mascara

25

*Belén, campanas de Belén,
que los ángeles tocan
¿Qué nuevas me traéis?*

Durante toda la tarde Miguel estuvo ansioso, preguntaba la hora a cada rato y al llegar a la casa recogió los juguetes que Anahí le había estado diciendo desde hace tres días que guardara, todo para que Alfonso viera que él era ordenado.

Anahí estaba nerviosa y en más de una oportunidad se preguntó a sí misma si había hecho bien en seguirle el juego a Miguel e invitarlo, pero mientras más lo pensaba, más le gustaba la idea de pasar nuevamente una navidad junto a él y ahora también junto a Miguel, aunque las circunstancias no fueran las ideales y eso no cambiara las cosas entre ellos. Junta con Mayra prepararon la cena mientras Miguel veía Mi Pobre Angelito I, cuando dejaron el pavo en el horno Mayra arregló la mesa con candelabros y velas, todo en motivos navideños, al igual que el mantel, los cubiertos y las servilletas, Anahí bañó a Miguel para cambiarlo y que estuviera ordenado. Al terminar, Miguel se sentó en la alfombra del living escuchando villancicos y se quedó mirando el pesebre y las luces del árbol de navidad.

Anahí estaba en su cuarto viendo que ponerse, después de probarse más de cinco suéter diferente, siete blusas, pantalones y faldas, escogió un suéter blanco con cuello levantado, una falda hasta la rodilla color café y botas del mismo color.

Alfonso llegó un poco antes de las 21:30 hrs. con una botella de champaña, el postre para después de cenar y un regalo para Miguel. Al escuchar el timbre Miguel corrió a la puerta,

- Miguel: Que bueno que llegas, ya me estaba aburriendo,
Se quitó de la puerta para que Alfonso entrara,
- Miguel: Mi mamá todavía se está arreglando y Mayra quien sabe, parece que todas las mujeres son iguales,
Alfonso se rió,
- Alfonso: ¿Y cómo te portaste durante la tarde?
- Miguel: Umm, más o menos,
Miró el pesebre,
- Miguel: Quebré a José,
- Alfonso: ¿Y no te cortaste?
- Miguel: No, es que estaba jugando y se me cayó al suelo, Mayra lo recogió,
- Alfonso: Entonces si no te pasó nada no es tan grave, después se repone,
- Miguel: Pues sí, pero mi mamá igual me retó, dice que soy un terremoto... Y mis profesoras dicen lo mismo, el otro día hasta la llamaron para hablar con ella,
- Alfonso: ¿Y qué hiciste?
- Miguel: Nada, la profesora me tiene mala,
Alfonso sonrió,
- Alfonso: Así que a ti también te tienen mala,
- Miguel: Sí ¿A ti tampoco te querían tus profesores cuando eras chico?
- Alfonso: No mucho, también era inquieto, al igual que tú,
Se quedó un instante en silencio mirándolo,
- Alfonso: Bueno, pero algo tuviste que haber hecho para que mandaran a buscar a tu mamá,
- Miguel: Es que dicen que hablo mucho ¿Tú crees que hablo mucho?
- Alfonso: Más o menos, pero es preferible hablar mucho a ser una estatua,
- Miguel: Por fin alguien me entiende,

Siguieron conversando por un rato más, Miguel le hacía preguntas a Alfonso y le pedía que le contara cosas de cuando él era chico para saber si se parecían o no en algo.

Mientas Mayra terminaba de poner la mesa, Anahí estaba en la cocina viendo que la comida estuviera lista,

- Mayra: Miguel, no aburras a Alfonso con tantas preguntas,
- Miguel: No lo estoy aburriendo,
Miró a Alfonso quien estaba sentado a su lado,
- Miguel: ¿O si?
- Alfonso: No, no te preocupes,
Miró a Anahí quien estaba poniendo en la mesa las ensaladas,
- Alfonso: ¿Las ayudo en algo?
- Anahí: Con mantener a Miguel quieto por más de 1 segundo estás haciendo mucho,
- Mayra: Ya está listo,

Los cuatro se sentaron a la mesa para cenar, Miguel entre Anahí y Alfonso, y mientras cenaban siguió con las preguntas,

- Miguel: ¿Cuándo te conociste con mi mamá?
- Alfonso: Hace mucho tiempo,
- Anahí: Ya Miguel, come,
- Miguel: Quiero saber...
Miró a Alfonso,
- Miguel: ¿Y alguna vez fueron novios?
Anahí miró a Miguel, Alfonso se aclaró la garganta y tomó agua,
- Mayra: Se te a enfriar el pavo Miguel,