paren todo, REVIVI
(se viene el final)
_____________________________Desde que el tan esperado verano llegara, Iván y Rodrigo no perdían el tiempo, saliendo más de casa, ya que en invierno no querían ni levantarse de la cama.
A pesar de que, el clima era bastante raro y a veces hacia mucho frio, su compañía les brindaba el calor que tanto necesitaban.
Pero no todo era tan alegre, ya que al ir creciendo sus personalidades iban chocando, suponían que no se conocían tanto como pensaban, y que idealizar o esperar cosas del otro no era tan sano.
Rodrigo seguía enamorado del Iván pequeño, ese que hablaba bastante poco y solo agachaba la cabeza ante situaciones complicadas.
Y ahora era todo tan distinto, por ejemplo; El dia que por primera vez Rodrigo vió a Iván fumar. Lo cual no le agradó ni un poco.
Fue en una que iban a pasar un rato atrás del colegio, donde había una parte quemada muy antigua, Rodrigo había pasado al baño, se había demorado un poco, e Iván para matar el tiempo prendió un cigarro, mientras se adentraba a la parte quemada y un poco derrumbada.
Estaba con grafitis, clavos, techos rotos, de todo, daba un poco de miedo, pero era agradable pasar tiempo ahí, porque ningún profesor iba.
— Ivi, ¿dónde estás?
Le susurró Rodrigo desde una distancia considerable, Iván, que estaba sentado en lo que parecía ser una biblioteca pequeña, apagó su cigarro lo más rápido que pudo, no quería que lo viera así.
— A-Acá en la biblioteca.
Rodrigo entró a aquel cuarto con algunos libros y estantes quemados, con polvo, sintió un olor raro, y al ver un poco de humo entendió.
— ¿Estás fumando?
No obtuvo respuesta, y solo frunció el ceño, nunca le gustó que Iván estuviera metido en cosas raras, menos a esta edad.
— ¡Respóndeme!
— No me grites ¿Que te pasa?
— ¡¿A vos que te pasa?!
Iván suspiró, levantándose y agarrando el cigarro que todavía estaba prendido miró a Rodrigo.
— Tira eso.
— No, no quiero.
— No te estoy preguntando, Iván, me molesta que hagas eso.
— ¿Hacer que?
— Dañarte a vos mismo ¿Te pensas que no me doy cuenta que fumas de hace rato?
— Si no te gusta andate.
Rodrigo se acercó a Iván y lo quedó mirando extrañado, este no era el Iván que conocía, quería llorar.
— Sos un hijo de puta.
ESTÁS LEYENDO
Persiana Americana ! RodriVan (CANCELADA)
RomanceLa madre de Iván compra una persiana, dónde el pequeño, miraba siempre a un castaño con ojos verdosos. Capitulos cortos, aunque algunos no tantos. (Narrador omnisciente)