Do or die [jk x you]

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Kim Lia

Había pasado un día completo después de lo que hablé con él, una mujer trajo mi desayuno, comida y cena.

Tenía hambre así que pensé que comer esa comida no estaba mal, se veía bien.

Al despertar la mujer volvió a entrar, pero esta vez no traía la charola de comida.

—Buenos días señorita, el jefe la espera en el comedor, traje ropa limpia y puede tomar un baño antes de bajar.

Agradecí con una reverencia y decidí tomar un baño y ponerme la ropa que había dejado en la cama.

Era un pantalón de mezclilla con un lindo top, un suéter blanco con flores es distintas partes y unos tenis blancos.

Salí de la habitación y en la puerta me esperaba un chico de tés pálida.

—Buenos días señorita, el jefe la espera abajo, acompáñeme.

Dijo con un tono serio y lo seguí hacia abajo, caminamos por un pasillo iluminado con decoración elegante, pronto llegamos a una puerta que daba haca un jardín y este la abrió, caminamos por un pasillo al aire libre con alguna que otra planta y pronto llegamos a una carpa donde se encontraba él y otros dos hombres mas desayunando.

—Adelante. -Hablo el rubio con una sonrisa coqueta y tome asiento.
—Buenos días lía, ¿Pensaste lo que te dije ayer? -Dijo serio.
—El está muerto. -Respondí de la manera más cortante posible
—Sabes que no es así.
—Claro que es así.
—¿El te lo dijo? -Volvió a hablar el rubio de forma burlona.
—Yo lo mate. -Respondí con seriedad.

Los tres hombres en la mesa se sorprendieron al escuchar mis palabras.

Pero es verdad.

Después de la impresión, volvió a hablar.

—No es así.
—Ahora mismo, existe una mafia que se hace llamar "K", pero nadie ha visto al jefe, creemos que es tu padre. -Hablo el chicho de pelo castaño.
—¿Mafia "K"? -Pregunte extrañada.
—Así es, tu padre está en algún lugar de Corea y necesitamos encontrarlo. -Hablo el pelinegro.
—Y para que quieres encontrarlo ¿Venganza? -Hable burlona.
—¿Venganza? ¿De que? -Se preguntaron ambos chicos sin saber de lo que hablaba.
—Si quisiera venganza te abría matado a ti, princesa.
—¿Entonces?
—Al ser una mafia silenciosa poco a poco se ha vuelto en la más poderosa del país.
—¿Y crees que matándolo tendrás más poder?
—Que mejor que eso.

Rodé lo ojos y guardé comentarios para otro momento, aún así él lo noto.

—Come algo. -Dijo.
—Quiero volver a casa.
—No
—Venía con algunos amigos, solo déjame inventar algo para que no se preocupen.
—Dije que no.
—Entonces no cuentes con mi ayuda.
—Te obligaré a que hables.
—Podrás incluso matarme y ni así habré dicho una sola palabra, Jeon.

¿LO ESTÁS DESAFIANDO, LÍA?

TE MATARÁ.

Él no puede hacer nada, él cederá ante mi, quiera o no.