๋࣭ ⭑⚝ 𝐂𝐀𝐏𝐈𝐓𝐔𝐋𝐎 𝟎𝟐

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⤑  CUSTODIA DE ADHARA



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En el Ministerio de Magia, un auror se dirigió a Sirius con frialdad. "Estamos en proceso de trasladarte a Azkaban. No hay apelaciones, ni juicios, ni siquiera una última palabra."

Sirius levantó la cabeza con dificultad, su voz quebrada por el dolor y el cansancio. "¡No...! ¡No pueden hacer esto! ¡Soy inocente! ¡Pettigrew es el verdadero traidor! ¡No me han dado ni una sola oportunidad para demostrarlo!"

El auror lo miró sin mostrar ninguna emoción. "No hay nada que discutir. El Wizengamot ha decidido que no eres digno de un juicio. Acepta tu destino."

Sirius se volvió hacia Remus Lupin, que estaba en la esquina de la sala, mirando con el corazón roto. "Remus... ¿es esto todo lo que me queda? ¿No puedo decir nada en mi defensa? ¿No puedo ver a mi hija por última vez?"

Remus, con lágrimas en los ojos, intentó acercarse, pero los aurors lo detuvieron. "Sirius, lo siento... No hay nada más que pueda hacer. Te prometo que cuidaré de Adhara.

Sirius asintió débilmente, su mirada llena de tristeza y desesperanza. "Cuídala... por favor. Ella es todo lo que tengo..." fueron sus últimos palabras.

Horas mas tarde la bebé se encontraba en la casa de su tía Andromeda , durmiendo en una cuna improvisada. La situacion en la casa estaba llena de tristeza y preocupación. Andromeda, con los ojos hinchados de llorar, acariciaba suavemente la frente de la pequeña Adhara.

"¿Cómo pudo pasar esto, Ted?" preguntó Andromeda con voz temblorosa a su esposo. "Mi primo... siempre fue tan fuerte. Y ahora..."

Ted Tonks la abrazó, tratando de ofrecerle consuelo. "Lo sé, querida. Pero debemos ser fuertes por la pequeña. Ella nos necesita ahora más que nunca."

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De repente, se oyó un leve golpeteo en la puerta. Andromeda se levantó rápidamente, limpiándose las lágrimas. Al abrir la puerta, se encontró con Albus Dumbledore, su expresión grave pero serena.

"Buenas noches, Señora Tonks," saludó Dumbledore con suavidad. "Lamento mucho lo que ha sucedido. He venido para asegurarme de que la pequeña esté a salvo."

Andromeda asintió, invitándolo a entrar. "Gracias. Está aquí, durmiendo. Es todo tan... irreal."

Dumbledore entró en la casa, seguido de cerca por Remus Lupin, quien lucía abatido pero decidido.

𝐓𝐎𝐔𝐑𝐉𝐎𝐔𝐑𝐒 𝐍𝐎𝐈𝐑 "𝙋𝙞𝙚𝙙𝙧𝙖 𝙁𝙞𝙡𝙤𝙨𝙤𝙛𝙖𝙡"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora