un frio invierno se hacia presente en Inglaterra, dando paso a la navidad y la pasaría con mi abuela, era la única persona que me quedaba, mis padres murieron cuando tenia 6 años.
- abuela, ya llegue!- grite mientras entraba a la casa, era tan cálida y pude percibir un olor muy rico, seguramente había horneado galletas, así que camine a la cocina -mmm, que rico huele, que es?- dije mientas trataba de mirar por la pequeña ventanilla del horno.
- o, solo son galletas, estarán en un momento mas- dijo con una calma y con una sonrisa, realmente no se que voy ha hacer cuando ella ya no este conmigo -y como te fue, escuche la vecina decir que ese examen esta muy difícil- ese examen, era el mas importante de todos para todos los jovenes del pueblo.
-No te preocupes Abú, posiblemente lo pase, sino pues volveré a estudiar para el próximo- aunque me tomaría mucho tiempo, aquel examen determina el futuro de los jovenes que lo hagan pues si lo pasas podrás ir a la ciudad con un trabajo bien pagado, pero si no lo pasas tendrás solo 3 oportunidades mas para pasarlo, y si no lo pasas te quedaras en aquel pueblo.
- claro que lo aras, eres mi nieto, sacaste mi inteligencia- no pude evitar soltar un risa, todo era maravilloso
-hijo me ayudarías a mover un espejo por favor- ¿un espejo? me pregunte yo.
-claro, pero ¿a donde lo vas a mover?- el espejo era grande, pues era donde podrías verte de cuerpo completo, y no había mucho espacio para el.
- o se lo venderé a un vecino- porque lo venderá
- y porque lo vas a vender abue?- era muy hermoso, el marco parecía como si lo hubieran bañado en oro, y el espejo estaba muy reluciente.
- o bueno ya lo tengo desde hace mucho, y porque es algo peligroso- dijo algo preocupada pero no le tome mucha importancia, pues lo único que llamaba mi atención era aquel espejo, y al parecer ella lo noto.
- hijo, hagas lo que hagas no te acerques al espejo- y sin mas se fue, pues dejar algo en la estufa que posiblemente se pueda quemar.
no volvimos a tocar el tema, cenamos y nos fuimos a dormir, pero, a media noche escuche como si me llamaran, pero no era la voz de mi abuela, así que decidí salir y ver de donde venia esa voz, asta que llegue frente al espejo, y de el brotaba una luz muy brillante, cuando mi mano trato de tocarlo, esta lo traspaso, así que la saque rápido, aun confundido lo volví a hacer y viendo que no pasaba nada malo decidí entrar al espejo, cuando todo mi cuerpo traspaso, la luz del otro lado desapareció.
- no. no ,nooooo!- no ahora como regresaría, como? no pude tener mi ataque de ansiedad porque una voz se hizo presente
-por fin lo encuentro, príncipe Eidan ya es tarde- ¿príncipe? no esto debe ser un error
-¿me hablas a mi?- tarado, claro que me hala a mi, no hay nadie mas
-am, si, es el único príncipe que hay en este lugar- dijo con obviedad -príncipe, no es momento de juegos, tenemos que ir a sus aposentos a que se prepare- ¿prepararme? ¿prepararme para que?, no tuve tiempo de seguirme cuestionándome porque la señorita me empezó a jalar -príncipe, ¿desea usar el traje azul o el amarillo? ¿usara los guantes? ¿con corona o sin corona?- no entendía nada de lo que me preguntaba, ¿azul? ¿dorado? ¿corona? ¿de que me habla? -príncipe s me permite darle su opinión creo que debería usar el amarillo, pues siempre viste de azul- no se de que habla, pues solo podía ver el gran lugar, era enorme y muy lujoso.
-amm, creo que tienes razón, usare lo que creas conveniente- porque no tengo idea de nada!! no se como rayos llegue a este lugar, el porque me llama príncipe, y porque tengo que estar listo ¿listo para que?!! y sin darme cuenta ya estaba en lo que creo eran mis aposentos, que eran los mas grandes que mi casa, y mientras analizaba cada rincon de ese lugar empezaron a arreglarme, y en menos de pocos minutos ya estaba listo.
-listo príncipe, ya esta listo, sus padres ya lo están esperando en la sala principal, y afuera ya lo esta esperando el joven Arché, el lo acompañara- que alivio, por lo menos no voy a estar solo en este lugar
-gracias- y rápidamente salí y ya estaba un joven alto de piel pálida, y su cabello era blanco con rosa en las puntas, - am, hola- dije para llamar su atención pues estaba de espaldas.
-o disculpe príncipe, sígame, sus padres ya están esperando su presencia- su voz era suave, y sus ojos eran de un color rosa, y empezó a caminar, por lo que rápidamente lo seguí -príncipe, el presente que preparo para su hermana ya esta apunto de llegar, pues se retrasó porque no encontraron el diamante que pidió- ¿diamante? que digo
-o, am, no te preocupes-trate de hablar de lo mas normal, de pronto el se detuvo en una gran puerta y la abrió dejándome ver un gran salón muy decorado, y pude ver que habían dos personas un hombre alto, que ya se ve un poco mayor, y tenia un semblante serio y alado de el había una señora no tan alta, y se ve joven, de pronto escuche a una persona gritar.
-atención!! el príncipe Eidan esta aquí!!- a era para mi, y las personas presentes que al parecer eran sirvientes hicieron una reverencia menos las dos persona que vi, y como pude me acerque a ellos.
-hijo mío, te vez muy bien- dijo la mujer -¿y tu corona? recuerda que esta noche tu vas a tener que abrir el baile esta noche- ¿Cómo que baile? - tu madre tiene razón, no debes olvidar las etiquetas, esta noche es muy importante para tu hermana, no lo arruines- a uch, eso dolió, no solo se ve serio el señor también se ve que es muy estricto.
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Innocens mi duce obsesión
Fantastikun joven que en medio de la noche descubre que uno de los espejos de su abuela brilla, por lo que al tocarlo descubre que puede traspasarlo, y eso izo, llevándolo a un reino, un reino que oculta grandes cosas, un reino donde a través de un baile con...