⁰ El príncipe de las tinieblas - Aidan Gallagher

⁰²⁰ | Mɪɴᴜᴛᴏs

¡Los golpes resuenan en todo el vestíbulo!

¿¿??: ¡Abran inmediatamente! ¡Es una orden!

Kate y yo nos miramos, perdidas, sin saber qué hacer.

Me agarró a la gran puerta, nadita segura. Los golpes que está dando esa mujer son muy feroces.

Justo cuando toco el pomo, Kate me detiene.

Kate: ¿Y si esperamos a Silas o a otro consejero? ¡Esa vampiro está completamente rabiosa!

Han cesado los gritos... ¿Se habrá marchado esa fiera? Activo mi oído vampírico...

Un latido regular rasga al silencio... Oh, ¡no puede ser!

_____: Kate, ¡no es una vampiro, sino una humana en peligro!

Sin pensármelo más, abro la puerta para socorrerla.

Entra en tromba un torbellino rubio en el vestíbulo.

¿¿??: ¿Dónde está? ¿Quién manda aquí?

Kate y yo nos echamos para atrás un poco. La joven se pone a mirar por todas partes, nerviosa.

Kate: _____, ¿tú qué crees? ¿Cómo ha podido encontrar ella el Arcano? ¿El edificio no está supuestamente protegido por unos artefactos?

¿¿??: ¿De qué están hablando ustedes? ¡Exijo ver a Jack! ¡JACK!

Kate: ¿Jack? Un momento, ¿usted viene a ver a Jack?

¿¿??: ¡Por supuesto! Jack es mi novio, ¡y está desaparecido desde lo de aquella noche en ese restaurante raro! Él me había hablado de ese lugar. ¡Estoy segura de que está aquí!

Kate y yo nos miramos de nuevo, preocupadas. Nos resultaría difícil decirle lo que ha sido de Jack.

Silas: ¿Qué está pasando aquí? Son admisibles todos esos gritos.

¿¿??: Me llamo Samantha Gautier y exijo ver a mi novio Jack. ¿He sido lo suficientemente clara?

Sí que tiene agallas esta chiquita... ¡No es consciente de que se está dirigiendo uno de los vampiros más poderosos del planeta!

Silas: Sí está muy claro señorita Gautier. No obstante, eso es imposible. Jack no está disponible de momento.

_____: Samantha, no conseguirás nada gritando de esa manera y dándonos órdenes. Las cosas no funcionan así.

Kate: Silas, ¿de verdad que no es posible? ¿Aunque solo fuera para que Samantha se quedara tranquila?

Silas se pone tenso. Yo quiero saber quién es esta Samantha y como ha hecho para encontrarnos. Activo mi facultad vampírica.

Qué raro, no percibo nada. Es como si un Samanta no existiera o estuviera bloqueando mis poderes. ¿Es realmente humana?

Silas: Lo siento muchísimo, pero usted no tiene permiso para permanecer aquí, señorita Gautier.  Jack la contactará en cuanto pueda.

Samantha: Así que yo tenía razón: ¿está aquí? ¿Qué le han hecho? ¡Quiero verle!

Silas ya no sonríe en absoluto. Se acerca a Samanta, la agarra del brazo y la empuja hacia la salida.

Silas: No puede quedarse aquí. Está en una propiedad privada. ¡Salga de aquí ahora mismo!

Samanta intenta resistirse, pero no puede competir con Silas.

Él desaparece un momento con ella. Las protestas de Samantha se alejan.

Kate y yo nos hemos quedado pasmadas, boquiabiertas, ante esta situación surrealista.