Aquí vamos de nuevo....

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La hora de dormir, después de un largo día...

-Descansa- dijo Sanemi a Giyuu.

-Igual...- éste cayó dormido rápidamente, Sanemi sonrió y lo abrazó.

Senjuro no podía dormir, estaba asustado, confundido y mareado, todo había ocurrido tan rápido... ¿Su hermano habría vivido o sentido lo mismo? O ¿Había vivido algo peor? No lo sabía, pero su hermano era... Un pilar, uno muy fuerte, él no lo era.

-Oye, Senjuro ¿Así te llamas, no?- preguntó Genya a su lado.

-Ah, sí- confirmó éste.

-¿Tampoco puedes dormir?- le preguntó el chico de cicatrices.

-No... 

Genya suspiró mientras cerraba los ojos.

-El mundo cada vez se pone mas raro, y peligroso- dijo el azabache.

Senjuro se quedó callado, escuchando atentamente.

-Tú no eres cazador...- observó Genya, mirándolo.

-No... Nunca pude hacer que el color de mi katana cambiara.

Genya no dijo nada.

-Y te sientes mal, ¿Verdad?

Senjuro se quedó en silencio de nuevo.

-Sí... Mi hermano se convirtió en pilar, creo que lo decepcioné, mi familia también fue parte de los cazadores de demonios.

-...¿Sabes? Yo tampoco pude usar una katana- confesó el azabache.

-Pero... eres un cazador- Senjuro también volteó a verlo.

-Pues, uso mi escopeta, las balas con especiales, creadas con el mismo material que una katana nichirin.

-Vaya... Al menos tú tuviste el valor y deseo de encontrar otra forma.

-...No creo que tu hermano esté decepcionado de ti, se ve que te quiere mucho.

Senjuro suspiró.

-Además, no tienes que ser un cazador solo porque toda tu familia lo fue.

Senjuro sonrió.

Al día siguiente, estaba claro que iban a hacer, ir directo a ese tal laboratorio para la cura, y tal vez podrían salir.

Claro que antes que eso, comieron para tener energía.

Shinobu, Iguro, Gyomei, Kokushibo y Douma, ya habían descubierto que había muertos vivientes dispuestos a matarlos, pero, ya que fueron transportados allí cuando tenían un día libre, por lo que no llevaban sus katanas, y eso sería un problema.

El clima ahí era lluvioso, rara vez se veía el sol, cosa que era ventaja para las dos lunas superiores.

-¿Ya deberíamos salir?- preguntó Shinobu, mirando afuera de una ventana.

Seguían escondidos en un local, y se veían a los zombis caminando, lento, sin un objetivo en mente.

-Yo digo que ya- dijo Iguro, haciendo lo mismo que la pilar-. No olviden el plan.

Douma y Kokushibo asintieron, y salieron primero.

-No creo que sea necesario usar las técnicas- comentó Douma ya afuera, mientras todos los zombis corrían hacia ellos, gruñendo.

-Supongo, pero, para acabar más rápido.- Kokushibo sonrió y utilizó su respiración de la luna, o técnica demoníaca.

 Primera postura: Luna oscura - Santuario nocturno: Vigilia de festival.

Lanzó un corte en vertical hacia un grupo enorme de aquellas horribles cosas, partiéndolos en dos.

Ahora era turno de Douma.

Princesas de la Ventisca Blanca

Se congelaron, y eso fue suficiente para que la primera luna superior hiciera lo mismo que con los anteriores.

-Creo que ya hay menos, salgan- avisó Douma a sus compañeros.

-Gracias- dijo Shinobu sonriendo.

-¿Creen que los demás estén aquí?- preguntó Iguro luego de agradecer de nuevo.

-No lo sé- habló Gyomei, suspirando con cansancio.- No he sabido de ellos.

-Entonces, ¿Deberíamos buscarlos? O no- inquirió Kokushibo.

-No se... ¡Dios! Esto es estresante, no podemos descansar ni una maldita vez- exclamó Iguro, de nuevo, Kaburamaru no estaba con él.

-Si tan solo hubiéramos aparecido todos como la última vez...

-Mejor aún ¡No hubiéramos aparecido aquí! Estoy harto- Iguro interrumpió a Shinobu, exclamando con pesar.

-Bajen la voz- pidió Kokushibo.

-Bien- Iguro se agarró la cabeza con ambas manos, sin saber qué hacer, o a dónde ir.

Su amiga lo tranquilizó, junto con Gyomei.

-Avancemos por ahora- sugirió Douma.

-¿Y a dónde?- quiso saber Gyomei.

-Aún no sabemos si están aquí los demás, pero hay que estar seguros al cien por ciento- dijo Kokushibo.

-De acuerdo, y estar alerta de esas cosas, de nuevo- gruñó Iguro.

-Pareces Sanemi con esa cara- dijo Douma mientras reía.

-Ay no, él es peor- añadió Iguro.

Shinobu iba al lado de Gyomei, suspirando. No estaba tan preocupada esta vez, ya habían logrado salir del infierno al que fueron la última vez, seguramente lograrían hacerlo de nuevo. Pero claro, si sus amigos estaban ahí, primero tendrían que encontrarlos, y juntos, buscar la manera de salir. 

-Ahí vienen mas de ellos- avisó Kokushibo, preparado para acabar con los zombis que veían hacia ellos, él y Douma.

-¡Listo!- exclamó Tengen, con una gran mochila a la espalda, si bien no los dejaron recuperar sus armas esta vez, les dieron ropa, comida y mas cosas para aquel viaje que iban a hacer.

-Los llevaré lo más cerca que pueda- dijo Haruto, dentro de la camioneta.

-Gracias- agradeció Kyojuro.

Todos estaban ya listos para una nueva, pero peligrosa aventura.




KNY In a Zombie Apocalypse... |De Cyn_1704|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora