A la mañana siguiente la gran tensión de ayer no había disminuído, Obanai estaba al pendiente de ambos y teniendo una reacción exagerada con respecto a cada palabra que le dirigía el ojimorado.
En cuanto regresaron cada uno fue por su camino. Giyuu y Sanemi solo podían rezar para que de la boca de Iguro no salga nada respecto a su relación.
Aún que al ojiazul realmente no le importaba, pero Shinazugawa estaba muy preocupado.
Muy preocupado...
-Sa-ne-mi. -Irrumpio Giyuu en la finca de su pareja al día siguiente.
-¿Qué ocurre, Giyuu? -Contesto como si fuera lo más normal del mundo que entrar a su hogar sin autorización ni llaves.
-No se que carajo les ocurre a los demás, pero organizaron almorzar juntos mañana. -Contesto refiriéndose a sus compañeros hashiras.
El albino dió un suspiro. -¿Tan aburridos estan? Odio estas mierdas. -Dijo mientras se estiraba y abrazaba a su pareja en busca de refugiarse. -Ya casi no podemos estar a solas... Me gustaría abrazarte más.
-Si no te preocupara tanto el sacar esto a la luz sería distinto. -Respondio.
-¿Otra vez con eso?
-¿Por qué carajo te preocupa tanto?
-Ya empiezas con la misma cosa de siempre... -Agrego haciendo molestar a Tomioka.
-"¿La misma cosa de siempre?" No jodas, Sanemi. -Respondio ya algo molesto por la situación.
-Es que eso es. ¿Crees que no me jode tener que estar escondidos?
-No deberíamos porque estarlo.
Volteo a ver a otro lado. -Bien, dejemos esto aquí y vayamos de una puta vez.
-Lenguaje, Sanemi.
-Tú eres quien empezó con los insultos.
Ambos simplemente dejaron el tema hasta ahí, Tomioka volvió por donde vino para no tener que pelearse con Shinazugawa, ya que sabía que de alguna u otra manera volverían a ese tema. Y es que realmente le jodia, no entendía por qué tenían que esconderse si no hacían nada malo.
No eran criminales, ni tampoco demonios, no protegían demonios, ni han hecho alguna mala hazañas como robar o asesinar a alguien.
Entonces... ¿Por qué todo esto ocurre?
¿Qué pasa por la mente de Sanemi, como para querer esconderse tanto?
Hasta donde creía, no se llevaban tan mal con sus compañeros, y él único con quien realmente Giyuu no tiene buena relación ya se entero y tampoco es que su reacción haya sido negativa. ¿Entonces?
Dejo sus pensamientos a un lado por el momento, una vez llegó a su hogar tomo una corta ducha y aprovecho el momento para descansar ya que por suerte, estaba libre de misiones por esa noche.
Aún que realmente el sueño no lo atrapo.
.
Otra mañana más, otro día más, otra semana más, otro mes más, otro año más, otra década más, otro siglo más. Así sentía Giyuu que iba el mundo cada vez que despertaba, un ciclón infinito de días que no acabarán aún que el planeta explote, porque la galaxia, el universo, y lo que sea que haya después de eso seguira existiendo.
¿Por qué esta siendo tan profundo si solo esta cepillando su cabello? De una vez termino su cometido y ato su pelo en la típica coleta baja que solía llevar siempre.
Antes de salir pensó si debería ir en busca de Sanemi a su finca, pero luego recordo que él mismo peliblanco le había dicho que sería extraño que los vean llegar juntos. "Meh" pensó y tomo camino hacía el punto de encuentro.
Una vez llegó vio como todos ya estaban ahí, "Nuevamente sere el último...".
-¡Hey! ¡Tomioka, ven! -Le llamo la atención el pilar de la llama, Kyojuro. Mientras señalaba el lugar vacio junto a él.
-Voy. -Tal como dijo, fue a sentarse junto al rubio, a su vez saludando a todos los presentes.
-¡Bien! ¡Yo y mis esposas preparamos algo de comida para todos! -Anuncio Tengen mientras señalaba el banquete frente a sus demás compañeros, quienes parecían encantados por el buen olor que traía.
