XXXIV

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HORMIGEO 3 DIA 5

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HORMIGEO 3 DIA 5

Lupe entro un día más al servidor del Hormigeo, sabía que había sido suerte sobrevivir en las pruebas finales del día anterior.

— Amigos, quizás hoy sea el último día. Uno nunca sabe, pero me la he estado pasando muy bien, el Roier me ha dejado morir, pero no pasa nada.

— Hola Lupe. —  Apareció el personaje de Roier frente a ella. 

—¡Mejor Amigo! Justo estaba pensando en ti.

— ¿Estás lista para tu último día en el Hormigeo? 

—Listísima. 

— Pendeja, debes decir que no. —  la regaña mientras Lupe se ríe.

 — ¿Que pedo? — llego Aldo con ellos.

— ¡Aldo Yeo! — lo saludo Roier

—  Hola, Aldo. ¿Ya viste wey? Yo solita he sobrevivido.

— Por pena te han dejado vivir, ¡Garnet! Te doy permiso de matar a Lu.

— Mátame, me vale.

— ¡No! Mis papis se están peleando.

— Mira Lupe, si te matan no digas que no te advertí. — le dijo para después alejarse

— ¡Aldo! — lo comenzó a seguir — Aldo, no papu. Era broma. 

 El personaje de Aldo se detuvo y la miro. — Te perdono, ¿estas equipada y todo? 

— Si, ayer me la pase buscando cosas. Pero todo bien.

— ¿Estás lista para sobrevivir un día más?

— No sé, quizás hoy muera.

— ¡No mames, Lupe! No vas a morir, mira hacemos lo mismo que cuando estuvimos juntos en el QSMP, no mas no te alejes, nos estamos juntos. 

— Va, pero ya no es mi pedo si te me pierdes.

Después desaparecieron separándolos para ver el PVP entre Vicky y Ded.

 — No mames.

— Uno mío contra la Lupe. — apareció Roier junto a ella.

— No mames, me muero no más apareciendo en el coliseo. —  dice y ambos se comenzaron a reír. 

— ¡Puertas abiertas, vámonos! — grito Roier y su personaje comenzó a correr y ella lo siguió para salir del hormiguero.

Lupe se fue a buscar más recursos.

— Hola, Lupe. —  escucho que alguien la saludo y volteo a buscar de quien se trataba.

—  Hola Stephanie. — le respondió mientras ella se alejaba.

La chica comenzó a hablar con su chat, hasta que noto como un chapulín cayo enfrente de ella y después brinco para atacarla.

—¡No mames! — grito llamando la atención de los de su alrededor, puso en su mano un totem y segundos después lo rompió, el chapulín desapareció.

No Hay Nadie Como Tu || AldoGeoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora