Cazandote (Harco)

Extra 1

Después de destruir a Theodore en todos los sentidos, Harry se encargó de sobornar al ministro de Italia, ya que intentaron acusarlo de intento de terrorismo a causa del basilisco, pues este se había comido a medio gabinete que formaban parte del consejo de magia Italiano, también accedió a ayudar un poco con el caos que había en el país al igual que en Londres; la corrupción y las mafias se estaban saliendo de control.

Llevo a Draco y a Cissy a un hotel 5 estrellas, donde se tuvieron que quedar 3 semanas mientras el recuperaba fuerzas y resolvía pendientes en el país.

Las primeras semanas fueron conflictivas para los 3, pues la mujer acababa de perder a su esposo y Draco a su padre, Harry estuvo ahí apoyando y protegiendo a ambos en su duelo, aún estaban en shock, quizás Lucius no había sido el mejor padre del mundo, pero aun así dió su vida para salvar la de su hijo, en un intento de redimir sus errores.

Draco sentia el pesar y la culpa en su corazón, aún cuando su madre le había confirmado que nada de lo que habia pasado era culpa suya.

Fue un largo proceso pero Draco pudo superarlo, gracias a las caricias, consuelos y el amor que le brindaba su amado.

4 meses después

-Harry creo que me estoy muriendo, se quejaba Draco entre sollozos sentado a un costado del inodoro.

-Creo que deberíamos llamar a un medimago, no entiendo porque no quieres, protestó Harry frustrado, limpiando las lágrimas de las mejillas del rubio con su mano.

-No, no quiero, se volteo haciendo un puchero, que hacía enternecer a Harry, quien siempre terminaba por acceder a sus peticiones.

Ya tenía sus sospechas desde hace 1 mes, Draco se sentía más cansado, malhumorado, vomitaba al oler cualquier tipo de comida que no deseaba comer, sus antojos habían aumentado y su vientre estaba ligeramente abultado, pero Draco se negaba a llamar a un medimago para confirmarlo, solo le quedaba ser paciente.

Tampoco es que haya planeado aver embarazo a Draco tan rápido, el quería disfrutar de la compañía de su amado, hasta que las cosas se salieron de control una noche....

[...]

3 meses atrás

Después de regresar de Italia, Draco no encontró una casa destruida como recordaba haber dejado.

Harry había mandado a construir una mansión el doble de grande que la anterior, incluso se veía más brillante y alegre que la antigua y vieja mansión, todo estaba diferente, el jardín, los interiores y el personal de servicio, ya no habían elfos quien los reciban, sino que ahora trabajaban personas, tambien habían varios aurores rondando por el patio, para resguardar la seguridad, se excuso Harry.

Tuvieron un exhausto camino hasta casa, ya que Theodore había destruido los transportadores para retrasar a Harry, tuvieron que viajar en avión, ambos estaban débiles así que les recomendaron no usar polvos flu porque Harry al tener heridas abiertas aún podría reintegrarse de malas formas, a Draco no le gustaba la idea de estar rodeado de tantos muggles, así que Harry decidió comprar un jet privado para tener más privacidad e incluso compro un auto.

Al llegar Draco solo quería llegar a su habitación y dormir, luego daría un recorrido por la mansión, observo a los alrededores, un espectácular candelabro colgaba elegantemente del techo, la cama cubierta con suaves sabanas de seda, se sorprendió al ver una televisión retraible a los pies de la cama, pero le pareció interesante ya que en el avión también habían muchas cosas muggles.

-Pensé que un poco de tecnología no nos vendría mal, comentó Harry, dándole una suave sonrisa

-Supongo que es interesante, ¿Construiste todo esto mientras yo no estaba?, pregunto curioso, pasando sus manos apreciando la suavidad de la cama.