[81] Yo me casaría contigo, Paul

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(Reproducir- Marry you de Bruno Mars)
(Reproducir canción, aunque en la parte de la canción te recomiendo coordinarla, disfruta!)

Paul dejo el móvil en la mesita y envolvió a su chico en un abrazo.

-¿Qué has liado?- Preguntó Álvaro metido aún en su cuello. Tampoco se había negado o había hecho algo para prohibir que Paul no hiciera lo que fuera que hubiera hecho.

-Nada- Respondió tontamente Paul, mientras que acariciaba la cintura del chico. -¿Quieres ir a cenar?- Álvaro levantó su cabeza del cuerpo del otro para mirarlo a los ojos, pero eso no hizo que Paul dejase de atraerlo con su brazo.

-Quiero quedarme contigo- Su barriga rugió dando a entender que tenía hambre.

-Pero tienes hambre, bebé- Paul sonrió a la vez que miraba atentamente el rostro del chico y apartaba con sumo cuidado los mechones que caían por su rostro. La barriga de ambos sintieron miles de cosas ante el apodo.

-Podemos ir a cenar juntos, en plan, los dos, sin nadie más, tú y yo...- Dijo rojo y nervioso Álvaro.

-¿En plan cita?- Chinchó el rubio para poner más nervioso al otro.

-Si- Asintió súper sonrojado y dejando de mirarlo.

-Eres demasiado tierno, ¿Sabías?- Paul no dejaba de mirar al chico sonriente, si es que era demasiado bonito como para ser real.

-No, solo me sale contigo pero deja de mirarme así, Paul, que me pones
nervioso- Paul sonrió y se dedicó a mirarlo más, pero mirarlo con cara de tonto enamorado- AY, PARA- Le dio un pequeño empujón para luego levantarse -Vamos a cenar- Extendió su mano al chico para ayudarlo a levantarlo de la cama, Paul aceptó la delicada mano del rizado, pero cuando ya estuvo en pie y Álvaro fue a soltarle la mano, el rubio le apretó más.

-No, no me sueltes, es una cita- Entrelazaron sus manos para luego dejar los móviles en la mesita, no querían ver nada de todo el lío, solo estar para ellos.

Salieron del cuarto, y comenzaron a caminar hacia el comedor, donde por suerte ya no había mucha gente pues en el reloj de pared marcaba que solo quedaba veinte minutos para el cierre de cocina.

Se sentaron en una mesa al fondo, para que nadie les molestase. Pero antes de que Álvaro se sentase, Paul despegó la silla del rizado para que se sentase, y echarlo hacia delante.

-Que caballeroso- Se rio Alvaro al tener a Paul detrás de la silla.

-Solo cuido las cosas bonitas- Le guiño el ojo, haciendo que Álvaro echase la cabeza hacia atrás y sus ojos se conectaran. -Vale, quédate aquí, yo te traigo la comida- Beso la frente de este con cariño para luego desaparecer e ir hacia la comida. Alvaro estaba a punto de morir de amor.

A los cinco minutos Paul apareció con un montón de comida, que fue dejando poco a poco en la mesa.

-Vale, he chantajeado a los de cocina y me han dicho que nos dejan media hora más aquí, pero que se irán y apagarán la luz, pero ya me he adelantado yo y he robado una vela- Dijo súper orgulloso, sentándose en frente de este y poniendo la vela en medio.

-Estas loco, Paul, podríamos habernos ido- Comenzó a reír por las ocurrencias del chico.

-No- Dijo enfadado de broma. -Es una cita- Repitió.

Ambos se sonrieron con cariño, como si estuvieran de acuerdo en todo por primera vez, estaban nerviosos pero el ambiente era cómodo.
Comenzaron a comer.

-¿Si tuvieras que ser amigo de un famoso? ¿De cuál sería?- Preguntó Paul por la cara.

-¿Y esa pregunta?-

Camp rock// Au PolvorónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora