Ocho

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8. No necesitamos otra fase

POV Lisa.

Desde que bajamos del avión había estado ansiosa por estar con Rosé y sabia que ella estaba igual que yo, pero no podía arruinar lo que teníamos, ella era tan divertida, tierna, dulce, era una relacion perfecta, aunque desde que iniciamos lo "nuestro" no habia estado con nadie, lo que era malo para mi cuerpo, todo el tiempo estaba caliente, y cuando estábamos en el cafe, solo pensé en una excusa para probar sus delicados labios, la fase dos, fue la idea perdecta, cuando ella se acerco a mi, y me beso, no pude evitar querer llevarla a cualquier callejon y demostrarla lo mucho que me encantaba.

-Deberiamos irnos, ya tienen suficientes fotos.-Me dijo Rosie apenas separandose un poco del beso, nuestra mirada conectada, el calor de su aliento aun chocando contra mis humedos labios, en cuanto llegaramos a mi departamento tendre que darme un baño en hielo, no puedo permitir que esto llegue a mas, no arruinare lo bueno que tenemos, yo solo atine a asentir y dejar otro rapido beso, ella me regalo una delicada sonrisa achicando sus ojos, era tan adorable, me puse de pie y le extendi mi mano para ayudarla a ponerse en pie, atravesamos la plaza con los nada discretos paparazzis y me atrevi a tomar su mano, y sonrio al ver nuestros dedos entrelazados, yo tampoco me veia muy diferente.
-¿Tienes palomitas, snacks o algo por el estilo?-Ladee un poco mi cabeza con esa pregunta.
-Para ver la pelicula.-Asenti con una sonrisa, iriamos a mi departamento a ver una pelicula, me sentia como una adolescente, una que sus padres la dejan sola con su novia por primera vez, subimos a su camioneta o la mia, no sabia ni de quien era, y nos dirigimos al edificio, apenas llegamos entramos casi corriendo al interior del lugar yo habia tomado su mano para ayudarla, pero a la vez para cuidarla, aunque ambas teniamos un equipo de seguridad que nos cuidaba muy bien.
-Ire a dejar mis cosas y darme una ducha, ¿En cuanto tiempo te veo?-Pregunto Rose mientras subiamos al elevador.

-¿Quince minutos?-Le pregunte y ella asintio, ella bajo primero y fue a su departamento.
-Te dejare abierto.-Le avise a Rosie, entre a mi casa, abri las cortinas, a excepcion de las de mi habitacion, de cualquier manera solo veriamos una pelicula y yo fui a darme una ducha, no dejaba de pensar en la situacion que tuvimos en el avion, ni en el beso que compartimos, yo en realidad, no sabia lo que sentia por ella, no era solo atraccion, no solo me gustaba, no solo seria algo pasajero.

-¿Lisa?- ¡Maldicion! ¿Cuanto tiempo paso?

-Estoy terminando de darme una ducha.-Grite desde el baño, sali apurada me coloque los calzoncillos, unos pantalones cortos de dormir y una camisa blanca, secaba mi cabello con la toalla y ahi estaba, Rosie en mi cocina, abriendo las puertas de alacenas, como niña pequeña, sacando todo tipo de snacks, se giro y me regalo una enorme sonrisa, y yo de inmediato la devolvi.

-Te estabas tardando, no crei que tardaras tanto en una ducha, dijiste quince minutos y me tomo veinte estar lista.-Me dijo con tono burlon.

-Lo siento, pero, no ajustaba la temperatura, por hacerte esperar, yo preparare las palomitas.-Le dije tomando un tazon y sacando las palomitas de las envolturas y poniendolas en el microondas.
-¿Cierras las cortinas? si alguien logra ver que estamos viendo la pelicula que aun no se estrena, me mataran y no me volveran a dejar ver una pelicula antes de que salga.-Le dije a la rubia que sonrio y asintio.

-Ademas, es la fase dos.-¿Que necesidad de decirlo? ¿Porque tenia que recordarlo? yo sabia que esto no era real, solo actue que no la escuche.

-Listo, palomitas, snacks, y solo faltas las bebidas, tengo coke y dr. pepper, en la nevera o botellas de aguas, si quieres.-Le dije y ella asintio como niña corrio por drs.

