Hey, JungKook (Kookmin)

33 Canciones Especiales

"Todas esas otras chicas, bueno, son hermosas pero,

¿escribirían una canción para ti?"

Había pasado un rato considerable desde que JiMin se durmió después de haberle hecho el amor suavemente y con mucho cariño. A veces empezaban de ese modo, otras ocasiones iniciaban rudo.

JungKook ha pasado todo ese rato observando cómo su hermoso chico rubio duerme tranquilamente. Le encanta estar a su lado, así como también le encanta tener sexo con él en la casa del árbol. Ésta se había vuelto en una especie de primer hogar para los dos, porque estaba más que claro que JiMin no había llevado a nadie más ahí, sólo a su madre. Ni TaeHyung subía, así que era un lugar especial para ambos.

Tenían que aprovechar todos estos días en vista de que le curso había terminado. Hoy fue el baile de graduación y decidieron continuar la fiesta con sus cuerpos desnudos durante toda la madrugada. En este punto las cosas estaban resueltas, por ejemplo; el equipo de basquetbol consiguió obtener el campeonato, JungKook y TaeHyung lograron entrar a la universidad que eligieron y todos aprobaron el curso satisfactoriamente.

De SoHee no supieron absolutamente nada desde aquel día. Su padre fue al instituto para darla de baja definitiva en vista de que la acusaron de bullying. Al parecer JiMin no era el único al que intentó golpear y sus compañeras de equipo recibían malos tratos por parte de ella, así que esta vez no terminó el ciclo escolar y se fue para ocultarse en su casa, ya que salir le causaba ansiedad. Además, sus padres estaban furiosos y esta vez no lograron utilizar su dinero para "limpiar" su reputación mancillada. Esta vez SoHee recibiría un castigo por parte de ellos y estaba segura de que la enviarían a un internado.

Del futuro brillante como Idol ya no quedaba nada, porque realmente nunca existió y trató de conseguirlo por otros medios. Así que al final obtuvo lo que merecía.

Tanto JiMin como JungKook estaban ajenos a eso, así que no se preocupaban de nada. Todo lo que tuviera que ver con ella ya no les importaba. Tampoco a TaeHyung ni a Hobi. Ellos estaban mejor que nunca teniendo citas románticas que eran bastante divertidas. Y al día de hoy se mantenían de ese modo, porque tal parecía que Hobi se haría más difícil de lo que planeó.

Por ahora no hay preocupaciones, sólo el hecho de que, cuando acabe el verano, tendrán que separarse porque los chicos mayores deben ir a la universidad y se mudarán temporalmente a un departamento cerca de las facultades. Pero ahora JungKook no pensaba en eso, porque lo único que tenía en mente era follar a su lindo novio en una posición de cuatro y luego las que se le vinieran a la mente.

Nunca se cansará de admirar lo bonito que es, sobre todo sus labios formando un puchero debido a la presión de su mejilla con el cojín. No puede evitar rozar con la yema de los dedos esa parte de su rostro y luego los desliza por su mejilla ligeramente sonrojada debido al calor que vivieron en antelación. Su piel es suave y clara, tan perfecta que parece irreal.

JiMin es el ser etéreo de este mundo.

Y lo mejor es que es suyo.

—Eres tan bonito—susurró y se acomodó de lado apoyándose en su brazo para verlo mejor—A veces no puedo creer que me perdí de todo esto por estar tonteando con alguien que no valía ni la cuarta parte de lo que tú vales—hizo una pausa y se acercó más para apreciarlo mejor—Eres mi todo, JiMin. Eres el primero para mí y siempre lo serás, porque yo no quiero estar con nadie más.