~Capítulo Nueve~

1K 82 10
                                    

Me encontraba boca abajo sobre el escritorio de Snape. Él había amarrado mis brazos y tobillos con un hechizo, no permitiéndome cerrarlas; me encontraba expuesta a él. Con mis rodillas sobre el escritorio, mi cuerpo quedaba inclinado, mi falda levemente levantada sobre mi trasero.

Este era el comienzo de mi castigo por lo que había hecho en la clase y mi sonrisa se ensanchaba más al verlo enojarse por mi reacción. Estaba disfrutando de esto y eso le molestaba, después de todo, no es un castigo si quien lo recibe lo disfruta.

Pero no podía evitarlo.

Snape removió su larga túnica negra y comenzó a arremangarse las mangas de su camisa, abrió uno de los cajones de su escritorio y sacó algo. Noté el objeto en su mano y, mi antes sonriente rostro, cambió a uno de confusión.

—¿Qué es eso? —pregunté, señalando el objeto con mi cabeza. Snape sonrió levemente.

—Es tu castigo.

—¿Vas a follarme con eso? —pregunté con burla—. Tu polla ha estado dentro de mí y eso no se acerca en tamaño.

Snape soltó una leve risa ronca.

—Esto no se coloca en donde te he follado, Potter —respondió—, y estoy seguro de que nadie te ha follado en donde va esto.

La diversión se había acabado para mí. Sabía en dónde colocaría el objeto y el miedo comenzó a formularse en mi interior, sin embargo, quería que lo hiciera. Quería probar y experimentar. Con él.

—El castigo se está tardando, profesor. ¿Acaso se ha arrepentido?

Snape soltó una risa nasal y caminó detrás mío. Terminó de levantar mi falda y comenzó a bajar mi braga hasta que esta estuvo en mis pies, su mano acariciando mis piernas, subiendo hasta mi trasero el cual azotó, provocando un grito por parte mía.

Su mano acarició mi ardor antes de mover su mano hasta mi abertura. Sus caricias verticales haciendo que cerrara los ojos mientras leves jadeos salían de mi boca. Sabía que me estaba preparando para el objeto, pero disfrutaría de esto lo que durara.

Introdujo dos dedos en mí de golpe y moví mi cuerpo hacia adelante gracias a la sorpresa, haciendo que sacara sus dedos. Di una especie de gruñido de reproche.

—Quieta, T/n, o el castigo será aún más doloroso —dijo, sus dedos introduciendo nuevamente. Esta vez con un tercero.

—Lo siento... no me moveré más.

Y necesité todo en mi para no moverme sobre sus dedos.

Cuando comencé a sentir las señales de que el orgasmo se acercaba, Snape detuvo sus movimientos y sacó sus dedos. Una maldición escapando de mí.

—Ya has disfrutado mucho, Potter. Es tiempo del castigo.

Los lazos mágicos que ataban mis tobillos comenzaron a moverse de forma que separaban mis piernas aún más y pronto algo frió me tocó. Contuve el aliento, el aire quedándose atrapado en mi garganta y mis ojos abriéndose de para en par cuando comenzó a introducir el objeto en mí.

—Oh, mierda —gemí con dolor—. Mierda, para, para.

—¿No es tan divertido el castigo, o sí? —respondió Snape y, aunque no se detuvo, disminuyó la velocidad con la que introducía el objeto. Aunque el dolor seguía presente.

Encajé las uñas en el escritorio de madera y apreté los ojos mientras un grito se formaba en mi garganta, pero era como si el sonido me hubiera abandonado. Cuando el objeto llegó a la parte más gruesa, fue cuando mi voz volvió y el grito fue tan fuerte que temí que alguien pudiera haberme escuchado.

Con cada embestida que Snape daba dentro de mí, sentía como el orgasmo se acercaba cada vez más. El dolor había pasado a segundo plano en pocos segundos. Las ansias de llegar me carcomían y lo único que podía hacer era gemir, esperando a que decidiera parar con el tormento.

—Por favor... —logré pronunciar entre jadeos—. Por favor, Snape...

—¿Por favor qué, T/n? —preguntó, su voz ronca provocando cosquillas en mi estómago.

—No pares... —pronuncié, y no debí de haberlo dicho, pues hizo lo contrario—. Mierda, no.

Snape soltó una risa ronca y procedió a sacar el plug de mi interior, haciendo que soltara un gruñido del dolor.

—Vístete. El castigo ha acabado... por ahora.

////////////////////////////////

Perdón por haberme tardado demasiado en actualizar.

𝐓𝐡𝐞 𝐓𝐨𝐮𝐠𝐡 𝐂𝐡𝐨𝐢𝐜𝐞 +18 | Severus SnapeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora