¿𝑅𝑎𝑟𝑜? 𝑠𝑒 𝑝𝑜𝑑𝑟𝑖𝑎 𝑑𝑒𝑐𝑖𝑟...

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El rubió habría los ojos, estaba al borracho de sueño, escuchaba como otra chica habria las cortinas y ventanas de su habitación, ventilador, era un cálido día, Konoha era tropical

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El rubió habría los ojos, estaba al borracho de sueño, escuchaba como otra chica habria las cortinas y ventanas de su habitación, ventilador, era un cálido día, Konoha era tropical. Se sentó en la orilla de la cama, es tirándose y escuchando como crujía algunas partes de su cuerpo, cuando vio bien a la castaña del día anterior. La mujer volteó la cara encontrándose con el Omega, la Beta dió una sonrisita amable para el rubió-Buenos días, Joven Uzumaki espero que pasará buena noche en esta habitación- dijo la castaña, le ayudó pararse, en su mesita de noche había un despertado(no utilizado) que marcaba las 5:00a.m. muy temprano, pero ya estaba acostumbrado.

La castaña paró su actividad, y empezó hablar-Joven Uzumaki, su padre lo cambio del Instituto Uzumaki al Instituto privado de la Divina Providencia Shurike'n no Kato. El amo pide que se arregle para poder llevarlo a corde al horario, y lo respaldará Uchiha Óbito, su guarda espalda. -el rubió quedo mudó, no podía aguantar tanto trato formal, ni las personas de servicio de la casa Uzumaki eran así de respetuosas como Rin.
-Oh... Bueno y... ¿El uniforme?-pregunto un poco incómodo-Joven Uzumaki, su uniforme esta en la puerta de la derecha que esta al lado de baño, ese es su clóset y vestidor. Tierno ropa nueva, pero si gusta le puedo ordenar su ropa en su armario. -.
El rubió quedo sorprendió, ni sabia que había una puerta a la derecha del cuarto de baño, ahora entendía porque le decían distraído..
-Sí, sí Rin acomoda toda la ropa que traje en el clóset, a y bueno, gracias-ttebayo-dio una sonrisa con una un poco de pena por su distraída conciencia, caminaba con un poco de vergüenza, habrío la puerta de mármol café, dejado ver un gran cuarto con puras prendas caras, en cada armario tenía distintas prendas y con nombre para cada ocasión, al final del pasillo había un gran espejo con lámparas por los laterales, la luminosidad era increible, blanca y que pues se podía ver completo, a un lado de la habitación había puros productos de belleza que cualquier Omega quisiera, todos parecían ser costosos y de alta calidad, sorprendido se miro en el espejo, el en un lugar tan sofisticado y elegante mientras que el estaba desaliñado, recién parado y bien despelucado.
Cuando hiba saliendo del lugar en las esquinas vió un colgado en de paños para cecarse después del baño, cada uno tenía una labor en específico, uno para el cabello, otro para torso y brazos, uno íntimo, otro para las piernas y uno más para los pies.

-Wow... ¡Esta gente si que no sabe en que gastar su dinero!-Dattebayo-dijo el Omega con una gota de sudor bajando por su nuca, estaba realmente sorprendido con la extravagancia de la familia no muy familia. -¿Te gustaron los productos?-escucho la voz del Alpha, Minato estaba arrecostado en el marco de la puerta con un café recién hecho, sin camisa y con una bata suelta, el Omega se sobresalto y pego un gritó-¡Ah! ¡Me diste un susto padre!-.-Oh, perdón, jeje ya tengo el hábito de asustar a la gente. -
Dijo el Alpha con una mirada inusual, naruto tenía un sonrojo por la vergüenza por la posición en la que estaba. -Y bueno.. ¿Si te gusto? Me dices para poder cambiarlo, y si algo te molesta.. Para poder desaserme de el. -hablo lo último con una voz escalofriante y con una mirada dura, daba miedo su rostro o como miraba, en el interior de Naruto se inundó de terror y miedo, claro que solo miraba para abajo-Papi, me voy a asear. Te veo en el desayuno-dijo el Omega sin mirarlo a los ojos-Claro, Naru-Chan ve sientete cómodo-dijo con una sonrisa.

•𝐸𝑙 𝑂𝑚𝑒𝑔𝑎 𝑑𝑒 𝑝𝑎𝑝𝑎́•Donde viven las historias. Descúbrelo ahora