ENSEÑAME LO QUE ES AMAR ✔️

ELLA ES DIFERENTE 2/2

Joder!!! La misma que me había agarrado besándome con ese sapo.

Me hundí un poco en mi asiento, no quería que me reconociera, y menos en su materia, me gustaba mucho. Nadie respondió a su saludo, y lo repitió aún más fuerte, pero aun así no lo tomaron en cuenta.

Tomó sus libros y los golpeó fuertemente contra su mesa. Todos dieron un salto del susto, incluyéndome, que por más que haya visto el proceso, el golpe sonó bastante fuerte.

-Dije buen día- su mirada podía congelar a cualquiera.

Sonreí con un escalofrío en el cuerpo, ¡esta mujer tenía carácter!. Todos se sentaron inmediatamente haciendo chillar sus sillas. Se paró delante del escritorio. Pero es que esta no podía ser profesora, era demasiado joven, no tenía ni una arruga, tenía una piel increíble. Sacudí mi cabeza, otra vez esta cara de idiota la mía, joder.

-No se como solían ser las cosas por acá- dijo suspirando, - Pero conmigo todo es diferente.-

-Apuesto a que sí- dijo uno de los idiotas del fondo.

-¿Perdón? - dijo elevando una ceja, - ¿Dijiste algo?-

-Yo.. sólo decía que... seguramente todo es diferente con usted- dijo sonriendo perversamente. Muchos cerca de él rieron. Vi la mirada en sus ojos, y temí por sus vidas.

-Así que te gusta hacerte el graciosito!- dijo riendo entre dientes - Pasa al frente-.

Esta mujer me daba escalofríos, pude imaginarme cómo mataba a este pobre adolescente con las hormonas enloquecidas.

-Pero...- dijo temeroso.

-Que pases al frente!!- repitió pero más firme.

-Mierda, a este lo matan- susurré riendo.

-¿Puedes pararte de cabeza?- dijo cruzando los brazos. - Ok, eso es excelente- dijo sonriendo de lado.

Sus labios eran tan rojos.....

-Quiero que lo hagas ahora- . dijo apuntando a la pared.

Él la miró confundido, y ella insistió, Se preparó y lo hizo. Su polera cayó casi tapándose la cara, dejando a reducir todo su torso tonificado. A la profesora no se le movió un pelo, pero a la mayoría de la clase sí.

-Como te gusta tanto el doble sentido...- dijo abriendo las manos.

Todos rieron a carcajadas y yo la miré con la boca abierta. ¿Iba a dejarlo ahí toda la clase?.

-¿Pero... acaso no puede morir?-, preguntó una chica asustada. - Morir no-, dijo riendo, - Tal vez desmayarse, pero... nada grave-. Él intentó pararse y ella negó con la cabeza.

-Si lo haces, estarás reprobado en mi materia, y no podrás volver-, él la miró suplicante, pero no hizo nada.

-Ahora!!- dijo aclarando su garganta, - ¡Retomemos la clase! Mi nombre es Faye Marisorn, soy su nueva profesora de Literatura.-

Paseó su mirada por toda el aula, y se quedó posada en mi. ¡¡Ya valí mierda!!

-Veo caras conocidas-, dijo con una mirada que quemaba mis pobres ojos.

Agaché mi cabeza avergonzada, desde cuando yo me siento avergonzada por algo, levanté la cabeza firme, pero su mirada seguía en mi. No pude evitar cortar el contacto, era mucho. Sentí un revoloteo en el estómago.... bien, eso era... miedo verdad?, sí, era miedo. Empezó a dar la clase, y cuando se ponía a escribir en la pizarra, nadie respiraba siquiera.

Tenía una falda, de estilo escoces roja, no era demasiado corta, pero se notaba que tenía bastante trasero, así que hacía que se vea elevado. Quita la mirada!! Vamos Yoko!! ¡Concéntrate!.

-Yoko- susurró Sam, pero no alcancé a escuchar

-Yoko!!- me sacudió el brazo

-Mmmm?- dije mirándola un poco distraída

-¿Cual es tu problema?- dijo un poco molesta, - ¿Estás sorda?

-Sí... no... es que... es mi materia favorita-, susurré

-Lo sé pero...-

-¿Todo bien señoritas?- dijo mirándome fijamente con la tiza en la mano.

-S-si- dije nerviosa, - Lo siento-.

Frunció el ceño, y dió media vuelta para seguir con lo que hacía. Sentí como mis mejillas se quemaban, no sé por qué, pero me sentía intimidada. Miré a Sam y le dije que habláramos después. La clase pasó demasiado rápido. Miré molesta el reloj, por qué mierda la que me gustaba si pasaba rápido... ósea, la clase, la materia. Todos comenzaron a salir y les dije que se fueran sin mi.

-Emm, disculpe...- dije nerviosa. No tenía idea de que mierda estaba haciendo, simplemente quería escuchar su voz una vez más.

-Lamento... haber interrumpido...- intenté seguir, pero al ver su sonrisa, olvidé hasta mi nombre.

-No te preocupes-, dijo acomodando el cabello mientras guardaba sus cosas.

-No, de verdad-, dije con firmeza, - No quiero que se lleve una mala imagen de mi-.

Ella paró y me miró unos segundos, y luego volvió a hacer lo que hacia ¡Joder! olía tan bien.

-Eso dice mucho de ti-, dijo al acabar con una sonrisa bella en los labios, y yo sonreí como una idiota, sentía que estaba rojísima.

-Ok, nos vemos mañana-, dijo colgándose la cartera y saliendo. Vi cómo se iba,observando su cuerpo, cada centímetro.... Mierda, eso no está bien.