Capítulo 11

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Pov. Valentina

El día transcurrió con normalidad, pero lo único malo eran las personas que se acercaban a preguntarme si estaba bien y ofrecerme algunos caramelos. Mientras que otras solo murmuraban cosas que no lograba entender, pero sabía bien que no era nada agradable lo que decían de mí.

Caminaba por los pasillos del colegio acompañada de Danny, era imposible no llamar la atención de los demás, todas las miradas se posaban hacía nosotras.

—Me alegro de verte, capitana—. Dijo una chica mientras pasaba por nuestro lado mostrando una sonrisa.

Danny por su parte solo podía reír por la situación.

—Esto es muy incómodo, pero divertido a la vez—. Dijo mientras miraba a las personas con algo de diversión.

Yo solo pude soltar un pequeño suspiro de frustración, seguí caminando con naturalidad sin mirar a las personas, esto me estresaba cada vez más.

Al llegar a los vestidores las demás jugadoras no preguntaron nada sobre lo que había ocurrido, supongo que ya se habrían enterado de todo.

—Hoy entrenarán solas, quiero que den lo mejor de ustedes en la pista—. Rápidamente todas me miraron y dejaron de hacer sus cosas para prestar atención.—Hay que entrenar duro para vencer a las Blackhawks y demostrarles que las Firehawks son mejores que ellas.

Las jugadoras asintieron con la cabeza para después salir de los vestidores, menos Danny.

—Que emotivas palabras, me suena a que la capitana nos explotará en este entrenamiento, ¿Verdad?—. Pregunto curzandose de brazos.

—No, pero ya que lo mencionas, no estaría mal hacerte explotar a ti—. Le dije mientras me daba la vuelta y comenzar a caminar hacia el campo dejándola sola.

A lo lejos pude escuchar la voz de Danny llamarme muy enojada, no pude evitar soltar una risa por imaginar la cara que tenía en este momento.

(...)

Desde las gradas observaba cada movimiento de las jugadoras, cada pase y sus habilidades al tener el disco bajo su control. Todas son buenas jugadoras, pero había una persona que aún tenía problemas al tener el disco, esa persona era Grace.

Sus movimientos eran impresionantes, pero al tomar el disco se podía ver la dificultad de moverse y tenerlo bajo control. Lo cual se me hacía extraño, en el juego no tuvo problema y ahora es todo lo contrario, al parecer no entrenaba con el mismo entusiasmo.

—¡Tomen un descanso!—. Alce la voz para que pudieran escucharme.

Las jugadoras pararon con el entrenamiento y se acercaron a las gradas para tomar un descanso, trataba de buscar con la mirada a Grace, pero no lograba verla. Segundos después pude escuchar un par de risas detrás mío, me gire para ver de quiénes se trataban y era Riley y Bree recibiendo a Grace muy felices y felicitándola por su esfuerzo en el entrenamiento.

—Disimula un poco, te las vas a comer con la mirada—. Comento Danny quitándose su casco.

—Ya que estás aquí, tengo un trabajo para ti—. Aparte mi mirada de ellas para mirar a Danny.

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