𝑊𝐼𝐿𝐷𝐸𝑆𝑇 𝐷𝑅𝐸𝐴𝑀𝑆 | 𝘑𝘢𝘤𝘢𝘦𝘳𝘺𝘴 𝘝𝘦𝘭𝘢𝘳𝘺𝘰𝘯

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La princesa Isabella llevaba 2 días encerrada en sus aposentos, al día siguiente de lo sucedido en la cena al querer salir de ellos no pudo hacerlo, su puerta estaba cerrada con llave, dos días sin comunicación y sin saber nada de nadie y no fue hasta el tercer día que pudo salir de ahí.

La coronación del príncipe Aegon como rey estaba a tan solo unos pequeños momentos de llevarse acabo, Aegon apenas pudo librarse de su madre actuó.

—Sir Erryk—Lo llamó el príncipe cuidando que nadie escuchara

—Mi príncipe—Hablo el Sir acercándose

—Espera, si eres Erryk?—Pregunto el príncipe para estar seguro y el Sir no dudo en decir la verdad, era si Erryk

—Asi es—

—Necesito que saques a mi hermana de sus aposentos y a la princesa Rhaenys y las traigas aquí a los míos, yo estaré aquí esperándolas—Ordenó el príncipe y comenzó a sacar la corona de su padre de un bolso desgastado que llevaba—Y toma, si es que algo no pueden llegar aquí dásela a mi hermana Rhaenyra, ella es la única heredera—Hablo el príncipe una vez más pues sabía con certeza que Sir Erryk era de fiar

La princesa Isabella se desesperaba cada vez más y más, no sabía que era lo que ocurría o peor, si a alguien le había sucedido algo pero para su suerte alguien abrió la puerta de sus aposentos cautelosamente

—Sir Erryk, princesa Rhaenys—Hablo la princesa poniéndose de pie rápidamente y mirando a las dos personas que tenia enfrente, Rhaenys llevaba una capucha como si de alguien se escondiese y eso hizo que la princesa se confundiera

—Princesa no tenemos tiempo, debemos ir con si hermano—Dijo el sir entregándole una capucha como la de Rhaenys para que se la pusiera

La princesa Isabella no dudo en seguirlos pues al igual que su hermano sabía que Sir Erryk era de fiar, tan pronto llegaron a los aposentos de Aegon Isabella lo abrazó

—Que es lo que pasa, Aegon?—Pregunto la princesa a su hermano desesperadamente y algo extrañada por el traje que llevaba puesto su hermano

—Padre murió Isabella—Hablo repentinamente el príncipe haciendo que su hermana se sorprendiera—Nuestra madre planea usurpar el trono—Hablo el príncipe y en su rostro se podia notar que eso no era lo que él quería—Necesito que vayas a Dragonstone junto a la princesa Rhaenys, haya estarás a salvo—Aseguró el príncipe y como era de esperarse su hermana negó con la cabeza

—No me iré sin ti Aegon, no te dejaré y menos en esta situación—Dijo la princesa suplicando con su mirada que cediera

—Yo veré la manera de solucionar esto o de irme de aquí junto con Helaena y los niños pero primero necesito que tu estes a salvo—Hablo el príncipe y después miro a la princesa Rhaenys—Necesito que se asegure de que mi hermana llegue a salvo y de que esa corona sea puesta en la cabeza de Rhaenyra—Pidió el príncipe y la princesa Rhaenys asintió—Cualquier cosa, mi lealtad siempre será para Rhaenyra—Finalizó el príncipe volviendo a dirigir su mirada a su hermana

—Adiós hermanita—Hablo Aegon dejando un beso en la frente de su hermana, intentando contener sus lagrimas las cuales de parte de su hermana ya habían salido—Pase lo que pase nos volveremos a ver, no te libraras tan fácil de mi y de tu tarea de cuidar a tus sobrinos—Dijo el príncipe haciendo que su hermana riera ante sus últimas palabras

—Cuida a Helaena y a mis sobrinos—Pidió la princesa y su hermano asintió

—Sir Erryk, confío en usted—

Todo paso tan rápido, la multitud separo a Sir Erryk de las dos princesas y la princesa Rhaenys decidió que era buena idea ir a la fosa de dragones por su dragona Meleys, como pudieron se escabulleron y cuando al fin estuvieron enfrente de la gran dragona la princesa Isabella se aterrizó pues nunca antes se había subido a uno.

—Solo sostente bien niña y pase lo que pase no la sueltes—Hablo la princesa Rhaenys dejando entre las manos de la princesa Isabella una cuerda la cual la mantendría en la dragona.

Rhaenys se elevó y en cuestión de segundos ya habían matado a una gran cantidad de gente la cual veía la coronación, la madre de Isabella la reina Alicent se veía asustada, eso hasta que vio a su hija montada en la dragona junto con la princesa Rhaenys, su mirada cambió a una de enojo y rápidamente miro a su hijo el príncipe Aemond el cual tenía una sonrisa en su rostro la cual a la princesa Isabella le causo terror.