-¡Huele delicioso, Uzui-san! -Exclamo la pelirrosa pilar del amor.
-¡Kanroji tiene razón, tus esposas tienen muy buena mano! -Agrego Rengoku.
-¿Donde... -Se guardo las palabras el pilar más joven ahí luego de reconocer quizás algún rostro que se le hacía familiar.
-Rezare por la buena salud de tus esposas. -Comento Himejima.
-¡Gracias! ¡Ahora, tomen lo que gusten! -Volvio a hablar el señor extravagante dejando los platillos a merced de quien guste comer.
Giyuu veía a todos conversar unos con otros, le daba algo de envidia la facilidad de otras personas para socializar. Lo primero que tomo fue un onigiri, algo simple porque realmente no tenía mucha hambre.
Shinazugawa, por su parte, tomo una de las brochetas de pescado que había en medio de la gran mesa, para luego dirigirse a hablar con Obanai o Himejima, personas que la verdad podía soportar. También a Giyuu, pero no hablaría con él frente a los demás.
-Oigan, el otro día en una misión, el demonio con quien me enfrente antes de morir comenzo a hablar sobre su pasado sin razón alguna, antes de irme logre escuchar que fue expulsado de su hogar y familia por ser... Gay. -Comento Tengen.
-¿En serio? ¡Que horrible familia! Digo, no esta bien tratar a la gente así... -Comento Mitsuri poniendo un leve rostro de preocupación.
-Eso es algo... Extraño, ¿sabes? Pero aún así es irrazonable discriminarlo así. -Dijo Rengoku, mientras se llevaba una pata de pollo a la boca.
--Es algo preocupante. -Volvio a hablar el peliblanco que comenzo la conversación.
-Sea lo que sea, es un demonio ahora muerto, no se preocupen por él. -Comento el otro peliblanco y con cicatrizes.
-Así es, pero imagina que tú eres gay-... No, eso es un mal ejemplo. Imagina a un amigo tuyo gay que le sucede lo mismo. Obviamente es... ¿Extraño y... Raro? Pero no para hecharlo de la familia. -Agrego nuevamente Uzui hacía el ojimorado.
-Igualmente, ¿quien coño lo manda a decirle a su familia? Era obvio que reaccionarian así o se extrañarían.
-Shinazugawa-san, eso es un poco rudo. -Hablo por primera vez en la conversación Kanae, mientras sonreía y levantaba su indice. -Quizás se enteraron por error o algo así, de todos modos no lo podría ocultar para siempre.
-Kochou tiene razón. -Hablo Tomioka llamando la atención de algunos, era extraño que el ojiazul se integre a las conversaciones. -Igualmente, como eran su familia deberían como mínimo respetarlo, aún que no estuvieran de acuerdo. -Dijo mientras miraba a Sanemi con una mirada indicándole que deje de decir estupideces.
Tengen se llevó la mano a la barbilla. -Yo no se que haría en una situación así, si tuviera un amigo gay sería... Raro, ¿¡te imaginas que se enamore de mí!? -Dijo con cierto tono de susto exagerado.
-Nisiquiera un desviadito se enamoraría de tí.
"¿Desviadito?"
"¿Shinazugawa Sanemi acaba de decir desviadito?"
-No digas así, Shinazugawa. Suenas como un puto homófobo. -Dijo Iguro de la nada.
-Solo digo.
Giyuu tomo unos momentos para meditar. Sabía que era imposible que Sanemi hable en serio, de todos modos esta en una relación con él.
¿Cierto?
.
.
AASGHG, PERDÓN POR ACTUALIZAR TAN LENTO Y CAPITULOS TAN CORTOS. T-T
Ando en un bloqueo escritor terrible. 😭
En fin, chaito.
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Mi lindo consuelo (Obagiyuu/Giyuuoba)
Fanfiction"Si soy tan especial, ¿por qué soy un secreto?" Giyuu esta harto de ser el secreto de Sanemi y dejar que cualquier persona se le acerque. ¿Y quién mejor que el mejor amigo de su pareja para consolarlo? -Sanegiyuu/Giyuusane y Obagiyuu/Giyuuoba. -Menc...