Tu Vida es mi Vida: A R T I E G O (Arturo Izquierdo × Diego Serrano)

Capítulo 14 - ¡Un Muy Buen Abogado!

HORAS ANTES

-Golpeame -le pidió Matilde al chico.

-¿Estás loca o qué? -se negó, apartándose de ella.

-¡Vamos, no seas cobarde!

-¿Por qué simplemente no lo haces tú misma?

-Tiene que verse real, si lo hago yo misma se notará en mis puños. Además, no creo tener el valor suficiente para golpearme yo misma.

-No lo sé, Matilde. ¿No te parece arriesgado?

-Bueno ya, menos charla y explicaciones, y más acción.

-Más te vale no involucrarme después, eh.

-Por eso mismo, te irás inmediatamente del pueblo, pero no sin antes llamar a la policía como un testigo que presenció cómo Arturo Izquierdo y Diego Lugo me agredieron, ¿okay? -le explicó una vez más.

-Sí, sí...

El chico suspiró y se dio unos segundos para tomar valor para lo que iba a hacer: golpear a una mujer.

-¿Qué esperas? ¡Golpeame! -le exigió a gritos hasta que finalmente recibió dichos golpes.

MOMENTO ACTUAL

>> DIEGO <<

Los oficiales nos trasladaron al ministerio público tratándonos como unos verdaderos delincuentes. Por suerte, antes de que nos encerraran, hicimos uso de nuestro derecho a una llamada, por lo que mi abuelo ya debería estar en camino para acá.

-Arturo, tengo miedo -le confieso.

-No tienes por qué, saldremos de aquí porque no hay nada que pruebe que nosotros le hicimos eso.

Nos encontramos encerrados en la delegación, y para acabarla, junto a otros delincuentes en la misma celda.

-Estos tipos dan miedo -le susurro.

-No los mires, mejor céntrate en mí ¿sí? -me toma de la mano discretamente.

Yo me acurruco en su hombro y el apoya su cabeza con la mía. Esta demostración llama la atención de un par de sujetos y en sus rostros reflejan burla; las agresiones contra nosotros son inminentes.

MIENTRAS TANTO
En casa de la familia Izquierdo...

-¿Ya estás mejor? -le pregunta el hombre.

-De algún modo, yo me lo busqué -ingiere una pastilla para aliviar el dolor de abdomen.-¿En qué estaba pensando al llamarla para que se encargara de separarlos?

-Sí, al principio me pareció algo absurdo, pero lo único que querías era que nuestro hijo volviera al camino correcto.

-Esa inmunda me aseguro que Arturo iba a lamentar haberla rechazado -se levanta cuidadosamente del sofá.-No podemos permitir que le haga daño a nuestro hijo.

-¿Eso significa que...?

-Que hay que sacarla de nuestras vidas a como dé lugar.

>> DIEGO <<

Uno de los tipos se acerca y se pone frente a nosotros.

-¿Qué pasó, princesas? -nos dice agraciado.-

-¿Algún problema? -le pregunta Arturo sin dejar de sujetarme la mano.

-Me sorprende ver a un par de niños riquillos en un lugar como este, es todo -ríe.