DOMINAME •MinWon/Meanie•

Siempre

(Tryle.  21 años antes)

Eran vísperas de navidad, esa gran festividad celebrada a nivel mundial, eran las nueve de la mañana, el sol alumbraba la habitación del rizado alegremente, el frío era presente pero a la vez cálido, no hay nada más divertido que una víspera de navidad para un niño.

Mingyu salió de la gran cama, poniendo sus pequeñas pantuflas de osito que su abuela le había obsequiado en su cumpleaños pasado número siete, salió de su habitación dispuesto a abrazar a su madre quien desde tempranas horas ya se encontraba preparando la gran cena navideña, y Sejeong lo abrazó amorosamente ayudándolo a subir a la silla alta de la barra dl desayunador para darle de almorzar a su pequeño cachorro de lindos ojos verdes.

Desayunó y salió al patio de su casa a jugar, junto con su hermana Jeongyeon, estaban jugando alegremente a la pelota cuando el pequeño sintió una extraña sensación en su pecho, la cual fue persistente por unos minutos, pero luego paró por completo, y decidió no tomarle importancia y seguir jugando.

jeongyeon estaba algo preocupada por el rizado, habían pasado un par de horas que salieron al patio a jugar, jugaron múltiples juegos, leyeron varios libros e incluso vieron un documental completo de cómo se creó la atmósfera y Mingyu había presentado raros comportamientos e inquietudes no comunes en su aura tranquila.

Eran poco más de las doce del mediodía, y los familiares comenzaron a llegar, dos primos más se sumaron a jugar con los otros dos pequeños, jugaban a las escondidas cuando Mingyu comenzó a tener un terrible dolor en sus encías, comenzando a llorar escandalosamente alertando a todos de inmediato, quienes corrieron a auxiliarlo, el dolor era tan persistente que el rizado no podía siquiera hablar.

Sus padres preocupados por su bienestar decidieron llevarlo al médico, quien por más que indagó en el pequeño, no encontró nada malo en su anatomía, y dijo que quizá ese dolor de encías era causado por una pronta presentación.

Cuando los cachorros nacen, desde su desarrollo en el vientre de su madre se sabe si será Alfa u Omega, debido al olor que emanan desde su madre, sin embargo, hay una madurez en su lobo cuando crecen, experimentado cambios sexuales, en el caso de los alfas, colmillos, altura, ensanchamiento de voz, y otros cuantos cambios más gráficos, sin embargo esos ocurren en transcurso de tiempo, en la presentación, sus colmillos de leche se caen, siendo remplazados por grandes y filosos colmillos, se presenta su primer celo, y su aroma se define por completo.

En un niño de siete años no es sano ni normal que se presente a una edad tan temprana, era preocupante el hecho de que un niño viva con una necesidad de un lobo maduro, era algo de esperarse, ya que al ser alfa puro, su presentación vendría mucho antes que la de un alfa común,  sin embargo era demasiado pronto aún así, Jeongyeon ya se había presentado, a una edad de diez años, y en definitiva era una gran Alfa Lupus.

Minjae y Sejeong decidieron no preocuparse demasiado, y dejar a la naturaleza actuar, ya que afortunadamente mingyu de nuevo se encontraba bien.

El rizado leía uno de sus libros favoritos cuando una rara sensación se esparció por su pecho, era indescriptible para un niño, era demasiado fuerte, era una rara necesidad que no podía describir.

Mingyu corrió hacia su madre en busca de respuestas.

"Mamá" Dijo el pequeño tocando persistentemente el brazo de su madre para que le prestara atención.

"¿Qué ocurre, cariño?, ¿el dolor volvió?"

"No, pero siento raro"

Sejeong arrugó el entrecejo pensativamente, y con fuerza cargó a su cachorro entre sus brazos.