Al despertar, un leve sacudido terminó por sacarme el sueño. Dmitri se encontraba dormido, cual niño pequeño, con sus cabellos desalineados. Una oleada de ternura y tristeza me envolvió al verlo tan indefenso, y por un momento deseé que todo fuera solo una pesadilla.
Me levanté a encender la cafetera mientras abría la puerta de la cabina. Las luces de emergencia parpadeaban intermitentemente y el caos reinaba en los pasillos. La desesperación y el miedo se palpaban en el ambiente, aumentando mi propia ansiedad.
-Regresa a tu cabina - ordenó un guardia que corría, apuntando con su arma a los demás viajeros. Suspiré y volví a cerrar la puerta. Miré a Dmitri, y un miedo profundo erizó mi piel. No podía soportar la idea de perderlo.
-Mantengan la calma - dijeron a través de las bocinas. -Entramos en una especie de agujero de gusano, por favor, regresen a sus cabinas.
Tomé la taza de café y me senté a la orilla de la cama. Si bien había leído muchos libros de física gracias a papá, sabía que encontrar un agujero de gusano era casi imposible. Un recuerdo de él, con su sonrisa tranquila explicándome el universo, entró a mi mente creando torbellinos de emociones. La tristeza inundó mi cuerpo y por inercia comencé a llorar. Extrañaba a papá, y en ese momento todo parecía un recordatorio doloroso de su ausencia.
-¿Anastasia? ¿Qué pasa, nena? - La voz de Dmitri llamó mi atención y me giré para verlo mientras negaba con la cabeza. Su preocupación me atravesó como una daga.
-Fue solo un pequeño movimiento violento - dijo apretando mi pierna. -No pasará nada, estaremos bien. - Una sonrisa consoladora aparecía en su bello rostro, pero no podía borrar la nostalgia y el dolor que sentía.
Me limpié las lágrimas con la manga y forcé una sonrisa. Dmitri siempre tenía esa capacidad de calmarme, aunque fuera en el peor de los momentos.
-Pero, Dmitri, si realmente estamos en un agujero de gusano, no sabemos a dónde nos llevará. ¿Y si no salimos de esto? ¿Y si...?
Dmitri se incorporó lentamente y me tomó de la mano, entrelazando sus dedos con los míos. El contacto me llenó de un calor reconfortante, pero también de una profunda melancolía.
-Anastasia, hemos pasado por mucho juntos. Recuerda la promesa que hicimos antes de embarcarnos en esta misión. Pase lo que pase, nos mantendremos unidos. No voy a dejar que nada te suceda.
Su voz era un bálsamo para mis nervios, y su convicción me dio fuerzas. Asentí, aunque la preocupación seguía latiendo en el fondo de mi mente.
-Eres mi ancla, Dmitri. No sé qué haría sin ti.
Dmitri sonrió y acarició mi mejilla, su mirada llena de ternura y determinación. Sentí un nudo en la garganta, recordando todos los momentos que habíamos compartido y lo mucho que significaba para mí.
-Y tú eres mi estrella, Anastasia. Juntos enfrentaremos lo que venga.
Nos quedamos así un momento, aferrándonos el uno al otro en medio del caos que reinaba fuera de nuestra cabina. A pesar del miedo y la incertidumbre, sentí un atisbo de esperanza. Juntos, podríamos superar cualquier adversidad. Pero, en el fondo, la tristeza y la nostalgia por lo que habíamos dejado atrás seguían presentes, como un eco constante en nuestras almas.
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sombra estelar ✓ [Un Viaje Por Las Estrellas. Libro 1]
Science FictionEn un futuro devastado por la muerte de la Tierra, solo los más fuertes y sanos han sido seleccionados para una última oportunidad de supervivencia. Bajo el mando de Putin y su gobierno, los jóvenes elegidos abordan la nave espacial Aurora, emprendi...