Capítulo 4

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Pov. Riley

Hoy era un día lluvioso en el colegio, me encanta mucho este clima, era muy relajante, bueno, no lo era tanto, se arruinaba la tranquilidad con Adrián.

—Si te vuelves a acercar a mi novia, no dudaré en golpearte, maldita lesbiana.

Si, que día más tranquilo.

Adrián me tenía acorralada junto con sus amigos, aún no entiendo porque me pedía eso, ni siquiera me acerco a su noviecita.

—No me interesa tu novia—. Le dije mirándola a los ojos sin mostrar alguna expresión, no me sentía intimidada.

Él solamente me miraba molestó, me estaba preparando para lo peor.

—Estas advertida rarita—. Dicho esto Adrián se alejo y sus amigos fueron detrás de él.

Yo solo miraba como se alejaban mientras se acercaban con otros chicos para "intimidar". Lo único que hacían era dar pena.

Camine hasta mi salón y al llegar tome asiento, mire por la ventana y se veía bastante nublado, eso significaba que lloverá todo el día, por una parte estaba bien y en la otra no mucho, no estaba preparada para el clima.

—Jovenes, pongan atención—. Él profesor se recargo en su escritorio y todos los miraron para prestar atención.—Quiero hacerles un examen sobre los temas ya vistos años atrás, pero antes de eso quiero que hagan una exposición sobre un tema que les guste, eso será en parejas.

Todos comenzaron a pararse de su lugar y formar el equipo.

—Pero yo los formaré, solo serán dos personas

Al decir eso todos comenzaron a quejarse, no pude evitar reírme por el momento.

—Bien, Riley Andersen con Valentina Ortiz

Pare de reír al escuchar ese nombre tan desagradable, no podía creer que me tocará con aquella chica.

—¿¡Qué!?—. Valentina se levantó de su asiento.—No puede juntarme con ella

—Ya lo hice—. Dijo el profesor ignorando complemente los reclamos de Valentina.

Él seguía haciendo los equipos mientras que Valentina me miraba algo molesta, lo único que pude hacer fue forzar una sonrisa mientras movía mi mano en forma de saludo.

Después de tantos reclamos el profesor había terminado, pero Valentina no se rendía y seguía quejándose.

—Valentina, los equipos ya están—. Dijo el profesor mirando a Valentina.—Además, Riley no se está quejando.

Valentina me miró como si esperara a que dijera algo ante eso, pero sabíamos bien que el profesor no iba a cambiar de opinión, así que solo desvíe la mirada ignorando completamente a Valentina.

Miraba como caía la lluvia por la ventana, no prestaba atención a lo que pasaba al rededor, lo único que podia escuchar ahora, era el sonido de la lluvia.

—Entonces

Me gire para ver a Valentina y tenerla enfrente hacía que me pusiera bastante nerviosa y mi corazón latía con fuerza, es como una bomba a punto de estallar.

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