dijo él con una sonrisa. —Como sea, muchas gracias, Minju.