𝖮𝗇𝖾 𝖲𝗁𝗈𝗍𝗌 | 𝐆𝐫𝐢𝐬𝐡𝐚𝐯𝐞𝐫𝐬𝐞

𝖢𝗁𝗂𝖼𝖺 𝖽𝗎𝖾𝗇𝖽𝖾𝖼𝗂𝗅𝗅𝗈 | 𝐊𝐚𝐳 𝐁𝐫𝐞𝐤𝐤𝐞𝐫

ᴛᴏᴅᴏs ʟᴏs ᴅᴇʀᴇᴄʜᴏs ʏ ᴄʀᴇ́ᴅɪᴛᴏs ᴅᴇ ᴇsᴛᴀ́ ᴏʙʀᴀ ᴘᴇʀᴛᴇɴᴇᴄᴇɴ ᴀ: 𝐬𝐰𝐚𝐧𝐢𝐦𝐚𝐠𝐢𝐧𝐞𝐬

—Vaya... realmente te esforzaste mucho —comentó Jesper al ver tu pelo.

Antes habías tenido el pelo largo, casi tanto como el de Inej, más te habías aburrido de tener que cepillarlo durante media hora todas las mañanas para que luciera decente durante el día y no pareciera un nido de pájaros, también de no poder dormir durante horas después de una ducha, y ahora te habías cortado el pelo largo, pasando a ser lo que se diría muy corto.

Como el cabello corto de un niño.

— ¿Crees que se ve bonito? —preguntaste nerviosamente mientras pasabas la mano por encima. Habías querido un corte pixie durante meses, pero habías estado asustada y nerviosa de que realmente te quedara bien, de si te arrepentirías de ello. De si se vería ridículo. Pero a juzgar por las sonrisas de admiración de todos, te quedaba bastante bien.

Escuchaste pasos que bajaban las escaleras y Kaz apareció en lo alto de la escalera, bajando lentamente. Lo miraste y se detuvo por un momento, casi sin reconocerte. Te veías impresionante. Parpadeó y se aclaró la garganta.

—Mira, has dejado sin palabras incluso a Kaz —dijo Nina riendo—. Puede que acabes siendo la Reina del Barril.

Tus mejillas se calentaron inmediatamente y Kaz le lanzó una mirada de advertencia al desgarrador corazón.

— Cuidado, Zenik —gruñó, te miró de nuevo y luego dirigió su atención a la mesa donde estaban sentados el resto de los Cuervos.

— Tengo un nuevo trabajo. Hablaremos de los detalles más tarde hoy —les informó a todos y se dio la vuelta para volver a subir. Una vez que estuvo de vuelta en el ático, todos se giraron para mirarte con sonrisas burlonas.

— Le encanta —comentó Inej.

— No es broma, lo oí jadear. Probablemente pensó que esta belleza es digna de una santa —Nina se mordió el labio mientras te señalaba—.  Le encanta.

— ¿De verdad lo crees? —murmuraste mientras tus mejillas aumentaban su temperatura.

—Sí —dijeron todos al unísono, lo que te hizo inclinar la cabeza y sonreír para ti misma. Te sentiste realmente hermosa en ese momento y Kaz pensó lo mismo.

ᴛʀᴀᴅᴜᴄᴄɪᴏ́ɴ ᴀᴜᴛᴏʀɪᴢᴀᴅᴀ