reino nims

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-príncipe, no tiene tiempo, tiene que alistarse para el baile- una joven corría detrás de mi, es tan insoportable, -príncipe Aran, su padre se enfadará si no esta listo a tiempo- ¿Por qué no se calla? su voz chillona me molesta, la odio, odio este baile.

-no te preocupes, estaré listo a tiempo- dije lo mas tranquilo que pude, el día de hoy se realizara una celebración en el reino caelestia, pues hoy seria el debut de la princesa en la sociedad, y mi padre el rey me a obligado a ir, cuando menos lo espere ya había llegado a mis aposentos, cuando entre ya habían varios sirvientes esperándome

-príncipe, se hace tarde- es un peor cuando mi acompañante real es muy ordenado y muy riguroso con el horario -por favor ayuden al príncipe a estar a liso lo mas rápido posible- y sin mas desapareció por la puerta.

príncipe, ¿Qué traje le agrada mas, el azul o el gris?- dijo mientras me mostraba las dos opciones -príncipe ¿prefiere las botas o los zapatos?- dijo otra -¿quiere los guantes o no?- ya me estaba mareando -¿se pondrá la corona o no?- voy a vomitar 

-me pondré el traje gris, con los guantes, usaré los zapatos, y si, llevare la corna- aunque no lo quisiera era el protocolo, y empezaron a arreglarme, no tardaron mucho, y ya estaba ,listo -gracias- dije y salí de mis aposentos.

cuándo salí, mi acompañante ya me esperaba afuera -hicieron un buen trabajo, y justo a tiempo- dijo mientras veía el reloj -su padre ya lo esta esperando abajo- genial al parecer iré junto con el 

- bien, ¿el presente ya esta listo?- como una de las múltiples reglas que hay que seguir en un baile, en en debut como este se tiene que llevar un presente como símbolo de la amistad hacia el reino, mientas bajábamos las escaleras pude ver a mi padre que estaba algo desesperado, posiblemente me lleve un regaño.

-padre- dije cuándo estaba a centímetros de llegar, dirigió su mirada hacia mi, si, estaba por recibir un regaño -lamento la tardanza-

-hijo, te ves bien, pero no es correcto llegar tarde aun evento como este, espero no se vuelva a repetir, bien no perdamos mas tiempo- y subió al carruaje copie su accion y subí junto a el, tardamos mínimo 2 horas en llegar o mas -hijo, ¿trajiste el presente para la princesa Anxela?- pregunto como si no me lo estuviera recordando todos los días.

-si padre, no te preocupes, es un collar de rubíes y diamantes- dije con simpleza, como si no fuera el único en el mundo -además de que por desgracia mi otro presente llegara una semana después- veo la duda, la confusión en su cara - es un pura sangre- y ahora veo el asombro en su mirada, no es por presumir pero yo siempre doy los mejores regalos del mundo.

-valla, veo que te as lucido con los presentes hoy hijo- claro, tengo que dar la mejor versión del reino, sin darme cuenta llegamos ya al reino cealestis, muy diferente al reino Nims, cuando bajamos del carruaje una persona se acerco a nosotros para guiarnos, como si no conociera este palacio, cuando llegamos al salón principal había mucha gente importante, y al parecer llagamos justo a tiempo pues en ese momento las luces se apagaron y una gran luz apareció enfocando al rey tromos, se debería cambiar de nombre.

-sean bienvenidos a esta celebración por el debut de mi hija, la princesa Anxela- dijo en voz alta el rey para hacerse a un lado, para abrir paso a la princesa, que llevaba un vestido roza, con unos toques en dorado, un hermoso peinado, con una pequeña tiara, se llevo toda la atención de los presentes, pero yo solo podía prestar atención al príncipe Eidan, que a mi parecer se veía hermoso, como un Rubí, brillante, y que provoca una pasión inexpiable, pero también pude notar que se veía confundido.

-se ve que el príncipe esta nervios por abrir el baile- dijo mi padre, claro, puede ser eso, de pronto el y la princesa comenzaron a bajar las grandes escaleras para ir hacia el centro del salón, una vez llegaron, los músicos comenzaron a tocar, parecía que será la primera vez que el príncipe bailaba, y no puedo estar seguro pues cuando cumplí la mayoría de edad deje de ir a los bailes y celebraciones, pues eran aburridas, de a poco a poco el príncipe se fue dejando llevar dando así a un hermoso baile, una vez terminado los músicos pararon por unos minutos -para dar lugar una nueva melodía, en la cual duques, condes, y familias reales, empezaron a bailar, lo cual mi padre aprovecho para acerarse a la familia anfitriona

-que bella celebración sus majestades- menciono mi padre -se a lucido esta vez, y el baile fue de lo as bello a mi parecer-alago, -o les presento a mi hijo Aran, pues como saben ya no se a presentado a estos evento- genial, ahora tenia que ser hipócrita.

-buenas noches sus majestades- menciones tranquilamente mientras hacia un a reverencia, pues aunque sea un príncipe es una forma de respeto y educación, es absurdo 

-buenas noches para usted príncipe, veo que a cambiado bastante para como lo vi la ultima vez- menciono el rey, alguien que vive infelizmente, -espero que allá cambiado para bien- idiota se burla de mi

-no tenga duda de eso su majestad- yo si tengo principios - mi reina, esta muy hermosa esta noche- trato de cambiar el tema

-o muchas gracias, usted también se ve bien, y como dijo mi esposo, si a cambiado mucho, ahora es mucho mas atractivo, seguramente tiene a muchas jovencitas detrás de usted- ja, es ovio, ¿Quién no podría resistirse a mi belleza?

-pero no soy nada comparado con sus hijos-dije ahora viendo al príncipe, -es bien sabido que heredaron toda su belleza de usted, la princesa heredo sus hermosos ojos y su carisma, y el príncipe se podría decir que es una copia exacta de usted- bum, ya vi el enojo del rey en sus ojos

-es usted muy amable- claro que lo soy 

-o, e traído unos precedentes para la princesa- dicho eso se acerca mi acompañante con el collar -este es un collar que mande a hacer únicamente para la princesa, lamentablemente mi otro presente llegara dentro de una semana- y una vez mas las caras de confusión 

-o, si no es inconveniente, se podría saber ¿Qué es?- ay pero claro que si

-claro, es un pura sangre, espero no les moleste- y ahora las caras de asombro, justo lo que quería 

-o, no para nada, se lo agradezco- dijo la princesa, y ahora es momento 

-bueno, como agradecimiento ¿me concedería este baile?- puedo observar un pequeño enrojecimiento en su cara, voltea a mirar a su padre como busca de aprobación, y la obtiene

-su alteza, si me permite me retiro- puedo escuchar decir al príncipe, le dan la aprobación y se va, y la princesa y yo decidimos ir al centro de la pista para bailar, y lo único que puedo hacer es ver para donde se dirige el. 

Innocens mi duce obsesiónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora