•°•°•°•
Obanai miró por la ventana del auto la casa de Tomioka, quedándose congelado un par de segundos sintiendo muchos nervios en su interior, no podía recordar la última vez que pudo ir a la casa de un amigo y aunque sería para estudiar no dudaría también que jugarían un poco al terminar.
Antes de bajarse del auto giro su rostro viendo a su mamá, quien mantenía las manos en el volante mirando crítica y un poco impaciente a su hijo, esperando probablemente algunas palabras de él o que ya se baje del auto.
El niño apretó el bolso en sus piernas intentando mover sus labios en alguna palabra, conocía que si enojaba a su mamá podría arrancar el vehículo y no dejarlo ir con Giyū.
—¿Me vendrá a buscar?— Preguntó buscando entre sus cosas su mascarilla, poniéndosela antes de bajarse del auto.
—No, estaré ocupada.— Dijo sería, aflojando un poco más su rostro.— ¿Tienes dinero de vuelta o tengo que darte?
—Tengo dinero.— Revisó de todas formas su bolsa verificando tener la cantidad suficiente para un taxi o un transporte público.— Llegaré temprano a casa.
—Yo llegaré tarde a casa.
Perfecto.
Pensó Obanai colocando un gesto satisfecho, sintiéndose más cómodo a la idea de llegar y estar solo sin preocuparse del humor de su progenitora, ni que le haga preguntas rutinarias que no llegan a ningún lado.
—Adios-.
—Espera.— Interrumpió la mujer cuando escuchó que su hijo quitó el seguro de la puerta.— ¿Cómo me aseguras que solo vas a estudiar?
—¿A qué se refiere?
—No sé qué relación tengas con ese niño, pero es obvio que te gusta.— Obanai hizo una mueca, bastante sorprendido y casi abre la boca para negarlo tontamente, pero un gesto de su madre con la mano lo calló en segundos.— ¿Me lo vas a negar? Te conozco, nunca te había visto tan a la defensiva por alguien antes.
El rostro de Obanai se calentaba con cada segundo que pasaba, no pensó que su madre lo notaría pues para comenzar no le había comentado mayor cosa.
—No pensé que le importaría.— Admitió avergonzado, un poco asustado sobre qué piensa su mamá.
-—En realidad no me importa.— El niño tras escuchar eso ladeó la cabeza alzando una ceja sin entender demasiado, ¿si no le importa por qué pregunta? Es estúpido.— Solo me desagrada, no pensé que tuvieses esos gustos.
—No le importa, entonces mis gustos no son su problema.— Confesó Obanai colocándose bien su bolso, a punto de salir del auto cuando escucho como desde el volante su madre volvió a colocar los seguros.- ¿Qué?
—No respondiste mi pregunta, ¿qué me asegura que solo van a estudiar? Vuelvo y repito, te conozco lo suficiente como para no confiar en tí.
No, no me conoces.
—Mamá, no somos nada, haremos solo la tarea, ¿feliz?— Quejó hastiado, avergonzado y molesto.
—No, no lo estoy. Ese niño es insoportable.— Obanai apretó los labios aguantando gritarle rodando los ojos con los brazos cruzados, encogiéndose en el asiento.
Para la próxima vez prefiere aprender y perderse él solito en el transporte público que pedirle ayuda a su madre, ¡odia con su alma cuando se queja de sus gustos o amigos!
Nadie ni nada es suficiente, pareciera como si Obanai le estuviese pidiendo opinión porque nunca deja de hablar.
—Ya cállate, mamá.— Susurró por lo bajo, perdiendo la paciencia, su voz fue tapada por el cubrebocas. Tomo todo el aire que pudo para no perder la compostura y volvió a mirar a la mujer.— Llevamos bastante estacionados, ¿ya me puedo ir?
ESTÁS LEYENDO
•-Notas en clase-•GiyuOba•
FanfictionNotas escritas por dos enamorados. °° °° °° °° °° °° °° °° °° ×AU ESCOLAR× Obanai y Giyū son estudiantes. °° °° °° Capítulos cortos. Actualizaciones rápidas. °° °° °° °° Si no te gusta este ship, eres libre de irte sin dejar malos comentarios. ¡So...
