Violentometro [Velvet y Veneer]

Controlar/Prohibir (Alternativo)

Aclaro que este capitulo no es canon en la historia, es solo la idea original que tenia de este capitulo en sí.

Veneer se despertó a las 5:20 AM, recordó todo lo que paso en la noche  y se levanto del piso yendo a su cuarto a ducharse y cambiarse.

Le dolía un poco el cuerpo, pero decidió salir a tomar aire y pensar en lo sucedido.

Después de todo, no es como si a su hermana la fuera a importar ¿Verdad?

Velvet se levanto a las 6 AM, si bien recordaba todo, la verdad no le importo mucho, se ducho, para luego arreglarse frente al espejo.

Al terminar, salio a la cocina y al no ver a Veneer preparando el desayuno se molesto

 —Despierta ya fracasado inu— No termino de hablar al ver que su hermano no estaba en su habitación.

Quedo confundida y se puso a buscarlo rápidamente en toda la casa, cosa que se le dificulto porque era muy grande —¿Dónde estas? Maldito inútil—pensó.

—¿Qué?¡No, esto no puede estar pasando!— Se dijo a si misma después de buscarlo por casi una hora

—¡Veneer!¡Si esto es una broma, no es gracioso!— grito al aire sin recibir respuesta —¡Sal de donde sea que estés!¡No puedes esconderte de mi para siempre!— Nuevamente solo hubo silencio

Velvet desesperada se agarro la cabeza —No, no es posible— se decía a si misma

Miles de pensamientos pasaron por su cabeza y una de ellos fue que Veneer fue a delatarla.

—¡No! ¿¡Por qué a mi!? — Grito alterada, nuevamente sentía miedo

Su corazón y respiración se acelero, podía sentirlo, camino hacia atrás, hasta chocar contra la pared, sentándose lentamente en el piso

Pensaba que su hermano la había traicionado, y en cualquier momento llegaría la policía a arrestarla, se terminaría su fama, y acabaría en prisión, donde no sería nadie.

En un arranque de ira y desesperación se levanto, agarro todo lo que encontró y lo arrojo al piso, maldiciendo en voz alta a su hermano, sentía que ese sería su final, en prisión siendo una persona mas del montón

—¡No!¡No me puede estar pasando esto!¿Por qué?— Dijo mientras lágrimas empezaron a salir de sus ojos, recordó algo, tenía una capsula de cianuro escondida en su cuarto

Sin dudarlo, fue a su habitación y la agarró, apenas lleguen a arrestarla se lo tomaría, prefería morir siendo famosa, que vivir en prisión siendo nadie.

Odiaba a su hermano, lo consideraba el culpable de sus desgracias, iba empezar a insultarlo mentalmente hasta que pensó, si bien su hermano pudo haberla delatado, no tenía evidencias ¿Verdad?

Se acordó de los trolls, ellos eran la única evidencia que creía, los busco rápidamente y al encontrarlos todos, se sintió un poco aliviada —pero, y si inspeccionan la casa buscando evidencias— pensó.

No podía deshacerse de ellos, se quedaría sin talento, y sin talento no había fama; se acordó de las empanadas que hizo hace tiempo y el mito del talento que tendría si se comía un troll, no tenia muchas opciones ni tiempo, solo había algo que hacer, algo muy cuestionable hasta para ella misma.

Sintió mucho asco al comérselos vivos, pero lo hizo, uno a uno, mientras aguantaba las ganas de vomitar y sentía la sangre saliendo por su boca.

Al acabar, tomo un vaso de agua para digerir mejor, era consciente de lo que había hecho, aunque no se arrepentía ni un poco, lo consideró un sacrificio necesario para asegurar su fama.