Pov. Pablo
Marizza me dijo que quería pasar la última semana con su papá, por lo que no podría ayudarme con Nacho en la semana.
Porfin me arreglé con Paula, ya estamos mejor que nunca. Ahora estabamos en su casa y ella dormía en mi pecho mientras yo veía una película. Su teléfono sonaba y me desconcertó el filme, así que lo tomé para colgar, pero antes de hacerlo, Paula despertó.
–Déjalo, amor.– me lo quitó y lo apagó.
–No estabas tan dormida, eh.– dije picandola.
–El ruido me despertó.– se estremeció y se estiró.– Iré por algo de comer.– me dio un beso en la mejilla y bajó.
Minutos después, yo bajé y la seguí.
–Si, claro, prometo que te hablo después.– decía por llamada– Chao.
–¿Era tu mamá?– ella saltó del susto 6 yo reí.
–¡Por Dios, Pablo! ¡Casi me matas de un susto!– ponía su mano en su pecho, dramáticamente.
–Lo siento.– la abracé por la espalda y besé su cabeza.
–Deja. Sos un empalagoso.– me empujó.
–Ay, dale, no seas así.
–Bueno, pero ayúdame con esto.— me dio dos platos.
–Lechuga, tomate y espinaca con jugo verde... ¿Queres desnutrirme?
–No, lo que pasa es que la semana pasada te vi unos kilos de más.
–¿Disculpa?
–No quiero un novio gordo.– ella me ignoró y subió las escaleras. Subí detrás de ella y le di su plato.
–¿Puedo un poco de lo tuyo almenos?
–Amor, es eso o hacer ejercicio.
–Hago ejercicio, estoy en forma, no sé de qué hablas.
–Deberías verte al espejo.– le puso play a la película, otra vez, ignorandome completamente.
Suspiré– Ahora vuelvo.– me paré y fui al baño para verme en el espejo. ¿De qué habla esta mina, si soy un bombón? Aunque quizás si, estoy un poco gordo y... No lo sé, ella es la futura nutriologa.
Seguimos viendo la película hasta que me llegó un mensaje al teléfono.
–¿Tomi?
–¿Qué?– me preguntó ella.
–Ahora vuelvo.
–Contesta acá, no me molesta.
–Pero es...
–Contesta.
–Bueno....– respondí la llamada– Hola, ¿Tomi?
–Hola, Pablo. ¿Queres ir al boliche hoy? Vienen las chicas.
–Eh...– Paula me miraba fijamente.
–Son ellos o yo.– me dio las opciones y me puse nervioso. Ella me admitió que se sentía sola cuando la dejó por ellos, por eso quiere estar conmigo, y no quiero que se sienta así.
–No puedo, Tomás, debo ir a lo de mamá.
–Oh, bueno, a la próxima será.
–Sí.– sonreí nervioso y colgué.
–Así me gusta, amor.– Paula se acurrucó en mi pecho.
Pov. Marizza
–¡Ja, ja, ja! ¡Eso fue mega divertido!– estábamos recordando viejas anécdotas mientras comíamos helado.
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Otra Cara Del Amor // Pablizza.
Fanfiction¿Alguna vez te has sentido no deseado? No de no planeado, si no de, literalmente, no deseado. Que nadie te quiere y que sos la mal pieza que nadie puede componer. Te sentís vacío aunque tengas todo. No sé qué me falta. Talvez amor, aunque muchos me...