Tengo un corazón de lobo y a un lobo en el corazón (Wyatt Lykensen)

Luna Culpable

 Era el día del baile y estaba muy emocionado por ir con Win, pensar todo el tiempo que perdimos, pero ahora estamos juntos, los últimos momentos, pero no me importa si los paso junto a ella.

 Eso claro, sería más fácil si supiera dónde está. Estamos a punto de ir a la Preparatoria y ella no ha llegado a la cueva aún.

- ¿Por qué tan preocupado hermano? - preguntó Willa.

- Es Win, no llega.

- Creo que te acostumbraste a que este siempre en la cueva desde lo de la Planta.

- ¿No recuerdas que dijo que iba a buscar ropa en su casa zombie? - Preguntó Winter. - Cuñado -agregó con una sonrisa divertida. - Willa, eso significa que somos con-cuñadas.

- No te emociones tanto, Winter. - Willa volvió a su actitud seria y fría y se fue.

- Loba tonta, ¿por qué haces esos comentarios tontos todo el tiempo? - Winter comenzó a darse ligeros golpes como hacia cada vez que metía la pata.

- ¡Ey, Con-cuñada! ¿Vienes o no? Tenemos que arreglarnos. - le gritó Willa desde la puerta de su cueva personal.

- Voy. - dijo Winter y salió detrás de ella corriendo.

- Bueno supongo que también debo arreglarme y dejar de preocuparme.

 Nos habíamos reunido con los zombies a la salida de su Ciudad.

 Busqué a Win entre ellos sin encontrarla. Cuando llegué a su hermano y sus amigos pregunté por ella.

- Dijo que tenía que buscar una cosa que olvidó en la cueva antes de venir, que nos adelantaramos. - Zed se encogió de hombros.

 Fruncí el ceño decidido a ir a buscarla, pero de repente Winter tosió y supe que Win hubiera preferido que me encargara de ella. Solía decirme "No te preocupes tanto, a veces te pareces a Willa, olvidas que no estás solo en esto, me tienes a mi".  Así que sacudí la cabeza y nos acercamos a la preparatoria.

 Cuando Bucky nos vió soltó:

- ¿Qué es eso?

 Todos teníamos trajes y vestidos elegantes. Los lobos no eramos muy propensos a usar esa clase de prendas ya que no eran prácticos en el bosque, pero aún así teníamos un gusto fino en casi todo y la vestimenta no era la excepción.

 Winter le había regalado a Win un vestido de confección lobuna. No me habían dejado verlo, pero escuché algo sobre tela de la noche, una tela muy delicada que solo unos pocos sabían hilar.

- Son los hombres lobo.

- ¿Con ropa formal? - dijeron los Acey's, según Win así les decían, me sonaba algo rídiculo pero debía ser cosa de humanos.

- Se ven... bien. - dijo la rubia y los otros la miraron mal.

 Nos paramos frente a Bucky, que obstaculizaba la puerta.

- No pueden estar aquí, - dijo mirándonos con una mezcla de cansancio y asco, con un toque de mal humor. - Hay leyes contra esto.

- Las malas leyes se hicieron para romperse. - dijo Zed tranquilamente.

- Los monstruos no obedecen reglas. - complementó Eliza. Ella y Zed chocaron sus manos. - Los zombies son parte de Seabrooke, merecemos estar aquí.

- También somos parte de Seabrooke - intervine. - De hecho, de la original. - alcé mis cejas y le di una sonrisa que mostró mis colmillos. 

 - Alguien tiene que detenerlos. - fue su respuesta y se acercó a la alarma anti monstruos.

 Willa activó su collar y le gruño.

- Que lo disfruten.

 Pasamos al gimasio que estaba decorado con guirnaldas, luces y con música ambiental, me quede cerca de los que estaban más debiles, pero en mi cabeza rondaba una pregunta. ¿Dónde estás Win?

 Estaba en un lugar aún más oscuro que una cueva, tomando una muy mala desición. Eso estoy haciendo. El vestido no era muy cómodo para la situación, pero tuve que ponermelo para que los chicos no sospecharan.

 No quería hacer esto, pero era necesario, eso hacen los personajes de las leyendas y la profecías. Debía hacerlo si quería salvar a mi manada. Así que me encaminé a las minas debajo de la Planta de Seabrook.

 Antes de entrar miré a la Luna una última vez, culpándola y pidiendo que le diga a Wyatt que lo sentía, pero que llegaría algo tarde al baile.

 Sigo viva, sí, trataré de traer la otra parte dentro de poco, por ahora, una sola pregunta ¿En qué te estás metiendo Win? (además de en una mina obvio).