Cartas a un chico lindo

Lo Mejor

Me desperté más temprano hoy por las inusuales voces en la casa. Era evidente que eran de mis padres, pero no esperaba verlos hoy.

Yo y Liam llevábamos unos dos o tres meses viviendo aquí mientras nuestros padres arreglaban sus "problemas". Aunque la palabra divorcio nunca había sido mencionada, era más que obvio que se trataba de eso. Ellos mandaron a Liam conmigo para que no se expusiera a un ambiente tenso o estresante, pero, a decir verdad, no creo que yo fuera la mejor opción. Por suerte, logré acostumbrarme.

Me apresuré a vestirme y vi a mi madre en la cocina mientras preparaba el desayuno.

Me acerqué a ella y la saludé con un abrazo.-¿Liam ya te vio? -pregunté, tratando de sonar calmado.

-No, aún no despierta -respondió ella, sonando más tranquila de lo que esperaba.

-Te extrañé, pero no esperaba verte aquí tan pronto -confesé, tratando de sonar casual.

-Tu padre y yo pensamos que era necesario venir a hablar contigo -Ella suspiro algo estresada. -Tal vez tarde mucho en venir, pero necesitábamos hablar.-

-Supongo que entonces la respuesta no es positiva -dije, sabiendo lo que venía.

-Tal vez es lo mejor para todos -respondió, susurrando.

-¿Con quién se irá Liam? -pregunté, tratando de contener mis emociones.

-Posiblemente contigo mientras se lleva a cabo el proceso legal. Tú estarás aquí, así que no quedarás en la custodia de alguien como tal -
explicó ella, tratando de sonar segura.

-Comprendo -dije, aunque a pesar de querer mantenerme fuerte, no pude evitar que unas cuantas lágrimas escaparan de mis ojos.-

Cariño, esto es lo mejor para todos. Simplemente ya no funciona -dijo ella, abrazándome más fuerte.-

Supongo que vendrás a visitarme seguido, ¿no? -pregunté, tratando de buscar algo positivo.

-Claro que lo haré -aseguró ella, sonriendo débilmente.

-¿Y papá? -pregunté, intentando mantener la conversación.

-Fue a despejarse y observar cómo es este lugar quiere vivir cerca tuyo.-Su respuesta fue calmada, pero podía sentir la tensión detrás de sus palabras.

-Okey, despierta a Liam. Ya casi es hora de clases -dije, tratando de cambiar de tema.

Almorcé y terminé de alistarme mientras esperaba a Liam. El sonido de pasos lentos y pesados me indicó que mi padre había regresado. Al verlo, su expresión parecía cansada, pero determinada. Sabía que este sería el momento en que tendríamos que hablar con Liam.

-Buenos días, padre-dije, tratando de sonar más animado de lo que me sentía.

-Buenos días, hijo. ¿Podemos hablar antes de que despiertes a Liam? -preguntó él, su voz baja y seria.

Asentí y nos sentamos en la mesa de la cocina. Mi madre se unió a nosotros, y juntos discutimos cómo abordaríamos el tema con Liam.

Finalmente, subí a despertar a Liam. Encontrarlo dormido, plácidamente con una expresión pacífica, hizo que el nudo en mi garganta se apretara aún más.

Lo sacudí suavemente hasta que abrió los ojos.-Buenos días, pequeño. Mamá y papá están aquí y necesitan hablar contigo antes de ir a la escuela -dije, intentando sonar tranquilizador.

Liam se frotó los ojos asintió y bajo corriendo bastante alegre.

Nos sentamos en la sala y, con cuidado, mis padres le explicaron la situación. Usaron palabras simples y claras, pero el impacto fue inevitable.

Liam, entendió que su vida estaba a punto de cambiar drásticamente.

Después de la conversación, abrazó a nuestros padres, y aunque sus ojos estaban llenos de lágrimas, había una cierta calma en su aceptación.

Sabía que lo que más necesitaba ahora era sentir nuestro amor y apoyo, y eso era algo que estaba dispuesto a darle con todo mi corazón estaba dispuesto a hacer todo por mi hermano.

Después de que la situación se calmo yo lo lleve a clases aunque llegue tarde a las mías otra vez, estoy seguro de que me irá fatal en química.

Fui hacia mi casillero y comencé a sacar lo que necesitaría hoy y una pequeña sonrisa se formó en mi expresión cuando una carta cayo al piso.

¿Qué tal Alex?

Yo celoso, sabes porque? ¿No? Bueno igual te lo diré, vi a mi pequeño castaño con una chica de segundo año.

¿Así que te gustan mayores?

Que bien porque yo también soy de segundo año y alto así que me veré mayor para ti.

Atentamente: Un idiota enamorado

Me quede mirando la carta sonríendo a pesar que el día empezó con un gran desastre emocional estoy logro sacarme una sonrisa.

Guarde la carta en la mochila y corrí hacia la siguiente clase, en la hora de el almuerzo me dirigí con Jake y Madisson y puse la carta en la mesa.

-¿Y esto? - Pregunto Jake mientras tomaba la carta y la leía.

-Ni idea solo las dejan en mi casillero, encontré esta hoy por la mañana. -

-Bueno parece que tienes un admirador secreto deberías investigar un poco o ponerlas en el periodico mural para que deje de hacerlo - Dice Madison riendo.

Jake la interrumpe

-O tal vez deberías contestarle o esperar un poco para ver si te llegan más cartas? - Dijo Jake un tanto serio.

-Madisson de hecho creo que te mencionan en la carta - Dije divertido por la situación.

Madison la toma y comienza a leerla.

-Creo que puse celoso a tu admirador secreto, almenos ya sabes que es de segundo año. -