-Mi bebida favorita.-Me dijo con una sonrisa emocionaa.

-La mia igual, no se porque no he hecho campañas con ellos.-Dije mientras reproducia la pelicula, me sente a su lado y mientras comiamos veiamos la pelicula, habia sido la peor idea del mundo, no podia verla, mi cerebro no estaba en esa pelicula, yo queria estar con Rosie, me movi incomoda en mi lugar, una incomodidad que ella noto, se acomo un poco mas lejos, donde nuestros brazos ya no se rozaban.

-Esto no da miedo, quizas, si apago la luz.-Solo pude asentir, se puso de pie y dejo la casa a oscuras, solo la luz de la pantalla le permitio llegar a mi lado y se volvio a sentar a una distancia de mi.

-Rosie.-La llame, no sabia que queria decirle, no sabia como decirle, cualquier cosa que dijera, no sonaria bien.
Para mi sorpresa, ella se coloco a horcajadas sobre mi, sus manos fueron a mi cuello, y acaricio los cortos cabellos de mi nuca con sus dedos indices y pulgares, y nuestras miradas conectadas, deciamos todo y nada, nuestras miradas confesaban el amor que nuestros labios no decian, nuestros labios finalmente se unieron, fue un beso hermoso, un beso lento, y poco a poco aumento la intensidad, baje sus pantalones cortos, sintiendo su sedosa piel, y luego le quite la blusa, una deliciosa obra de arte tenia frente a mi, no llevaba sosten, me dejaba ver su rosados monticulos, y lleve mis labios a ellos, probandolos con desespero, un jadeo se le escapo mientras se acercaba a mi todo lo posible, bajo mi pijama junto con los boxers, dejando liberado a mi desesperado miembro por estar dentro de ella, Rosie me dejo entrar en ella, ambas liberamos un ruido del fondo de nuestras gargantas, por el desespero de por fin estar asi de unidas, era lo que las dos necesitabamos, ella hacia circulos mientras subia y bajaba, yo besaba su piel, besaba su cuello y sus labios, estaba tan desperada por ella, que estaba segura que dejaria marcas en su piel tan blanca, sus fluidos bañaron mi miembro, y yo levante mis caderas para alcanzar lo que tan desesperadamente necesitaba, cuando me corri dentro de ella, habia sido como si tuviera meses en abstinencia, los espasmos que nos dejaron ella continuaba temblando un poco mientras se relajaba entre mis brazos, yo acaricie su espalda desnuda, la comence a besar tiernamente, y ella se movio sobre mi, despertando mi miembro, escuche una risita de la rubia.
-¿Vamos a un lugar mas comodo?-Pregunte besando el cuello de la rubia, ahora era un beso hambriento por su piel.

-Eres insaciable.-Me dijo mordiendo mi hombro.
-Para tu suerte, yo apenas estaba calentando.-Era la mujer perfeecta para mi.

No sabia que hora era, Rosie y yo habiamos caido profundamente dormidas despues del viaje, de la noche tan activa, pero sabia que aun era de noche, porque aun no se veia la luz del dia entrando atraves de las cortinas, mi movil comenzaba a sonar; no era un sueño, Rosie estaba ahi a mi lado, descansando sobre mis almohadas, sus labios ligeramente abiertos, me acerque a ella, para ver su rostro pacifico, y solto un ligero ronquido, ella estaba descansando tan tranquila y confiada en mi, que su cuerpo estaba tan relajado que estaba roncando, gruñi nuevamente cuando mi movil continuo sonando.

-Dime Jenn.-Dije en un susurro.

-Maldicion Mannoban, espero que no estes con una de tus amiguitas, pero tenemos buenas noticias, mañana iremos a las diez a la agencia, despues de lo de hoy, estan interesados, al parecer hay rumores que otras agenncias estan esperando que sus contratos terminen para ir sobre ustedes.-Dijo Jennie con emocion.

-Genial, nos vemos mañana.-Termine la llamada, y continue observando a esa hermosa rubia, si a mi me preocupaba romperle el corazon, ahora yo era la preocupada porque ella me rompa el corazon, ella tenia algo con Joy, era yo la que estaba de mas en esa relacion.

No solo un shippeoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora