18.

467 49 0
                                    

Cora y Spencer entraron en una cafetería para pedir algo de beber antes de ir a trabajar

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Cora y Spencer entraron en una cafetería para pedir algo de beber antes de ir a trabajar. Spencer se sentó en una mesa mientras Cora pedía sus cafés.

Él la observó, pues todavía presentaba secuelas leves del accidente: algún moretón en el brazo, costillas y rasguños en las piernas y la cara.

Cora comenzó a hablar con el camarero, quien estaba flirteando con ella, y ella no dejaba de responder a sus insinuaciones.

Spencer se levantó de su silla y se puso al lado de Cora, pasando un brazo por su hombro para agarrar su café; luego, tendría que pagarle a ella.

-Hola, ¿nos vamos ya?- preguntó.

-No sabía que... - respondió el camarero.

-Yo tampoco.- contestó Cora, claramente enfadada, mientras empezaba a caminar hacia la salida.

-Cora, espera.- la agarró del brazo, pero ella se soltó.

-¿A qué ha venido eso?- se cruzó de brazos.

-No lo sé. Simplemente me salió de dentro, lo siento.

-Ya, pues estaba teniendo una conversación de lo más agradable con un chico que me interesaba.

-¿Te interesaba?- preguntó Spencer, y Cora se dio cuenta de lo que había dicho.

-Lo hacía, hasta que me has arrebatado la oportunidad.- se acercó un poco a él.- Spencer, desde que me separé de Tucker, juré no volver a abrir mi corazón a nadie. Estuve demasiado años encerrada en una relación que no me hacía ningún bien, mira cómo acabó. Cuando llegó aquí, pensé que a lo mejor podría volver a querer a alguien como le había querido a él. Y lo hice... - se quedó mirándolo.

-¿Te refieres a mí?- ella cerró los ojos e inspiró fuertemente a la vez que asintió.

-Sí, Reid, con lo inteligente que eres, me cuesta comprender cómo no te diste cuenta antes.

-Yo no... lo siento.- dijo él.

-Bueno, supongo que tú no tienes la culpa.- se dio la vuelta y empezó a caminar de nuevo hacia Quantico.

Spencer la siguió corriendo y le agarró la mano, dándole la vuelta y dejando un profundo beso en sus labios. Ella se separó de él y le dio una bofetada.

-No te aproveches de mí, Spencer. No te atrevas.

-No lo hacía, no lo hago.- dijo él, mientras su labio comenzaba a temblar y sus ojos a lagrimear.

-Como se te ocurra decir algo más, no dudaré en darte otra bofetada.- le señaló con el dedo. En ese momento, volvieron a acercarse, pero unos disparos los interrumpieron.

Ambos se tiraron al suelo como el resto de las personas. Sacaron sus armas e intentaron identificar al tirador. Se pusieron espalda con espalda y Cora marcó el teléfono de Hotch.

-Hotch, estamos en la cafetería Reuben 's, tenemos un tirador.- le dijo mientras se quedaba en silencio.- Dios mío. -Spencer miró en su dirección.- Hay muchos heridos... Hotch.- Ella colgó y salió corriendo a socorrer a la gente. Se cruzaron con Morgan, quien también comenzó a evacuar a las personas.

-¡Cora!- gritó Spencer sin bajar su pistola. Se acercó a una chica que estaba socorriendo a un hombre.- Somos los agentes Cora Santos y el Dr. Reid, del FBI, estamos aquí, te pondrás bien. ¿Has podido verlo?- el hombre moreno negó.

-Está bien, ya he llamado a Hotch. Estará aquí en menos de cinco minutos.- Cora miró a Morgan, se quitó su camiseta, quedando solo en camiseta interior, y se la puso al hombre en la herida de bala que había recibido en el estómago.

-¿Qué ha pasado aquí?- preguntó Morgan al volver a guardar su arma.- ¿Ha sido un atentado?

-Lo dudo. Mira las víctimas.- dijo Spencer mientras miraba a su alrededor.- Aunque varía la edad, todos comparten características físicas. Hombres morenos de ojos oscuros.- Cora, acto seguido, lo miró.

-Sal de aquí ahora mismo.

-No corro peligro, el tirador ya se ha ido.

-Eso no lo sabes.- respondió ella. Se separó del hombre herido en cuanto llegaron los servicios de emergencia.

La morena comenzó a castañear del frío, así que Spencer se quitó su chaqueta para dársela a ella, que la aceptó con agradecimiento. Se tapó y se sentó en un bordillo, mientras intentaba limpiarse las manos de sangre.

Hotch, Emily y Rossi llegaron y precintaron todo el lugar. Morgan, Cora y Spencer les dieron todos los datos que tenían y se fueron de inmediato a Quantico, donde podrían empezar con el perfil, tanto del sudes como del geográfico.

En Quántico, Cora se cambió de ropa y cuando salió, se cruzó con Rossi, que la abrazó de lado, hacía bastante tiempo que no hablaban, y Rossi tenía la sensación de que su relación, aunque seguía siendo preciosa, se había enfriado un poco.

-Bien, Picco, Hotch me lo ha dicho, el caso es todo tuyo.- ella sonrió y le devolvió el abrazo al italiano.

-Guay, voy a tener a nonno bajo mi control.

-No te emociones demasiado, cubana.- ambos rieron y se reunieron con el resto del equipo.

Tick, tick... BOOM [SPENCER REID X FEM OC] EN EDICIÓNDonde viven las historias. Descúbrelo ahora