Capitulo 9

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Boom estaba sentado en su oficina, una amplia y elegante habitación decorada con un estilo minimalista. Las paredes blancas, el mobiliario de líneas simples y los grandes ventanales que dejaban entrar la luz natural daban al espacio una atmósfera de tranquilidad y orden. Frente a él, Joss ocupaba una silla, con su habitual aire de confianza y entusiasmo. La conversación giraba en torno a un tema que había sido recurrente en los últimos años: el nuevo proyecto de Joss.

—Esto es lo más grande que he planeado hasta ahora —dijo Joss, su voz llena de pasión—. Quiero construir el casino más lujoso de Tailandia. Algo que rivalice con el Bellagio de las vegas o el Venetian Macao. Boom asintió, recordando cómo, hace cinco años, había decidido asociarse con Joss. En ese tiempo, se había encargado de administrar los negocios de Joss, convirtiéndose en una pieza clave del imperio que habían construido.

—Pero sabes que hay un gran obstáculo —respondió Boom, manteniendo su tono calmado y profesional—. No es legal, y para una construcción como la que estas planeando definitivamente necesitamos los permisos, esto ya no es apuestas de carreras que se arreglen en efectivo y que se pueda lavar en una cafetería.

Joss sonrió, una sonrisa que Boom conocía bien. Era la sonrisa de alguien que no veía los problemas, sino solo soluciones esperando ser descubiertas.

—Lo sé, Boom. Pero he estado trabajando en ello. Hay formas de hacerlo funcionar. Estoy en contacto con algunos inversores internacionales y hay... métodos para sortear las restricciones legales. Solo necesito a las personas adecuadas a mi lado, y sé que tú eres una de ellas.

Boom sintió una punzada de preocupación. Sabía que Joss era capaz de lograr cosas increíbles, pero también sabía que los métodos que sugería no siempre eran los más legales o éticos. Aun así, la ambición de Joss era contagiosa, y Boom no podía evitar sentirse intrigado.

—¿Y qué esperas de mí en todo esto? —preguntó Boom, queriendo entender mejor su rol en este ambicioso plan.

Joss se inclinó hacia adelante, sus ojos brillando con entusiasmo.

—Necesito que manejes algunos de los aspectos operativos y de relaciones públicas. Tienes el carisma y la inteligencia para hacer que esto funcione. Además, quiero que seas mi socio en este proyecto. Con tu ayuda, podemos hacer historia.

—He estado pensando en expandir nuestros negocios. Pero esta vez, quiero hacerlo de una manera que no solo nos beneficie financieramente, sino que también nos dé una mejor imagen pública. Necesitamos alguien que pueda manejar las relaciones públicas y representarnos de manera efectiva.

Boom sintió una punzada de nerviosismo. La idea de estar en el centro de atención no le gustaba, prefería operar detrás de escena.

—¿Estás diciendo que quieres que yo me encargue de eso? —preguntó Boom, tratando de ocultar su preocupación.

Joss asintió lentamente.

—Sí, Boom. Creo que eres la persona perfecta para este trabajo. Conoces todos los detalles de nuestros negocios y tienes la habilidad de comunicarte de manera efectiva. Solo piénsalo. No tienes que decidir ahora mismo.

Boom asintió, sabiendo muy bien que, a pesar de sus reservas, terminaría aceptando. Había sido la mano derecha de Joss durante años, y aunque prefería evitar los riesgos innecesarios, también entendía la importancia de esta nueva tarea. Sabía que aceptar significaría involucrarse aún más en algo arriesgado. Pero también sabía que rechazarlo podría significar perder una oportunidad única.

—Lo pensaré, Joss —dijo finalmente, tratando de sonar seguro—. Pero sabes que siempre he preferido trabajar detrás de escena.

Joss sonrió.

Retrato // AouBoomDonde viven las historias. Descúbrelo ahora