Capítulo 3- Aguas turbulentas

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Toda la familia real estaba sentada alrededor de la mesa conversando mientras esperaban la cena. Alicent se encontraba teniendo una amena charla con Helaena que estaba a su lado, y el rey hablaba con Rhaenyra. En cambio, el único que se mantenía en absoluto silencio era Daemon, él estaba concentrado en los dos lugares vacíos a su lado y los otros dos lugares vacíos frente a estos

_Creo que tus sobrinos no quisieron cenar hoy- Rió Alicent tratando de que Daemon hablara

_No te apresures, llegarán- Contestó sereno

_¿Sabes qué les pasó a los niños?- Preguntó volteando Rhaenyra a Ser Harwin

El hombre que estaba de guardia se quedó pensativo unos minutos y luego negó, no había nada por lo que los chicos se hubieran peleado

_No te preocupes, seguro llegarán- Aseguró

Daemon estaba deseoso de que aquellos cuatro niños llegarán al comedor ¿Se estarían peleando ya?¿Se habrían golpeado?¿Habría alguna pelea? El príncipe canalla quería reír, pero no podía hacerlo o sería descubierto en su plan. Cómo si los dioses hubieran escuchado sus plegarias deseosas, los cuatro niños entraron al comedor, los rostros estaban serios y habían ligeros empujones imperceptibles por parte de Aegon a Lucerys pero Aemond trataba de frenarlo y Jacaerys aprovechaba para hacerlo tropezar ligeramente

_Han llegado- Habló feliz la reina

Los cuatro niños dejaron sus "travesuras" y sonrieron, con rapidez tomaron sus lugares pero la sorpresa de los adultos no se hizo esperar al ver que los hermanos mayores tomaban asiento juntos, dejando a sus hermanos menores en los asientos frente a ellos.
El príncipe canalla estaba expectante a qué pasaría durante la cena, debía mover bien las piezas del tablero y estaría bien

_¿Cómo están?- Preguntó el mayor a los chicos

_Bien- Respondió Aegon _Jace y yo salimos a dar un paseo en dragón- Comentó

Daemon asintió y observó como el semblante de su sobrino menor decaía

_¿Ustedes?- Preguntó asintiendo hacia los menores

Lucerys observó a Aemond y vio su triste expresión, mentiría por su amigo

_Estamos bien, jugamos con Helaena y luego estuvimos pintando- Contestó

Esta vez Aegon frunció el ceño y Jacaerys soltó un suspiro

_Eso es estupendo, verdaderamente parece que si fueran hermanos- Comentó Daemon

Los cuatro niños se observaron entre sí, no les gustaba nada que sus hermanos parecieran hermanos de quienes no lo eran. En ese momento el príncipe comprendió que en cualquier momento las cosas explotarían y sonrió triunfante.
Alicent observaba la interacción de su cuñado con los niños y le parecía un tanto extraño pero le causaba ternura que se tomara el tiempo de pasar un tiempo con ellos

_¿Habla con ellos?- Preguntó Rhaenyra

_Es lo que hace- Rió Alicent

Ambas madres estaban sorprendidas pero felices.
Daemon volvió la mirada hacia ellas y les dió una sonrisa, temía que ambas mujeres se dieran cuenta y frustraran su esperado plan.
La cena transcurrió sin muchas palabras hasta que el pequeño Aemond tomó valor para dirigirle la palabra a su hermano

_¿Crees que soy flojo?- Cuestionó dejando su sopa de lado

Aegon lo miró confundido

_No- Respondió restándole importancia

_¡¿Crees que soy tonto?!- Exclamó

Daemon rápidamente observó la escena, por fin iba a disfrutar del juego

Amigos codo a codoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora