Hey, JungKook (Kookmin)

03 Un Ángel Encantador

"Porque no puedo evitarlo si luces como un ángel"

JungKook no sabía exactamente cómo manejar la situación. JiMin era quien pensaba con cabeza fría y se inmutaba en cometer locuras, por eso ahora la pasaba con él todo el tiempo, además de que SoHee no ha detenido sus coqueteos. Todo a espaldas de TaeHyung, claro está. Y eso es lo que lo hace rabiar por dentro y siente que de un momento a otro perderá la paciencia y le gritará un par de cosas a esa chica que la hagan sentir muy miserable por estar jugando de esa manera con su mejor amigo.

La perspectiva que tenía de ella ha cambiado radicalmente y lo único que quiere es salvar a TaeHyung de un posible corazón roto. Él no se merece eso, porque está más que claro que sus sentimientos por ella son completamente sinceros y que también se está entregando por completo a esa relación.

Lo que quisiera saber es ¿por qué SoHee está haciendo todo esto?

Tal vez pronto lo averiguará.

Después de horas eternas en clases, buscó a JiMin en su salón para iniciar con el plan que acordaron días atrás, sin embrago no lo encontró. Fue rápidamente hasta donde sabía que estaba su casillero y por fin pudo dar con él; por primera vez en mucho tiempo no lo veía con su sudadera holgada cubriéndole el cuerpo, esta vez traía puesto un pantalón de chándal y una camisa blanca que se amoldaba a su cuerpo y que dejaba al descubierto parte de sus clavículas. Se quedó pasmado por unos cuantos segundos porque esto era muy inusual ya que, regularmente, JiMin no expone mucho de su cuerpo a esa magnitud.

Y la verdad se veía bastante bien.

—Hey, enano—se acercó a él con un poco de impaciencia—Supe que SoHee irá a una heladería del centro con sus amigas—informó ansioso—Yo creo que esta es nuestra oportunidad para intentar conseguir pruebas.

El rubio se acomodó las gafas y parpadeó por unos cuantos segundos. Lo había olvidado por completo. Durante todo el día no había pensado en otra cosa que no fuese lo que está a punto de hacer y también había olvidado decirle a JungKook que hoy era el día.

—Lo siento, pero... hoy es mi audición—informó con un poco de nervios.

El pelimorado se tomó unos cuantos segundos para procesar esas palabras. También había olvidado preguntarle si realmente se inscribió en el club de baile o si simplemente fueron palabras al aire. Con todo lo que sucedió su cabeza daba una y mil vueltas con lo mismo, pero piensa que hay cosas más importantes que hacer.

— ¿Por qué no me lo dijiste? —inquirió emocionado—¿Es ahora?

—Sí—respondió con un hilo de voz—Soy el número trece.

—Joder—sonrió contento—Entonces vamos—lo tomó de una mañeca y lo jaló para comenzar a caminar.

— ¡¿Qué?! ¡No! ¡Espera! —intentó zafarse, pero no podía— ¿Estarás ahí?

—Por supuesto— se detuvo para responderle y le dedicó una mirada intensa—Fui yo quien te convenció de hacerlo, así que quiero estar ahí para apoyarte.

—Pero ¿y SoHee? —lo miró con cautela. No quería recibir una mala respuesta.

—Eso puede esperar—hizo un mohín de desagrado—Ahora tu audición es más importante.

Y con eso fue suficiente para que JiMin se dejara hacer por la mano de JungKook mientras esboza una linda sonrisa boba y enamorada. Hobi también sonrió y fue detrás de ellos. Piensa que tal vez pueda haber algo más que sólo un plan para conseguir pruebas o que sólo una amistad de años. Tenía un presentimiento con ellos dos y eso le hacía sentir bien por JiMin.