𝐭𝐡𝐞 𝐛𝐞𝐠𝐢𝐧𝐧𝐢𝐧𝐠

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Chilchuck fue quien encontró el cofre

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Chilchuck fue quien encontró el cofre. y pese a que hubo un tiempo en que solo el haberlo visto le habría puesto los pelos de punta por la probabilidad de que la criatura que más odiaba estuviera ahí, esta vez, él de hecho se emocionó. y ahora, la idea de que en su interior hubiera un mimic más que nervios le produjo emoción; le produjo… hambre.

lo arrastró con una fuerza anormal hacia donde el grupo había pasado la noche. el mediano pidiéndole a Senshi que estuviera atento, un brillo particular en sus ojos mientras les decía a los demás que quizá al fin les había sonreído la suerte.

el grupo miró con expectación mientras Chilchuck trabajaba para abrirlo y, minutos después, apreciaron que de hecho no había un mimic dentro cuando levantó la tapa. lo que no fue malo y mucho menos una pérdida, porque ahí había carne: pedazos grandes y pequeños, cortes irregulares a los que les escurría sangre todavía. parecían frescos, pero nadie le dio importancia a ese detalle mientras la felicidad se apoderaba de sus expresiones.

más tarde, Senshi ya estaba troceando los pedazos grandes y cortando rebanadas delgadas de ellos para hacer milanesas. él comentó que los más pequeños terminarían en una sopa de carne con las especias que aún tenían.

Falin apreció al enano cocinar con un entusiasmo inusual, quizá por las pocas veces en las que había podido hacerlo desde que la mala racha del grupo empezó.

Chilchuck fue el encargado de preparar la sopa, y Marcille de sazonar las milanesas. Falin no fue requerida más que para agregar conservadores en el resto de la carne, para asegurar que no se pusiera mala, ya que no sabían el tiempo que podría llevar en el cofre.

en eso, ella notó los restos de algo, así como también la falta de alguien en una de las esquinas, tumbada en el saco de Chilchuck porque aparentemente la calidez del mediano permanecía en él, durmiendo en una posición incómoda a la vista donde los brazos y piernas estaban por todos lados, pero que resultaba cómoda y agradable para ella. había una excusa para la falta, lo sabía, pero...

Falin pasó saliva, terminando y regresando a su asiento en el suelo, sus pensamientos revueltos mientras miraba a los chicos cocinar, sus ojos abriéndose más y posándose específicamente en la elfa, a la que había notado dirigiéndole una mirada de reojo cuando se acercó al cofre hace un minuto.

fue inevitable para ella recordar cómo llegaron a esta situación en primer lugar.































"sigan así. queda poco después del dragón."

el encuentro del grupo con el dragón, además de un indicador de su pronta muerte, fue atroz.

↳ ❝ 𝗛𝗨𝗡𝗚𝗘𝗥 ❞  farcilleDonde viven las historias. Descúbrelo ahora