Capítulo 14

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Las tiendas locales tenían totalmente asombradas a las tres hermosas australianas, que se maravillaban ante la hermosa, sexy y original ropa que vendían en aquel pueblo

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Las tiendas locales tenían totalmente asombradas a las tres hermosas australianas, que se maravillaban ante la hermosa, sexy y original ropa que vendían en aquel pueblo. Todo de muy buena calidad y con un precio que te caes de espaldas; era el paraíso para estas mujeres que aman completamente vestirse bien.

Con muchas bolsas en sus manos, y aún con ganas de gastar dinero, se adentraron a otra tienda llamada "The Devil" que tenía todo tipo de prendas y accesorios provocativos, y que por supuesto, atrajeron la total atención de la rubia, quien siempre ha amado este tipo de vestimenta para sus videos y fotografías.

Comenzaron a rebuscar entre todas las maravillas del lugar, sin importarles tener más de diez bolsas en sus manos.

Chiara se dedicó a escoger todo lo sexy, lo provocativo. Faldas pequeñas, arnés, medias bucaneras, collares, lencería. Mientras que la dulce Karla solo miraba faldas tableadas, blusas, todo más simple, ella siempre se ha vestido como una chica sacada de Pinterest.

Francisca se acerca a la pequeña Pattinson, quien la llamaba para pedir su opinión sobre un conjunto, todo le quedaba realmente fantástico, y la pelirroja disfrutaba del espectáculo que le daba la rubia, pensando en cómo una chica tan guapa y atractiva como Chiara no tiene una pareja. Hoechlin es completa y totalmente lesbiana, y no puede negar que aquella rubia llama su atención, porque ¿para qué seguir mintiendo? La menor de los Pattinson le atraía en gran manera.

Pero, si su mejor amiga lo dice, ella tratará de cumplirlo, y para Kate, sus hermanos son sagrados, al igual que sus amigas, y no desea que ninguno de ellos se junte más allá de una pequeña amistad. Mucho menos por algo pasajero y sin futuro, que hará que todas las situaciones en las que se encuentren todos sean incomodas.

Kate las tienes advertidas, al igual que a sus hermanos, si se llegan a relacionar sexual y amorosamente entre ellos, las cabezas rodaran.

Las chicas compran todo lo que se prueban y les gusta, lo que significa que casi vacían la tienda por su compra compulsiva. La pelirroja se compró un hermoso y sensual corsé victoriano de color negro, el cual les gustó también a Karla y Chiara. La castaña compró faldas y blusas que se le ven muy preciosas, y Chiara compró demasiadas cosas como para vestir a todo el pueblo. Toman un taxi e indican la ubicación de la casa, para así por fin volver y comer algo.

El móvil de la pelirroja vibra en su bolsillo, y como puede logra sacarlo sin tirar por ahí las bolsas, era un mensaje de Chiara, quien tuve el atrevimiento de insinuarse por primera vez.

«Te veías tan bien con ese corsé, en casa me lo modelarás nuevamente ¿entendido?»

Una pequeña risa nerviosa se le escapa de la boca, Chiara podía lograr que ella se sometiera tanto que no entendía cómo es que aún no se arrastraba detrás de ella.

«Lo que su majestad desee» escribió arriesgándose totalmente.

Porque sí, Francisca creía en los códigos de amistad y en que debe ser una buena y fiel amiga, pero es humana y tiene necesidades, y esas necesidades solo las podría saciar la hermana pequeña de Kate, y la castaña no hará nada para cambiarlo, porque así son las cosas.

Peligrosa atracción | Libro 1 "Bilogía Peligros" [EN PAUSA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora